Como paciente saliente del Instituto de Rehabilitación Infantil Teletón de Santiago, ya me ofusca leer todos los días en los periódicos de papel y electrónicos, oír en la radio y ver en la televisión críticas sin fundamentos en contra de la campaña. 

Por lo visto estas personas solo quieren hacer daño a los que estamos de pie gracias a la Teletón, así como también hacer una lavada de cerebro a las personas y provocar un fracaso como en 1995 o un “casi” como lo fue en 2003. 

A mí en la Teletón nunca se me negó atención ni se me postergó, puesto que todo su equipo, ya sean médicos, kinesiólogos, terapeutas ocupacionales, educadoras, enfermeros, auxiliares, administrativos, en fin, valen oro y se nota que todo su trabajo lo hacen como corresponde. 
A esta gente se le nota que no han ingresado a un Instituto Teletón, ni menos que han visto los controles médicos, las hidroterapias, clases, terapias, curaciones, cirugías, etc. Yo me pregunto ¿hasta cuándo? 

Si ellos quieren no creer en la campaña, están en su derecho, no lo discuto ¿Pero, por qué hay que aguantarles que insistan en inducir a los que sí creemos en ella a no hacerlo? Les gusta insultar, pero no ser insultados. Yo tengo 21 años de edad, a los 11 ingresé a la Teletón producto de un atropello, y hasta mi último día estaré agradeciéndole infinitamente a la Teletón todo lo que hizo por mí, le guste a quien le guste.

FABIÁN WLADIMIR REYES ALBORNOZ

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