El día de miércoles 22 de enero, autoridades de SEREMI aseguraron que nuestro país está preparado para enfrentar este nuevo tipo de Coronavirus que comenzó propagándose en Wuhan, China y que posiblemente tendría nuevos casos en Colombia y Brasil. Me parece curioso, doloroso y una falta de respeto cómo esto podría ser posible. Me pregunto: ¿Cómo vamos a poder enfrentar una nueva cepa de un virus si ni siquiera podemos enfrentar un corte de luz en pabellón mientras ocurre una cirugía?¿Qué tan eficiente y de calidad es nuestro sistema de salud para enfrentar un nuevo tipo de neumonía? Si mientras unos deben invertir gran parte de su sueldo para atenderse en clínica, en los hospitales públicos la gente muere esperando por atención?.
En un Chile utópico nuestro sistema de salud a través de los distintos organismos y entidades ya sean físicas o financieras, debiese velar por mejorar y mantener la salud de la población. No obstante, según hemos visto desde hace años el sistema de salud chileno es antónimo de todos los adjetivos y verbos que he mencionado.
La inoperancia e ineficiencia del sistema no falla por sí solo, sino que la mayor responsabilidad la tienen los altos cargos de cada entidad que regulan todo este sistema, partiendo por el MINSAL hasta llegar a la misma SEREMI y los servicios de Salud. Nos encontramos bajo una cadena de errores que no han querido arreglar de raíz, en la cual se ha preferido entregar soluciones esporádicas y poco eficientes. Tampoco se ha querido invertir en un buen Ministerio de Ciencia, que si bien, existe desde el2018, no se han desarrollado grandes avances e incluso se han presentado recortes de presupuesto. Somos un país privilegiado, en cuanto a sus paisajes, flora y fauna, no obstante, Chile sigue presentando el menor % PIB de inversión en ciencia de la OCDE (0,4% de un promedio de2,4%), contamos con excelentes becados y futuros profesionales, con investigaciones brillantes, pero trabajando a la deriva en laboratorios sin los resguardos necesarios para estabilidad laboral. Hechos que son solo ejemplos de una infinita lista de tareas en las cuales nos encontramos endeuda y debemos mejorar.
No basta solo con prevenir el contagio del Coronavirus o evitar vuelos a China, necesitamos con urgencia una reestructuración y reorganización completa de nuestro sistema de salud y que simultáneamente trabaje codo a codo con el nuevo Ministerio de Ciencia, ambos con personal capacitado para actuar y adoptar las políticas públicas que sean necesarias, tanto para el fomento de la investigación científica en nuevas epidemias y enfermedades, como para mejorar la salud pública. De esta forma, estaremos realmente preparados para la eventual llegada de esta nueva cepa a nuestro país.
Francisca Vidal Soto
Estudiante de Tecnología médica