Cuando la clasificadora de riesgo S&P (Standard & Poor´s), una de las tres agencias que califican la nota crediticia de los países, bajó el rating de Chile de AA- a A+, muchos, entre los que me incluyó, nos acordamos del ex ministro Arenas, la razón es que esta desvalorización se debe al continuo y prolongado exiguo crecimiento económico de nuestro Chile, y que tiene como detonante la renombrada Reforma Tributaria, cuya bandera era llevada por Arenas, quién tenía varias frases para el bronce, …que la pagarían los que tenían más…, …que alcanzaría para cubrir todos los requerimientos, entre ellos, la gratuidad universal…, …la inversión extranjera en nada se vería afectada y en consecuencia el crecimiento seguiría subiendo como la espuma y otras que más vale ni acordarse, o sea todo …miel sobre hojuela…, pero qué significa en palabras simples, lo que le ha ocurrido a Chile con esta recalificación, lo equivalente sería que si a la Sra. Juanita le ofrecían créditos las casas comerciales a tasas convenientes llamándola reiteradamente a su casa, ahora la cosa cambia, de partida todo se encarece, partiendo por la tasa de interés y lo más probable es que tenga que echar mano a sus ahorros, si porque con esta baja en el rating Chile deberá gastar como US$ 200 millones al año por solo el pago de intereses, de más está decir que lo ideal es volver pronto a su calificación anterior, sin duda una tarea muy difícil para el próximo gobierno, es como comenzar la carrera con una tremenda mochila en la espalda, tema muy importante que debe ser considerado por los votantes al decidir su voto en noviembre en la persona capaz de revertir la situación; El traer a colación al ex ministro Arenas con esta mala noticia, es solo para ejemplificar que todas las acciones acometidas por nuestras autoridades en sus cargos, son con cero responsabilidad posterior, ni siquiera la obligación de dar explicaciones por eventuales errores cometidos, malas decisiones, nada, como diría el Tío Rorro, “lo comío y lo bailao no se lo quita nadie” y la cuenta que la pague lo que queda de Moya,…, después de todo queda más que claro que la Reforma Tributaria fue hecha “al precio que sea”, y ese precio lo volvemos a pagar de nuevo los supuestamente beneficiados por la Reforma del ex ministro Arenas…
Luis Enrique Soler Milla