Cuando se revisan los acalorados debates, no exentos de exabruptos de los parlamentarios en el Congreso para decidir el escuálido reajuste de los empleados públicos, tengan ó no tengan razones económicas de financiamiento, da mucha envidia recordar  la manera expedita, fluida, “fast track” de cómo resolvieron el aumento de sus respectivas dietas…, tan diligente que casi no nos damos cuenta,  definitivamente para sus preocupaciones personales y corporativas son “Uno para todos, todos para uno” (Lado A), pero para las del resto de los  chilenos son “Todos contra todos” (Lado B)…

Luis Enrique Soler Milla

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