Hemos recorrido nuestra región para conversar con vecinas y vecinos de nuestras comunas y localidades, con el fin de seguir construyendo nuestro plan de gobierno inclusivo y representativo. Esta semana estuvimos en el Limarí y constatamos que existen tres grandes preocupaciones: la delincuencia, desigualdad territorial y la escasez de agua.Quizás uno podría pensar que la delincuencia solo amenaza a barrios urbanos, sin embargo ahora se expande impunemente también a los pueblos rurales, quitándoles su tranquilidad. La venta de droga es uno de los puntos que resaltan negativamente los vecinos, los que han tenido que denunciar muchas veces transacciones de drogas o plantaciones en sus barrios y localidades, pero dicen no ser escuchados. No podemos seguir permitiendo esto, debemos actuar pronto contra la delincuencia y el tráfico de drogas antes que la situación se nos vaya de las manos.Pero no solo la delincuencia preocupa en el Limarí, la desigualdad flagrante y violenta entre barrios y comunas de las zonas urbanas también está presente en los sectores rurales. Muchos aún no tienen una infraestructura básica, como agua potable, alcantarillado, electrificación o cobertura de internet. Ni hablar de las dificultades en la atención primaria y secundaria de salud, la que peca de un centralismo excesivo en las grandes urbes y aísla a quienes viven en los sectores rurales, quienes muchas veces tienen que pagar hasta 40 mil pesos para poder movilizarse a su posta más cercana donde ni siquiera pueden recibir una atención de especialistas. Y la escasez hídrica es una de las realidades más dolorosas y precaria en las localidades rurales. Hay lugares, como Nueva Vida en Ovalle, donde coexiste el racionamiento de agua para la bebida de los pequeños centros poblados y la exuberante vegetación de uvas, paltos y cítricos a escasos metros de sus casas. No podemos seguir permitiendo esto. La prioridad es clara: primero el agua para las personas, agua para la vida, después para cualquier otro afán.Debemos trabajar por mejorar estos tres problemas que hoy preocupan a nuestra gente. Seguridad, descentralización y cuidado del agua son hoy más que nunca los ejes en los que debemos trabajar, para lograr equiparar la cancha en nuestras 15 comunas de la región de Coquimbo.
Ricardo Cifuentes
