Ana María Sermeño nos cuenta que si bien nació en Antofagasta, a los pocos meses de nacida llegó hasta La Serena. De hecho, gran parte de su vida la pasó en la ciudad de Los Campanarios, donde forjó gran parte de su personalidad, su carácter y sus vínculos con la Democracia Cristiana, partido en el que milita activamente desde joven.
Un momento importante fue la época en que asumió como directora regional de Injuv, entre 2006 y 2009, experiencia que fue una suerte de escuela de servicio público. “Con pocos recursos y muchas ganas hacíamos muchas cosas. Las ganas estaban, eso era lo realmente fundamental. Fue una experiencia maravillosa. Dimos lo mejor de nosotros. También trabajé en el Servicio Nacional de la Mujer en la región”, asegura quien desde hace varios meses, y tras trabajar en Santiago en el Ministerio de Desarrollo Social, decidió emprender un atractivo desafío: postular como candidata a concejal por Santiago.
Y para poder acercarse con sus ideas a sus electores capitalinos, lo ha hecho con novedosas propuestas, sin – a su juicio- alejarse de su estilo directo y claro respecto a sus principios.
“Estamos muy contentos por una campaña a la cual le hemos puesto mucha mística. Son luchas que damos de corazón, porque con la nueva ley electoral las posibilidades son muy pocas en materia de recursos. La gente está muy triste, incluso para uno que milita en un partido político. La corrupción, la vulneración de derechos nos ha obligado a llevar adelante una campaña mucho más creativa. Queremos generar un nuevo trato, donde no sólo se involucren los vecinos que se sienten cerca de la Democracia Cristiana, sino todos los santiaguinos”.
Campaña distinta
El pasado 16 de septiembre, en la medialuna del Parque Padre Hurtado en la Región Metropolitana, fue detenida Ana María Sermeño, tras participar de una protesta de "No + Rodeo", donde cerca de 60 personas interrumpieron el desarrollo del torneo pensado en las yeguas. Luego de ingresar a la medialuna, fueron detenidos paulatinamente por los guardias y luego fueron trasladados hasta la 14ª Comisaría de La Reina. Ana María insiste en que lo hace netamente por un tema de convicción.
“Soy vegana y activista de los derechos de los animales, por lo que considero que no se trata de un deporte. Es sólo una forma de torturar a los animales. Santiago financia en muchas formas al rodeo, pese a no tener una media luna en la comuna, pero hay incluso cesión de terrenos. Incluso, agrupaciones como Gil Letelier reciben importante respaldo. Por esto, mi programa de concejalía incluye el respeto por los animales”, reconoce Ana María, quien – admite- fue una de las mayores en saltar a la medialuna. “Admiro el esfuerzo que hacen los jóvenes, desinteresadamente, que poco a poco han ido tomando conciencia real y luchando. También la tortura, desde el punto de vista de la violencia contra el género femenino, también las toca, ya que muchas veces sufren abusos y sus hijos se les arrebatan”.
En ese contexto, Sermeño cree que la base misma de su campaña “es la reivindicación del amor. Cuando realmente se cree en la dignidad de otro, las cosas verdaderamente pueden girar hacia otro sentido”.
Incluso, tuvo la interesante idea de compartir un sabroso té de marihuana con adultos mayores en la comuna de Santiago, siempre persiguiendo un sentido medicinal. Sermeño se atreve. "Queremos que Santiago tenga marihuana medicinal y que sea distribuida en los consultorios. Hicimos este té en el marco del mes de adulto mayor. Regalamos recetarios para ellos".
También frente a la casa central de la Universidad de Chile, en la Alameda, el pasado 23 de septiembre, se la jugó con el slogan “Me empelota la corrupción”, que resultó ser muy llamativo pero bastante decidor. “Quisimos dar una señal en términos comunicacionales para diferenciarnos. Es verdad, pero lo que quisimos hacer es demostrar que en verdad estamos empelotados con la corrupción, y eso a quienes militamos en los partidos políticos nos molesta mucho más. Incluso, cuando vemos parlamentarios que emplean violencia intrafamiliar”, recalcó.
Reconoció que varios camaradas de partido estaban molestos con su “empelotada”, por el hecho de ser democratacristiana. “Pero había que hacerlo con convicción, para dar una señal porque la gente está cansada. Nos meten a todos en un mismo saco, por eso la gente no quiere nada. Por ende decimos que si a usted le molesta el político corrupto, a nosotros también, al igual que el sacador de vuelta. Sólo los podemos sacar si lo decidimos. Hay buenos candidatos, por eso hay que ir a votar”, concluyó. 3801i