Quizás no estaba entre los candidatos de siempre, pero formaba parte de un grupo de nuevos hombres y mujeres que buscaban ofrecer un aire fresco a la política regional. Se trata del doctor Ramón González, histórico militante de la DC en nuestra región y que tiene plena conciencia del desafío que enfrenta. Por supuesto, al saber que formaba parte de la lista de los 10 concejales electos por la capital regional, se dio cuenta de que se trataba de una oportunidad histórica, pero siempre manteniendo la tranquilidad. Y una posibilidad de hacerle sentir a la gente que pueden confiar en los políticos, pese a la baja abstención y al desinterés mayoritario.
-¿Cómo vivió esa tarde-noche del conteo de votos?
“El clima de mi familia y de mi círculo cercano estaba muy tenso. Efectivamente, los primeros conteos no resultaron favorables para mí, ya que las primeras mesas fueron las del Colegio Germán Riesco y no eran muy positivas. Pero sabía que tenía el respaldo de 45 años de carrera como médico en La Serena. En las otras mesas, la situación fue distinta y cerca de las 10 de la noche ya la tendencia era clara a mi favor. Pero estaba calmado, porque yo no estoy iniciando una carrera política. Al contrario, estoy dando culminación a una carrera ciudadana”.
-¿Qué le mueve tras asumir esta responsabilidad por parte de la ciudadanía?
“Mi propósito es tratar de devolver algo a la ciudad que me ha dado todo. Esta es mi filosofía. Pero creo que hay una responsabilidad compartida. Esto quiere decir que las personas que resultamos elegidas por mandato popular tenemos que estar a la altura de esa confianza, y por ende ser un ejemplo ciudadano, en su comportamiento diario, en su vida profesional y familiar. Por esto, uno no se puede dar licencias, menos en cuanto a probidad. Pero la ciudadanía tiene que elegir bien, para evitar esa desafección con los políticos. De esta forma, la gente no sufrirá grandes desilusiones. Creo que no es muy complicado fijarse en las personas que ofrecen servicios a la ciudadanía, porque aquí en La Serena nos conocemos todos. Y por ende, no hay que hacer una campaña de un par de meses, sino que ofrecer toda una trayectoria”.
-¿Cuáles son los énfasis que lo diferenciarán en su gestión?
“Uno puede poner sus énfasis en lo que quiere hacer en el Consejo Comunal. Pero no deja de ser cierto que uno representa a la ciudadanía en su conjunto. Y por ende, la ciudad tiene muchos aspectos en los que uno debe interesarse. En mi caso, obviamente el foco estará puesto en salud, que es lo que más sé. Soy médico desde hace 45 años y fui seremi de Salud durante 10. Por ende, sé de salud pública, ya que además yo serví en el Hospital de La Serena. Pero no puedo hacerme el leso con otras necesidades que tiene la ciudad, que son muy importantes, como el tratar de rescatar las tradiciones y el patrimonio serenense. Y por ejemplo, frente a nuestra ciudad moderna, mejorar nuestros desplazamientos y poder aprovechar las pocas vías ante los 84 mil vehículos que circulan por La Serena. Incluso, hago la predicción de lo que viene, ya que este verano tendremos nuevamente una enorme afluencia de argentinos, y hay que saber prepararse para enfrentar esta situación. Debemos prepararnos, pero respetando al serenense que vive todo el año acá. Pero debemos saber que nosotros sólo proponemos, y es el alcalde quien tiene el poder ejecutivo, por así decirlo”.
-¿Cómo imagina La Serena, de aquí en adelante?
“Creo que si bien debe importarnos el futuro, el presente también es fundamental. No podemos hacer proyecciones de una ciudad mejor sino colocamos acento en las decisiones del hoy. Es una responsabilidad del Consejo Municipal, de la ciudadanía y de las jóvenes, que creo deben sentir una mayor responsabilidad de lo que pasa con su ciudad, desde el voto y de ahí para adelante. Pero también debemos ser los que estamos en el mundo político quienes debemos reencantarlos, con propuestas, con ideas y dejándoles una ciudad buena para vivir. Sino, creo que las futuras generaciones tendrán motivos suficientes para reprocharnos”. 3802i.