Los animadores de televisión que dejaron huella en la cultura pop chilena

Desde la llegada del medio masivo más importante del mundo a nuestro país a finales de los ’50, son muchos los que han pasado frente a las cámaras, pero muy pocos los que han dejado huella hasta transformarse en íconos de la pantalla chica. Queridos y odiados, pero siguen siendo recordados

La televisión chilena surgió en 1957, pero desde 1962 logró notoriedad, sobre todo después del Mundial de Fútbol de 1962. Desde ese momento surgieron ante los ojos de miles de chilenos personajes e historias que cautivaron, además de conductores de televisión que marcaron época. Las comparaciones siempre son odiosas, pero diario El Día quiso repasar a los más importantes referentes de la televisión, sobre todo en épocas donde la gran compañía de los chilenos fue ese aparato lleno de luces. Los nombres, surgen espontáneos.

¡QUE DICE EL PÚBLICO! Mario Kreutzberger Blumenfeld, más conocido como Don Francisco, es señalado por muchos como el hombre más significativo de la televisión chilena y por qué no decirlo, de la industria latinoamericana. Tras mucho insistir, debutó en 1962 en el programa “Show Dominical” en Canal 13, pero apenas transcurridas cuatro semanas fue echado por “malo”. Sin embargo, insistentes llamadas telefónicas pidieron por su regreso, y el director de la estación, Eduardo Tironi, aceptó su reincorporación.

Al año siguiente, debutó “Sábados Gigantes”, programa que está próximo a cumplir 50 años de historia, espacio de gran trascendencia y popularidad, sobre todo entre mediados de los ’70 y buena parte de los ’80 en un país marcado por las limitantes propias de vivir en un régimen dictatorial, contexto en el que Don Francisco se convirtió en un ícono.

Impulsor de la Teletón y de múltiples campañas solidarias, internacionalizó su espacio en Estados Unidos, lo que le valió convertirse en un ícono de la comunidad latina, hasta recibir dos reconocimientos de alta valía: En 2001 la Estrella de la Fama de Hollywood, y este año, pasar a integrar el Hall of Fame de la Televisión en EE.UU., primer reconocimiento para un espacio en español en el país del norte.

“Las únicas claves para mantenerse ha sido el trabajo duro y contar con el cariño del público. Hasta donde podemos llegar es algo que no se puede manejar, pero para llegar hasta los 50 años estamos dedicados todos los días a cumplir con nuestra vocación y hacer un aporte a las sociedades donde estamos”, señaló Mario Kreutzberger en entrevista exclusiva con El Día en noviembre de 2011.

HOLA ¿QUÉ TAL? Enrique Maluenda es, sin duda, otro gran ícono de la televisión chilena. La experiencia ganada en Puerto Rico y Perú le llevó a transformarse en el primer animador “internacional” nacido en estas tierras. Pero en 1970 retornó a Chile para conducir “Sábado en el 9” en el canal de la Universidad de Chile, espacio que puso en serios aprietos la existencia de “Sábados Gigantes” y el éxito de un joven Don Francisco.

Entre 1976 y 1977, condujo “Dingolondango”, espacio de entretención y concursos en Televisión Nacional de Chile, y en 1979, emprendió un nuevo proyecto, quizás el más importante de su carrera, “El Festival de la Una”.

El espacio, sin lugar a dudas, hizo más sabrosa la hora de almuerzo de muchas dueñas de casas y de niños y jóvenes que llegaban corriendo a ver el programa desde el colegio o la universidad. Fue cuna de personajes humorísticos y de productos como la “Sabrosalsa Deyco” y “Guitarras Tizona”, que marcaron toda una época.

En 1988, y tras diferencias con la dirección del canal, “El Festival de la Una” dijo un adiós definitivo en pantalla; sin embargo, en pleno siglo XXI, volvió a la carga para realizar diversas giras bajo la batuta de “Maluenda Producciones”, a cargo de sus hijos Claudia y Rodrigo.

El año pasado, y no sin melancolía, el “animador de las abuelitas” cerró para siempre la cortina de “El Festival de la Una” en el Teatro Caupolicán, donde recibió un homenaje del gobierno de Sebastián Piñera.

“Es una pena tener que despedir el ‘Festival de la Una’, pese a que dejó de estar en pantalla hace muchos años, y aunque todos los que vivieron en esa época lo recuerdan con mucho cariño, ya era hora de decirle adiós, pese a que nos encantó por casi una década, ya que todo cumple su tiempo, su período”, comentó a El Día este entrañable animador, que ha optado por retirarse a sus cuarteles de invierno.

VIÑA TIENE FESTIVAL. Antonio Vodanovic debutó en la televisión chilena en 1972, conduciendo el programa “Campeonato Estudiantil” de Canal 13, junto con participar en secciones de “Sábados Gigantes”.

Esos primeros encuentros con el espectáculo vivieron su momento estelar, cuando en 1976 asume la conducción del Festival de la Canción de Viña del Mar, certamen que condujo por 28 años, bajo el alero de Televisión Nacional de Chile, Megavisión y Canal 13. “Abuelo, abuelo”, muchas veces le dijo el “monstruo” de la Quinta Vergara al animador por sus prematuras canas, público al que muchas veces tuvo que domar, sobre todo en momentos de tensión como cuando José Luis Rodríguez, el “Puma”, señaló en 1987 que “había que escuchar la voz del pueblo”, que exigía la Gaviota de Plata para el venezolano.

En 2009, se despidió del “monstruo” sobre el escenario de la Quinta Vergara. “Cuiden este festival, es de todos nosotros. Espero que no me olviden”, dijo con una contenida emoción, y momentos después Felipe Camiroaga, junto a su compañera en la conducción, la periodista Soledad Onetto, le entregaron la “Gaviota de Plata”, trofeo que Vodanovic conserva en su departamento, y que refleja que él y el certamen viñamarino son inseparables.

UN SEÑOR DE LA TV. Entre los elegidos por diario El Día está César Antonio Santis, destacado conductor televisivo y radial.

Cuando era muy joven, en 1968, asumió la animación del Festival de la Canción de Viña del Mar, conducción que antes pertenecía a dos maestros como Raúl Matas y Carlos de la Sotta, y que Santis abandonó en 1975.

En 1970, inicia una exitosa carrera televisiva, con espacios como “120 kilómetros por hora” y “Martini al Instante”. Pocos años después, junto al director de exitosos programas, Gonzalo Bertrán, encabeza un programa dedicado a la promoción de talentos artísticos chilenos, “Kukulina Show”, espacio que se extendió por 1974 y que tras inconvenientes con la dirección de Televisión Nacional, desembocó en el despido de Bertrán y Santis de la estación pública.

Emigran a Canal 13, donde la exitosa dupla despliega todo su talento en programas donde los ternos, las corbatas y las mesas decoradas eran la tónica. “Lunes Gala” fue el primer golpe, hasta que en 1983 debuta “Martes 13”, el programa sofisticado por excelencia.

En 1988, César Antonio Santis retorna a TVN, para conducir “Porque hoy es sábado”, programa que con una costosa producción pretendía destronar a “Sábados Gigantes” con la coanimación de Cecilia Bolocco, reciente Miss Universo, intentaron por todos los medios destronar a Don Francisco, lo que resultó fallido.

Menos vinculado a la televisión de los ’90, condujo “Hablemos de”, programa de TVN donde Tony Kamo y Zalo Reyes protagonizaron una “hipnotización” de culto, donde el cantante come una cebolla con todo placer, hecho que el “Gorrión de Conchalí” admitió años después como una farsa. Este espacio también privilegió una televisión de calidad, respetuosa del telespectador.

Con el paso del tiempo, Santis prefirió dedicarse a sus negocios y a la radio, una de sus grandes pasiones. 3802R