De manera simultánea, durante la tarde de este jueves, Gendarmería realizó un operativo nacional que incluyó las unidades penitenciarias de las 15 regiones del país y que en el caso de la Región de Coquimbo, se desarrolló en la cárcel de Huachalalume, el que contó con la participación de 66 funcionarios.
El procedimiento se desarrolló principalmente en el módulo 45 de alta complejidad, que cuenta con una población penal de 45 reclusos. El trabajo desarrollado por personal especializado de Gendarmería, permitió la incautación de elementos prohibidos cómo teléfonos celulares, licor y armas hechizas.
“Este procedimiento fue organizado a nivel nacional, en el cual la idea fundamental era incautar la mayor cantidad de elementos prohibidos que mantienen de los internos al interior de sus celdas, como así las armas hechizas. Fue un procedimiento limpio y muy profesional por parte de nuestros equipos especializados y se logró la incautación de 6 teléfonos celulares, licor artesanal y armas hechizas confeccionadas por los mismos internos con elementos metálicos”, declaró el Coronel Alexis Espinoza, director regional Subrogante de Gendarmería.
En total fueron incautados 6 teléfonos celulares, 26 armas hechizas y más de 60 litros de licor artesanal. El Coronel además destacó que dentro de la Unidad de Servicios Especiales Penitenciarios (USEP) participaron 3 funcionarias mujeres, lo que demuestra el trabajo inclusivo que desarrolla Gendarmería en estos procedimientos.
“Lo positivo de estos procedimiento es que desde Gendarmería se ha desarrollado una importante inclusión de la mujer, antes los grupos especializados de Gendarmería eran sólo hombres, en el día de hoy participaron 3 mujeres dentro de nuestro equipo especializado, participando directamente y codo a codo con nuestros funcionarios masculinos”, agregó Espinoza .
Este tipo de procedimientos responden a la planificación estratégica que en materia de seguridad penitenciaria realiza continuamente Gendarmería, la cual está destinada a incautar elementos prohibidos en manos de la población penal más conflictiva, para así disminuir la ocurrencia de situaciones propias de la dinámica que se genera al interior de los recintos penales, para resguardar la seguridad de los internos y del personal del recinto.
“Todas las unidades penales del país desarrollaron de manera simultánea este procedimiento, que tiene por propósito otorgar seguridad a las mismas personas que se encuentran privadas de libertad, ya que se incautan elementos que podrían generar algún problema al interior del recinto. Esto demuestra que estamos preocupados por la seguridad de los internos, de los funcionarios y esa es el objetivo principal que nos hemos propuesto como Ministerio de Justicia en conjunto a Gendarmería, evitar que ocurran situaciones que pongan en riesgo a las personas que se encuentran en este recinto”, declaró el Seremi de Justicia Carlos Galleguillos.
Finalmente, el seremi de Justicia destacó que este tipo de acciones pretenden entregar una fuerte señal a la comunidad del trabajo que se desarrolla en materia de seguridad pública.
“Vivimos en las unidades penales de todo el país una realidad que es dura, pero trabajamos intensamente todas las semanas para desarrollar este tipo de procedimientos con la finalidad de mejorar la seguridad al interior de las cárceles. Esto además va unido a un importante trabajo que se desarrolla en materia de reinserción, realizando diversas gestiones para incrementar la educación, el trabajo y el arraigo social y familiar de las personas privadas de libertad”, finalizó.