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Los asistentes habrían estado participando de una despedida de soltero. No cumplían con las medidas sanitarias establecidas y superaban el aforo permitido. Carabineros realizó un llamado a la población a seguir denunciando y no participando en este tipo de eventos.

Una denuncia anónima de vecinos alertó al personal de la SIP de Carabineros de la Segunda Comisaría de Coquimbo, sobre una animada celebración clandestina la tarde de ayer jueves, al interior del nigth club “El Galpón”, en calle Melgarejo en la comuna puerto.

Se trataba de una despedida de solteros en la que estaban participando 28 personas de diferentes nacionalidades, 9 hombres y 19 mujeres, los que fueron detenidos por infringir el artículo 318 del Código Penal, es decir, por poner en riesgo la salud pública.

Los participantes de la fiesta clandestina se encontraban en condición de hacinamiento e insalubridad, por lo que Carabineros entregó todos los antecedentes a la autoridad sanitaria, que ahora debe determinar si prohibirá el funcionamiento del local.

Esto, porque como se puede apreciar en las imágenes tomadas al interior del recinto, se incumplía con las medidas preventivas del Covid-19 en materia de distanciamiento, uso de mascarillas, demarcación y condiciones sanitarias adecuadas.

Según la información entregada por el personal policial a El Día, pese a que el local “El Galpón” se encontraba con toda su documentación y permisos al día, con patentes de cabaret, expendio de alcohol y restaurante, infringía las normas sanitarias en plena pandemia.

Tras el operativo, el fiscal del caso determinó pasar a control de detención al administrador del local, mientras que las otras 27 personas quedaron apercibidos por el artículo 26, en libertad a la espera de una citación por parte del Ministerio Público.

Conocidos los hechos, algunos vecinos de sector condenaron estas fiestas clandestinas y la actitud irresponsable de las personas que estaban en el club nocturno, las que no sólo ponen en riesgo su salud, sino también la de sus familiares, contribuyendo así a la diseminación del virus.

Reiteradas fiestas en la zona

Esta sería la cuarta fiesta clandestina detectada en la conurbación esta semana. Sin ir más lejos, la madrugada del lunes Carabineros de la Primera Comisaría de La Serena decomisó marihuana, ketamina y dos armas en un procedimiento en el sector costero que finalizó con siete detenidos, y los uniformados de Las Compañías hicieron lo propio deteniendo a cuatro personas reunidas en un domicilio.

La noche del martes llegaron hasta la calle Rubén Jiménez, en el sector de San Juan de Coquimbo, donde llegaron los carabineros de la Tenencia Las Encinas, tras recibir una denuncia anónima, alertando de una fiesta clandestina pasadas las 2 de la madrugada. En el lugar, los uniformados encontraron a 22 personas compartiendo con música a alto volumen y alcohol. Entre ellos, habían dos menores de edad, de 15 y 17 años respectivamente.

Además, el pasado miércoles personal de salud y militares habrían realizado una fiscalización similar en la discoteca Arcángel, en calle Almagro de La Serena, donde se estaba realizando un espectáculo artístico con la presencia de varios espectadores, según habían denunciado vecinos. En el operativo no se informó de detenidos por parte de las autoridades.

Desde Carabineros, han sido enfáticos en establecer que la participación u organización de este tipo de eventos, corresponde a un delito, haciendo además el llamado a no exponerse a contagios. 

El capitán Arturo Obregón, comisario de Servicios de la Segunda Comisaría de Coquimbo, señaló a nuestro medio que el llamado es a la comunidad a seguir denunciando este tipo de actividades.

“La información entregada por vecinos es clave para seguir detectando este tipo de celebraciones masivas y segundo es llamar a no realizar este tipo de situaciones porque están prohibidas en este contexto de pandemia ya que podrían ser eventuales focos de contagios. Esto porque no se respetan los distanciamientos y el uso de mascarillas”, indicó el oficial.

Obregón agregó que las personas no se arriesguen a multas y penas privativas de libertad por organizar o participar en este tipo de actividades.

“Pero este riesgo también es sanitario y que no arriesguen a sus seres queridos ya que ponemos en peligro a nuestras familias, amigos y círculo más cercano” indicó el capitán Obregón.

El perfil de los asistentes a dichos eventos corresponde en su mayoría a hombres entre 18 y 36 años, y siete de cada diez personas descubiertas en fiestas clandestinas son de nacionalidad chilena.

 

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