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El Día
Bomberos investiga las causas del origen de las llamas, pero no se descarta que se tratara de un problema eléctrico en uno de los puestos comerciales. El siniestro no dejó personas lesionadas, solo pérdidas materiales.

Al menos 25 locales comerciales consumidos fue el saldo de un siniestro que afectó, pasadas las 21:30 horas de ayer, al mercado persa ubicado en calle O’Higgins #564, en pleno centro de La Serena.

Los puestos de venta pertenecían al denominado Centro Comercial “Las Cenizas”, nombre dado por los propietarios luego que el anterior recinto, ubicado en calle Balmaceda, a un costado de la iglesia La Merced, se quemara en un siniestro ocurrido a mediados de los años 80. A ese hecho, se suma otro incendio registrado en el año 2012, que destruyó cuatro locales.

Con estas historias a cuestas, los afectados no podían creer que una vez más la acción del fuego acabara con el patrimonio que tanto les ha costado levantar.

“Mi hermana tiene un local de ropa y varios artículos con su esposo. Recién les había llegado mercadería para reponer por todo lo que habían vendido en Navidad. Cuando les avisé no lo podían creer. La otra vez no les pasó nada, pero por lo que se puede ver esta vez es peor”, indicó a El Día Karen González, familiar de una locataria.

Los comerciantes que estaban a la entrada lograron rescatar gran parte de sus productos, ya que los principales afectados fueron los puestos de la parte posterior, más cercanos a calle Cienfuegos.

El comandante de Bomberos de La Serena, Ricardo Bruna, confirmó que el incendio afectó al menos a 25 locales y que, por ahora, se investigan las causas.

“El recinto estaba cerrado y el fuego se originó en uno de los locales. Se dificultó el trabajo porque tenían mucho material combustible, como ropa, plásticos y celulares”, señaló.

El alcalde, Roberto Jacob, lamentó lo ocurrido. “Les vamos a prestar toda la ayuda. (...) Mañana (hoy) entraremos con las cuadrillas para limpiar y que se puedan levantar y reconstruir lo más pronto posible”, indicó.

El jefe comunal espera que se pueda mejorar la seguridad, afirmando que en el casco histórico de la comuna “tenemos un enemigo silencioso, más que los terremotos, cuando se quema algo se destruye la cuadra completa. Necesitamos un subsidio para reparar todas las conexiones eléctricas del centro”, finalizó Jacob.

 

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