Sigue la ola de robos e inseguridad en El Rosario de Peñuelas

En la edición del 2 de diciembre, diario El Día dio a conocer la lamentable situación por la que atraviesan los vecinos del sector de El Rosario de Peñuelas, que al igual que los habitantes de El Milagro en La Serena, han sido víctimas recurrentes de gran cantidad de portonazos, encerronas y robos a viviendas cuando están sin moradores, lo que los tiene francamente agotados.

La calle El Rosario, entre otras,  ha sido una de las más perjudicadas, producto de  la oscuridad que le caracteriza en uno de sus puntos, debido a la presencia de un sitio eriazo que se tranforma en una oportunidad para que los delincuentes se desenvuelvan  con casi total impunidad. Adicionalmente, esa zona está en una situación de insalubridad que también incomoda.

Pero volvamos al tema que más les preocupa, que es la creciente delincuencia que no ha podido ser abordada. Aunque sus principales representantes han intentado por todos los medios presionar al Municipio de Coquimbo o a los responsables de los sitios eriazos para mejorar las condiciones de seguridad y así vivir sin la angustia permanente, sumado a la búsqueda de una fiscalización efectiva de las autoridades, aún no se han establecido soluciones que los dejen conformes.

María Esperanza Martínez, una de las vecinas que con más fuerza ha llevado adelante las demandas para ponerle coto a la inseguridad que les aqueja, conversó con diario El Día sobre los nuevos acontecimientos que han ocurrido durante los últimos días, que no son positivos.

“En nuestro sector, han continuado los asaltos. En efecto, el pasado jueves me tocó salir junto con el delegado del sector, que es Mario Mondaca y fuimos a la casa de una chica que fue asaltada. Estaba sola, saltaron el muro, entraron y le robaron prácticamente de todo”, aseguró María Esperanza.

En efecto, este hecho tuvo lugar alrededor de las 17: 30 horas, situación que parece ser poco usual en un sector considerado residencial, pero a esto ha llegado la inseguridad.

Una situación recurrente

Los vecinos, que han buscado organizarse a través de las redes sociales y otros mecanismos digitales, ya están cansados de esta situación. Por tanto, han avanzado en decisiones más radicales, ante el poco acompañamiento que sienten han tenido de parte de las autoridades. 

“En efecto, ayer tuvimos una reunión por la tarde con los vecinos, para así establecer un sistema de alarmas comunitarias. Sentimos que el sistema de plan cuadrante no nos da la seguridad que necesitamos, así que tomamos esta determinación. En las últimas semanas, los vecinos se han organizado para evaluar distintas cotizaciones, porque sentimos que a estas alturas es una de las pocas opciones que tenemos para abordar esta problemática que nos tiene cansados. Del municipio de Coquimbo o de otras instituciones ya no se puede esperar nada”, consignó.

Con respecto a la situación del sitio eriazo y el control en materia sanitaria, insisten en la búsqueda de implementar un cierre perimetral y por fin alzar un sistema de luminarias, sobre todo en el espacio más conflictivo correspondiente a calle El Rosario.

Mario Mondaca es otro vecino del sector del Rosario de Peñuelas, quien señala que ya están sobrepasados. Respecto a la delincuencia, subrayó que “los sitios eriazos se prestan para que personas se droguen. Carabineros viene pero esta gente no le tienen ningún respeto. Les toman los antecedentes, se van pero vuelven al rato. Carabineros y Seguridad Ciudadana hacen acto de presencia, y le hicimos saber de esta situación mediante una carta al alcalde Marcelo Pereira, pero no tuvimos ninguna respuesta”, advirtió.

Coordinación policial

Desde Carabineros, han recalcado su compromiso pese a las críticas de los vecinos. Recalcan que se creado la patrulla antirrobo, que es un servicio focalizado en los horarios de mayor alerta. Esta patrulla está disponible desde inicios de diciembre y para eso, sostienen, ya se han realizado reuniones de coordinación con los vecinos. Con respecto a bandas delictuales, la policía uniformada cuenta con antecedentes concretos, pero la línea investigativa la lleva adelante la SIP con el Ministerio Público. 

Frente a estos hechos delictuales, no se descarta que exista coordinación local con personas llegadas desde otras regiones , lo que también podría relacionarse con la alta migración temporal que ocurre previamente a la temporada estival.