A 30 años de la visita del Papa: Critican falta de hitos conmemorativos

El intenso crecimiento de la ciudad de Coquimbo es motivo de orgullo para quienes ven en esta ciudad un foco de desarrollo que permita a la conurbación convertirse muy pronto en una gran metrópolis.

Sin embargo, esa misma expansión que ha facilitado la remodelación del casino de juegos -hoy a cargo de Enjoy- y la construcción de edificios aledaños ha implicado que algunos de los hitos que se han vivido en la comuna puerto no se hayan podido conservar a través de la instalación de monumentos o placas conmemorativas.

Tal es el caso de la visita que el Papa Juan Pablo II realizó al Club Hípico de Coquimbo -como parte de la gira que lo tuvo de visita en Chile- y de la cual la región solo conserva recuerdos en la comuna de La Serena mediante una placa y una plazuela que llevan su nombre al costado de la catedral.

"Nunca es tarde para retomar la propuesta de dejar algo que nos recuerde esa visita",  Padre Dikson Yáñez, rector del Seminario Mayor "Santo Cura de Ars".

"Fue una situación muy importante, ya que a partir de ese momento se permitió una revitalización del trabajo evangelizador de la Iglesia respecto a estas manifestaciones de fe. Si bien hay muchos desafíos todavía, sus palabras fueron muy iluminadoras para esta labor pastoral", aseguró Juan Navarrete, docente del Departamento de Teología de la UCN.

El cariño, respeto y admiración por la figura del sumo pontífice -declarado santo en abril de 2014- comenzó de a poco a despertar la inquietud de los feligreses quienes ven en él a una persona bondadosa que merece un reconocimiento en la ciudad de Coquimbo y que con motivo de la visita del Papa Francisco, programada para enero de 2018, volvió a concitar el interés de la comunidad.

Una de las personas que conoce bien el tema es uno de los miembros del directorio de la fundación que administra la Cruz del Tercer Milenio, Jorge Hurtado, quien a mediados de los años 80 ya integraba una de las comisiones de la pastoral juvenil encargados de coordinar la visita del Papa a la región.

Hurtado indicó que "es molesto y es una falta de respeto tremenda a la historia que no exista un testimonio físico en torno a aquella histórica visita", sobre todo teniendo en cuenta que, junto a la de Polonia, fue una de las visitas más emblemáticas que realizó el sacerdote según mencionan los entendidos en la vida del santo padre.

"Donde hoy se emplaza el estacionamiento de Enjoy es donde estaba el Hipódromo de Coquimbo donde se recibió al Papa en aquella ocasión", señaló Hurtado quien agregó que "era muy importante porque tenía como foco la religiosidad popular" y en el que "el Papa se fotografió con seminaristas, sacerdotes y guardias papales".

Pero que a su juicio, "francamente se desaprovechó" y que hoy podría ser la oportunidad para que el alcalde de Coquimbo pueda construir "un monolito, plaza o algo que permita recordar la visita del Papa y que pueda ser vista desde distintos lugares" porque "es necesario recordar esa histórica visita".

Hurtado, quien además trabaja como encargado de gestión de la Corporación Gabriel González Videla, expresó que quizás "sería un bonito regalo de parte de los municipios de la región -y particularmente del alcalde Pereira- poder asumir un compromiso en torno a este tema" en el que además instó a los actuales concesionarios del terreno a sumarse, agregando que "a lo mejor la gerencia de Enjoy podría tener un gesto amable y tomar la iniciativa para poner allí algo que recuerde la visita papal, porque hasta ahora se ha dejado de lado una parte de la historia que me parece fundamental rescatar".

Sobre la posibilidad de contar una placa conmemorativa, el Vicario de Coquimbo y párroco de la Santísima Trinidad de Peñuelas, Padre José Tapia, señaló que si bien se cuenta con una placa conmemorativa en La Serena, "nunca está de más colocar un recuerdo, sobre todo en este momento tan oportuno en que se acerca la visita del Papa Francisco a Chile".

Misma postura es la que comparte el Padre Dikson Yáñez quien se desempeñó como rector del Seminario Mayor "Santo Cura de Ars" en la época en que Juan Pablo II visitó el país y quien explicó que pese a que anteriormente "hubo gestiones para hacer allí un monolito, pero no se concretó" porque los terrenos pasaron por procesos de venta y rediseño de espacios, aunque "nunca es tarde para retomar la propuesta de dejar algo que nos recuerde esa visita".