Alumna pone un recurso de protección por la forma en que fue reclutada para el Censo

Este miércoles se realizará en Censo en todo el país y desde INE (Instituto Nacional de Estadísticas) aseguraron que se alcanzó la meta de voluntarios reclutados en todo el país. Sin embargo, existen casos que llaman la atención, como el de la alumna de cuarto medio del Colegio Florencia Nightingale de La Serena, Mayte Fuentes, quien puso un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de La Serena este viernes –ayer entró a resolución-  por la forma en qué se les reclutó a ella y a la mayoría de sus compañeros “prometiéndoles un 7.0 y también por el dinero, que son 15 mil pesos”, aseguró.

“Mi recurso de protección se presenta porque encuentro que están vulnerando el derecho de los niños, porque los están explotando, haciéndolos trabajar, entregándoles labores que son para los mayores de edad y además, se les ofrece notas cuando no tiene nada que ver con la actividad que se está desarrollando, ya que ésta es una labor del estado y para eso están otras personas que pueden participar”, señaló la Mayte, que de todas maneras no participará porque su padre, José Fuentes, no la autorizó principalmente porque “es un asunto delicado legalmente, ya que hay que responder por ese documento encuestador en caso de pérdida. Para mi parecer tiene que ser una personal legalmente responsable, voluntad puede saber mucha, pero no es la forma de reclutamiento”.

“Los niños van porque les pagarán plata y en el curso irán prácticamente todos mis compañeros por el siete”, Mayte Fuentes.

Cuenta Mayte que “este recurso no es sólo por mí, sino que por todos los demás niños, pues creo que los están explotando. La denuncia no es contra el colegio, sino que por la forma en cómo se hizo el reclutamiento. Lo ideal sería que se les explique a los padres los riesgos que pueden tener los menores de edad al participar en el Censo. ¿Si fue una obligación? De la manera que llegaron las autoridades al colegio, sí. Fue como la última alterativa, de que nos falta gente y vamos a los colegios, lo que se ve muy feo. Nos deja una sensación rara. Entendemos que fue como un parche a última hora, y eso es lo delicado y peligroso, porque si no hubiese un voluntariado entre todo el país de personas adultas, es porque algo hay. Entonces porqué llegar a los niños a entregarles algo cuando aún son menores de edad”.

Apego a las normas

Desde el INE, su directora regional Marcela Puz León, afirmó que "la participación de los alumnos de tercer y cuarto medio obedece a un programa de participación que se ha desarrollado con estricto apego a las normas que regulan este tipo de actividades. Ahora, todo esto se enmarca en la normativa que fomenta la participación de los estudiantes en actividades cívicas. Y la verdad es que se ha tenido cuidado con acoger todas las recomendaciones de los derechos del niño y de la Unicef, que promueve la participación en este tipo de actividades que tiene relación con el voluntariado".

Además, aclaró que "la participación en el Censo no constituye en ningún caso el trabajo infantil, ya que todo esto se trata de actividades de naturaleza extracurricular y que están organizadas de manera totalmente coordinadas con cada una de los establecimientos educacionales, así que en este sentido, el INE no ha promovido ni mucho menos impuesto una obligatoriedad. Además, se han adoptado todas las medidas de seguridad de resguardo de los censistas, sobre todo si son niños de tercero y cuarto medio".

Por último, la directora de Instituto Nacional de Estadísticas aseguró que "todos los chicos que van a participar están cubiertos por el seguro escolar, pues como es una actividad extraprogramática, les cubre este seguro. Finalmente, se exigió como requisito primordial contar con la autorización de los padres de estos niños".

Nadie te puede obligar

Quien también se refirió al tema fue el seremi de Economia, Rodrigo Sánchez, quiien apuntó "que existe una tradición republicana y que a todos los mayores de 40 años nos tocó participar en el Censo. Lo hice en tercero medio y nunca sentí que fuera un cuchillo al cuello. Creo que también existe un tema de educación cívica, de entender el censo como un tema país, por lo demás, los menores de 18 años no sólo necesitaban las ganas, sino que también la autorización de los padres. Creo que era difícil presionar y sé del caso, pero los argumentos me parecieron débiles. Tradicionalmente los profesores y los alumnos de enseñanza media, de tercero y cuarto medio, principalmente, participaban en el Censo y nadie cuestionaba, pues era tradición. Ahora si el colegio te inscribe tú no tiene ninguna posibilidad de participar si tu padre no firma el permiso".

Por último, aclaró que "en este caso, la alumna y su padre consideraron que era un trabajo y por lo tanto no participan y estaban en todo su derecho. Es su punto de vita, respetable y llegó a los tribunales, pero me llama mucho la atención porque nadie la puede obligar a participar, así que bastaba con que el padre no firmara y hasta ahí llegaba la cosa".

Por otra parte, la Corte de Apelaciones de La Serena denegó la orden de no innovar que la menor habría presentado este viernes.