Crédito fotografía: 
Lautaro Carmona
El número es el más alto obtenido desde el año 2015, según datos aportados por la Corporación Nacional Forestal (CONAF), a cargo de las áreas protegidas en la región.

Por: Paola Acevedo

La menor presencia humana en las calles pareciera que ha permitido la aparición de animales salvajes en distintos puntos del planeta. Es cosa de googlear y se despliega un álbum con postales que difícilmente hubieran ocurrido en otras circunstancias; como en Mejillones, Segunda Región, en que se hecho frecuente el avistamiento de ballenas durante los últimos meses.

En la Región de Coquimbo los espacios de cuarentena han sido breves y han ido cambiando conforme a las cifras que arrojan los contagiados por coronavirus, sin embargo, las áreas silvestres protegidas se mantuvieron cerradas durante el año pasado por ocho meses, como explicó el director regional de CONAF, Eduardo Rodríguez, lo que ha permitido detectar diversos fenómenos.

“Nuestras áreas protegidas están abiertas al público desde el mes de enero a la fecha. Sin embargo, durante el año pasado se mantuvieron cerradas 8 meses. En el caso de nuestras áreas se detectó la colonización de especies vegetales, como el en caso del Parque Nacional Bosque Fray Jorge, y un incremento de la presencia de aves y nidificación en la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt. Dichos comportamientos son naturales al desaparecer la amenaza de la presencia humana y se han registrado en este tiempo de pandemia en muchas partes del mundo”, señaló

Según datos aportados por el administrador de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt, Roberto Cisternas, la presencia de Pingüinos de Humboldt se duplicó en Isla Choros, perteneciente a la reserva ubicada en la comuna de La Higuera y es la más alta del último quinquenio.

“La estimación de números de pingüinos, según los datos recolectados el 2020, llega un total de 3.376 para Isla Choros y 26 para Isla Damas. Esto refleja un aumento para la Isla Choros de más del doble en comparación al año pasado, con 1.510 ejemplares, y es el número más alto obtenido en todos los monitoreos desde 2015 al 2020”.

Cisternas, explicó que se debe reflexionar sobre los resultados, porque podrían responder a una mayor disponibilidad de alimento, menor número de visitas y fecha del conteo.

En el caso del Monumento Natural de Pichasca, su administradora, María Antonieta Martínez, explicó que se ha podido observar mayor presencia de nidificación de diversas aves, pero no se ha reportado un cambio en la conducta de los zorros que habitan en el recinto. Según señaló, estos últimos son territoriales y se suelen esconder de la presencia humana, y debido a que el tiempo de cierre fue corto, no se pudo observar algún cambio.

 

SAG: No hay mayor presencia de animales salvajes

Jorge Navarro, director regional del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) explicó, en tanto, que no se ha reportado aumento de presencia de especies silvestres en el resto de la región.

“No hemos visto un cambio de conducta de los animales respecto a los poblados humanos, en general. Sin embargo, podría ocurrir cuando exista una menor cantidad de personas, gente que está en casa producto de la cuarentena porque, en general, los animales tienden a alejarse de los asentamientos humanos, pero no ha existido una disminución de ellas producto de la pandemia. Estamos recién partiendo con la cuarentena y tuvimos un verano con mucho movimiento, por lo que no ha sido posible visualizar si existe un cambio en la conducta de nuestra fauna silvestre en la región”, indicó.

En cuanto a las especies silvestres que son reportadas de manera frecuente, el director explicó que este dato se puede inferir de las denuncias que recibe el SAG, las que corresponden principalmente a la presencia de zorros.

“El zorro es una de las especies que más nos ha tocado revisar y participar de sus rescates, pero principalmente asociado con alguna problemática, como zorros heridos”, dijo.

Las denuncias sobre presencia de esta especie protegida se registran de manera estable en las distintas provincias de la región, aunque con mayor frecuencia en Elqui.

 

Recomendaciones

Si usted ve a animales salvajes y más particularmente a zorros o pumas, cuyo último avistamiento fue en Choapa el año 2019, la recomendación es que se aleje y no los alimente.

“No debemos olvidar que son animales silvestres, salvajes y podrían reaccionar de forma agresiva y morder, con riesgo de enfermedades zoonóticas, de los animales a las personas”, explicó Navarro.

Agregó que alimentar a animales salvajes, además, puede fomentar el acercamiento a zonas habitadas y existe el riesgo de traspasar enfermedades de animales domésticos a estas especies protegidas; como por ejemplo el distemper, que se puede trasmitir de perros a zorros.

En caso de avistar a fauna herida, se puede contactar al SAG a través del correo: contacto.coquimbo@sag.gob.cl o a los teléfonos: 51 2 211061 en La Serena, 53 26 23899 en Ovalle, 53 2 521376 en Illapel, o en su defecto acercarse a Carabineros.

 

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