Con solo recorrer el sector de las cajas de los diversos supermercados de La Serena, se percibe una molestia. Clientes que se olvidan de la ordenanza municipal que lleva varios meses, de reducir y eliminar el uso de bolsas plásticas y no tienen donde transportar la mercadería; cajeras tratando de explicar la medida en representación de sus empresas y por supuesto, los jóvenes empaques que deben recibir insultos, en algunas ocasiones y en gran medida, han visto reducidos sus ingresos.
“Es una cosa de costumbre”, señala el alcalde Roberto Jacob. “Yo no daré pie atrás a esta ordenanza, la mejoraremos sí, pero nuestro objetivo de aportar al cuidado del medio ambiente y reducir las bolsas plásticas sigue. La gente se va a ir acostumbrando de llevar su bolsa de género u otra cosa”, agrega el edil serenense.
Pero parece que la ciudadanía no está de acuerdo. Critican que es un negocio de los supermercados, que han aumentado considerablemente la venta de bolsas reutilizables; que a pesar que buscan disminuir la contaminación, el pan, la carne, las frutas y verduras, entre otros productos se siguen entregando en bolsas plásticas y por último, aseguran que el empaquetar los productos es parte del servicio que debe entregar el supermercado.
“Es increíble que debas estar pagando más de $800 pesos por estas bolsas que se rompen y que antes estaban más baratas. Yo entiendo esto de cooperar con el medio ambiente, pero se aprovechan de nuestros recursos, el supermercado debe cambiar entonces el tipo de bolsas que nos da, unas biodegrabable o de papel, porque es parte del servicio”, señala Jorge Durán.
“Acá me dieron una bolsa reutilizable, pero debía pagar con la tarjeta de crédito de esta tienda (gran ferretería), entonces no es un regalo. Yo no tengo problemas con cooperar con el medio ambiente, pero esto sirvió para que los locales comerciales disminuyeran costos en su servicio. Por qué no entregan bolsas biodegradables o de papel o regalan de verdad por lo menos una bolsa reutilizable”, agrega Andrea Olivares.
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A pesar de la molestia, existe conciencia en los consumidores de que se debe aportar en disminuir la contaminación, pero creen que es necesario que esto sea un trabajo en conjunto y con programas educativos, para que no sólo quede en la eliminación de las bolsas plásticas que pueden tardar de 150 a 400 años en degradarse, sino que también en la reutilización y reciclaje de materiales.
Una iniciativa que lideran las regiones y que se inició en Pucón y que continuaron comunas como Puerto Varas, Punta Arenas, Villarrica y en la región, Vicuña desde el 2014.
LA SERENA, ALTERNATIVAS PARA EL CLIENTE
A pesar que es la segunda comuna de la región que decidió instalar esta ordenanza que busca reducir y eliminar las bolsas de plástico, es en esta ciudad donde se generó mayor polémica por la medida. Quizás, porque justo en la segunda etapa de implementación de esta normativa, entregando una sola bolsa, coincidió con la temporada estival. Así muchos turistas criticaron y se molestaron por no poder trasladar sus productos y tener que comprar bolsas reutilizables.
Fue una iniciativa de la exconcejala Margarita Riveros y que se transformó en una ordenanza municipal, que es parte de la “Estrategia de la Municipalidad de La Serena para desincentivar y reducir la utilización de bolsas de polietileno o similares” aprobada en abril del año 2016 a la cual el comercio se debe adherir de forma voluntaria firmando un protocolo.
La implementación se realizaría de forma gradual, tal como ocurrió, con cuatro meses de marcha blanca, informando a la comunidad, en la que en alguna ocasión se entregó una bolsa reutilizable, por parte del municipio y buscando adherir a diversos locales comerciales.
Luego, se establecieron en los siguientes cuatro meses (septiembre a diciembre) la entrega de 3 bolsas de plástico máximo por cliente y en los últimos cuatro meses (de enero hasta abril) sólo una bolsa plástica. Así en mayo de este año 2017, los comercios adheridos voluntariamente ya no entregarían bolsas de plástico.
Sin embargo, debido a la poca costumbre de los habitantes y visitantes de la comuna de La Serena la última etapa se extenderá hasta que el alcalde Roberto Jacob lo estime conveniente. “Seguiremos entregando una bolsa y ya lo conversé con los supermercados y comercios que firmaron el protocolo. Queremos que la gente se acostumbre y especialmente por la gente de la tercera edad que no puede andar con una caja o sus productos en la mano”, explica el edil.
Pero al leer la ordenanza de esta ciudad se indica claramente que durante todas las etapas, si las bolsas resultan insuficientes el comercio puede entregar diversas alternativas para el transporte de la mercadería entre las que se encuentran no sólo las cajas de cartón como lo han hecho hasta ahora los supermercados, sino que también se pueden entregar bolsas compostables, bolsas de papel reciclado, tela o cualquier material que no dañe el medio ambiente. Además de dar la posibilidad de entregarlas como parte del servicio y establecer también un lugar especial para promociones y ventas de bolsas reutilizables.
La ordenanza agrega en el Capítulo III, artículo 5 que se espera que los locales comerciales se adhieran a esta estrategia voluntariamente firmando un protocolo “mediante el cual se asumirá la tarea de sustituir las bolsas plásticas no biodegradables por otras alternativas de materiales 100% biodegradables, 100% compostables u otras elementos amigables con el medio ambiente”.
En ningún caso la municipalidad de La Serena prohibió entrega de otro tipo de elemento, amigable con el ambiente, para el transporte pero lamentablemente son los locales comerciales especialmente supermercados quienes han decidido, fundamentándose en la ordenanza en no entregar bolsas de otro material y sólo vender sus bolsas reutilizables.
Por otra parte en el artículo 8° se señala que los locales comerciales que se adhiera tendrán un sello distintivo y se obligan a lo siguiente: que todos los locales deben cumplir con las etapas de sustitución y restitución de bolsas y “trabajar en su local con bolsas biodegradables o reutilizables”.
ACEPTA MODIFICACIONES, NO ELIMINARLA
Quien ha estado en constante revisión de la ordenanza y ha escuchado a la comunidad es la concejala Jocelyn Lizana, quien incluso presentó una propuesta en el concejo municipal para mejorar la normativa que rige en la capital regional.
Para la concejala, aun cuando el alcalde señala que no aceptará retroceder en el aporte que como municipalidad pueden realizar para disminuir la contaminación, sí es necesario realizar modificaciones y corregir errores “que una implementación apresurada ha generado”.
Lizana señala que no existe ninguna firma de protocolo formal entre los grandes locales que se adhirieron de forma voluntaria (Unimarc, Santa Isabel, Líder, Jumbo y Sodimac). Agrega que se ha detectado a adultos mayores que no pueden comprar bolsas de reciclaje y tampoco pueden llevar cajas; que existe contradicción, porque al cliente se le exige no usar bolsas de plástico y dentro del local todos los productos se entregan en este material; además lo empaques están perdiendo ingresos.
“Existe una bolsa compostable, que es distinta a la bolsa biodegradable, si en ella se introduce después solo restos de frutas o elementos orgánicos, si se manda a una planta de compostaje, esa bolsa se desintegra y es humus, es carbono, es agua. Todas las otras bolsas cuando se descomponen, siguen siendo plástico. En cambio, esta puede generar un negocio al municipio con una planta de compostaje licitada, porque si nosotros promovemos que en el supermercado se entregue un tope de cuatro bolsas compostables y logramos que se aplique en los comercios pequeños en los hogares podríamos iniciar una campaña de educación para que podamos separar la basura. Disminuir el costo por volumen de la basura que hoy día lleva al vertedero y menos gasto para el municipio y generaríamos poco a poco más conciencia social en la ciudadanía”.
La concejala explica que en la mayoría de los casos las bolsas de supermercados y grandes ferreterías se ocupan para la basura domiciliaria en papeleros y cocina y que las que se pueden ver “Volar en la ciudad y sus alrededores son las del comercio más pequeño”. Es por ello que propone que la entrega de estas bolsas compostables con un límite de cuatro por persona, y que queda seguir siendo usadas para el retiro de basura, pero con un programa de educación de reciclaje.
El concejal Alejandro Pino, quien también es parte de la comisión de medio ambiente, señala que también los dueños de los locales comerciales deben hacer un esfuerzo para entregar una fórmula a los clientes para el traslado de sus productos y mercadería.
“Yo conocí los primeros supermercados en Chile, donde todo se envolvía en bolsas de papel. Los supermercados pueden perfectamente tener a disposición de la ciudadanía esto. No entregar bolsas plásticas, pero aquellos que no tienen otro medio para llevarlos debieran tener bolsas de papel que son plenamente reciclables. Es bueno que el esfuerzo no solamente lo haga hoy día la ciudadanía, sino que lo hagan estos empresarios de supermercados, esa sería la mejor colaboración a la ecología”
Por su parte Roberto Jacob recalca que deben perfeccionar la ordenanza, cuestión que realizará el equipo jurídico junto al departamento de medio ambiente.
“Las ordenanzas son todas perfectibles. Yo creo que lo principal, es haber generado esta discusión en torno a la ordenanza que nosotros hicimos, creo que es muy valioso, porque quiere decir que la gente está reaccionando, que está tomando conciencia, que seguramente va a crear más de algún problema, porque es difícil que la gente toma conciencia inmediatamente de lo que significa ir al supermercado y encontrarse con que no hay en qué llevar las cosas".
COQUIMBO, RECICLAJE COMO BASE DE TRABAJO
Otra comuna que decidió sumarse a Vicuña y La Serena, fue Coquimbo. Aun cuando muchos aseguran que se basan en la ordenanza de la capital regional, el alcalde Marcelo Pereira asegura que crearon su propio estatuto y que esta reducción y eliminación del uso de bolsas plásticas, forma parte de un programa mayor que busca incentivar la cultura del reciclaje en la comuna porteña.
“Ha costado un poco que la gente lo acepte, pero queremos que se termine con las bolsas de supermercado que terminan en el mar, por ejemplo. Ha costado sí, por reticencia de las personas porque los productos siguen en bolsas plásticas como el arroz o los fideos”.
Pereira explica que para terminar con este rechazo de la comunidad se ha generado toda una campaña educativa en los lugares donde se ha establecido la ordenanza, “regalándole bolsas biodegradables y amigables con el medio ambiente. Además le hemos explicado el por qué es importante sacar de una vez por todas las bolsas plásticas y nos ha ido bastante bien”.
Para el edil también la comunidad debe realizar un esfuerzo en esta campaña de descontaminación. “Tenemos que entender que si vamos a colaborar con el medio ambiente, tenemos que invertir. Una bolsa reutilizable no vale más de $800 pesos. Los supermercados están regalando bolsas, pero no pueden tener un stock para toda la comunidad”
Pero en Coquimbo la campaña está relacionada también con disminuir la cantidad de residuos domiciliarios que la gente deja para que sean retirados y enviados al vertedero. El objetivo de Pereira es transformara Coquimbo en una verdadera comuna del reciclaje y aumentar el el escaso 10% de material que se recicla en Chile. Para ello realizarán campañas educativas, respecto a reciclar, reducir y reutilizar, además de instalar más puntos limpios para que la comunidad pueda dejar productos de plástico, vidrio o papel.
De esta forma, es necesario que tanto la comunidad como las empresas y centros comerciales entiendan que es un trabajo en conjunto cooperar con el medio ambiente y disminuir la contaminación.
EMPAQUES PIERDEN INGRESOS
Quienes se han visto mayormente afectados por la ordenanza municipal que reduce y desincentiva el uso de bolsas de plásticos son los empaques universitarios, quienes obtienen un ingreso de las propinas de los clientes al empacar la mercadería y que en la conurbación alcanzan a más de 2.500 jóvenes.
Daniel Silva, encargado de empaques Jumbo señala que están trabajando con la concejala Jocelyn Lizana para generar una alternativa que les permita seguir con su trabajo y poder costear estudios y familia.
El estudiante señala que también están sometidos a pesos que superan la normativa de 30 kilos hombres y 20 kilos mujeres e incluso “la pita con la cual se amarra la caja contamina más que la bolsa de plástico y el fin principal de la ordenanza que es la no contaminación no se cumple, porque existen varias bolsas en el pan, las frutas, etc y existe también contaminación cruzada en los alimentos cuando estos son empaquetados en las cajas”
Agrega que se han reducido sus ingresos en más del 50% y que para ellos “la entrega de 4 bolsas compostables es una buena medida para los adultos mayores para transportar sus productos y para que nosotros podamos desempeñar nuestras funciones”.
VICUÑA LÍDER EN REDUCCIÓN DE BOLSAS
En la Región de Coquimbo, la primera comuna en instalar una ordenanza respecto a la eliminación de las bolsas plásticas fue la comuna de Vicuña.
Comenzaron en el año 2014 con diversas campañas de difusión y en la actualidad se entrega sola una bolsa plástica a los clientes en los diversos locales comerciales y en mayo se eliminarán completamente.
Uno de los primeros en ajustarse a esta medida voluntaria, fue el Supermercado Rivera con más de 60 años en la comuna que entregó, de forma gratuita, a sus clientes bolsas reutilizables.
El edil Rafael Vera explica que “se tomó esta determinación, porque creemos en nuestra Vicuña limpia y sustentable, comenzamos con pocas acciones y poco a poco se nos fueron uniendo empresas como Capel, Falernia, Pisco Chile, Conafe y Aguas Del Valle, en la entrega de bolsas sustentables. Así también con financiamiento municipal hemos enviados a hacer este tipo de bolsas, para tener una alternativa para los vecinos”, concluye.