En un problema de difícil solución, así se ha tornado el tema de las personas en situación de calle para todos, porque este tema incluye tanto a sociedad, autoridades y a las mismas familias de los “abandonados”, que se refugian en esta condición escapando muchas veces de inconvenientes mínimos.
Lo lamentable de esta situación, es que muchas de las personas que actualmente se encuentran en condición de indigencia, se niegan a salir de esta condición por su propia voluntad, lo que hace infructuosa toda ayuda por parte de las autoridades o de entidades privadas.
Este fue el caso de Hernán Castro Naranjo, recientemente fallecido en pleno centro de Coquimbo, quien llevaba bastante tiempo en situación de calle. Según los antecedentes recabados, el fallecido presentaba redes de apoyo familiar ausentes y tenía invalidez, razón por la que se le veía en su silla de ruedas principalmente en el sector de El Empalme, lugar que frecuentó hasta sus últimos días.
A sus 49 años, Hernán recibió ayuda constante, es así como registraba inscrito en el “programa Calle”, que se desarrolla en La Serena, el cual también atiende a personas de la comuna de Coquimbo, pero lamentablemente por su propia voluntad, Castro decidió abandonar este programa en el mes de diciembre del año 2015, pese a recibir entre otras cosas, ayuda monetaria para cancelar un arriendo y tratamientos a sus adicciones.
Desde entonces, el fallecido fue visitado constantemente por personal del municipio de Coquimbo, quienes en reiteradas oportunidades le ofrecieron asistencia médica, incluso fue trasladado hasta el Hospital San Pablo, donde nuevamente por su propia voluntad se negó a ser atendido, lo que claramente dejaba en claro su nula intención de intentar salir de su condición.
“En este caso puntual, el municipio había trabajado con la víctima, se había tenido bastante relación directa con Hernán Castro, con ayuda psicológica e incluso se intentó varias veces derivarlo a la red asistencial de salud, la que muchas veces rechazó. Enfrentaba un fuerte tema de adicción al alcohol y abandono de sus familiares, lo que lo derivó a la calle, también había tenido problemas con personal del Hogar de Cristo, entonces aquí es muy difícil ayudar si muchas veces no se tiene la voluntad de las personas. Como municipio estamos trabajando esta problemática, es un tema que se está abordando y en el cual queremos incluir a todos los actores necesarios para generar ayuda real a las personas que están en situación de calle en nuestra comuna”, indicó Patricio Reyes, alcalde (S) de Coquimbo.
Por su parte el concejal Guido Hernández, señaló que no tan sólo se deben preocupar las autoridades sino también las familias de las personas que se encuentran en situación de calle, que muchas veces se despreocupan del lamentable estado que presenta un familiar.
“Lamento profundamente esta situación, pero aquí es tarea de todos abordar este problema y trabajar por soluciones concretas, por esta razón es fundamental, además del trabajo de las autoridades, la preocupación de los familiares de las personas que presentan esta condición, no puede ser posible que se despreocupen de esa manera de un hermano, de un padre. Por otra parte sabemos que es complejo que estas personas reciban la ayuda que se les proporciona, porque muchas veces presentan problemas psiquiátricos o de adicción, por esa razón es necesario generar las instancias para declarar interdictas a esas personas y que reciban contra su voluntad una ayuda a su problema, no podemos seguir dejando que se muera gente porque no quiere recibir ayuda”, finalizó Hernández.