Siguen los coletazos tras conocerse el informe de la deuda municipal de Coquimbo que alcanza los $7.272 millones de pesos hasta diciembre del 2016 y que incluye más de 2 mil millones sólo por concepto de la construcción de edificio consistorial.
El informe fue entregado al pleno del Concejo Municipal por el administrador Patricio Reyes quien detalló que Los $7.272 millones se traducen en deuda flotante de $1709 millones, deuda año 2016 con presupuesto 2017 de $2.770 millones, compromiso obras civiles que alcanza $146 millones, edificio consistorial por $2.023 millones, compromisos y reclamos $619 millones y compromisos varios Departamento de Administración por $2 millones.
Ante el informe el alcalde Marcelo Pereira fue claro en indicar que esa es la deuda con la que asumió su gestión el 6 de diciembre y que incluso podría aumentar. Agregó que son gastos de administraciones anteriores y que el alto monto afecta directamente a cómo desarrollará el programa que proyecta en la comuna porteña.
“Me gustaría comunicar a toda la comunidad que cuando asumí como alcalde el 6 de diciembre la municipalidad la recibí con aproximadamente $7.300 millones de pesos en deuda. Es una cantidad no menor, es bastante alta y claramente nos comprometemos con la comunidad a tomar las directrices necesarias para ir rebajando esta deuda”
DESCONFIANZA ANTE LA CIFRAS. Quien se sintió aludido con las declaraciones y el informe, respondiendo inmediatamente fue el exalcalde de Coquimbo, Cristián Galleguillos, que critica que se hayan demorado más de seis meses en informar la situación, agregando que dejó su cargo con una cifra tres veces menor.
“Cuando se habla de una deuda del año 2016 se están refiriendo en gran parte a la gestión que encabecé yo, pero me llama la atención que hayan esperado o que hayan pasado 6 meses para emitir esas declaraciones, yo no tengo mayor conocimiento del porqué, pero me parece extraño esas sumas de dinero, porque en el momento que nosotros nos fuimos en noviembre, no cerramos el año contable, ese fue trabajo de la actual administración, pero siempre todos los informes recibidos por nosotros hablaban de una deuda no mayor a los dos mil millones, la deuda del municipio en el cierre de nuestra gestión eran cerca de 1.700 millones", indicó.
El exedil muestra su desconfianza ante el informe y espera que no tenga fines políticos, debido a que ahora es precandidato a diputado por la Democracia Cristiana y en el último tiempo ha presentado conflictos con quien es uno de los más cercanos al actual alcalde Pereira, Matías Walker.
"Yo no sé de donde salieron los 7.200 millones de deudas. Espero que los funcionarios y profesionales del municipio que trabajaron conmigo y que me informaron sobre la deuda de 1.700 millones, puedan rectificar esto y quien informó esa cantidad la pueda comprobar. Espero que esto no tenga fines políticos, yo me he puesto a disposición del municipio, he hablado con el alcalde Pereira y espero que este municipio pueda salir adelante. Pero yo estoy tranquilo porque en la gestión que yo encabecé está todo claro y transparente", finalizó
BUSCAR FÓRMULAS PARA RECUPERAR ARCA. Mario Burlé, concejal (UDI) de Coquimbo fue quien solicitó como presidente de la comisión de fiscalización, el detalle de la deuda. No quiere responsabilizar a nadie, porque tiene claro que en todo municipio surgen emergencias y obras que se deben cubrir.
“Es parte de la administración, en el quehacer municipal se van adquiriendo compromisos y hay emergencias. En algún minuto el municipio de Coquimbo tuvo que enfrentar la emergencia del terremoto y tsunami y ahora nosotros el temporal. Eso va originando un gasto que no estaba pensado hacer, que son imprevistos Aquí nadie dice que la plata se la llevaron para la casa, la deuda existe y son obras municipales”
Burlé agrega que es necesario mejorar la gestión municipal para disminuir los egresos y poder aumentar los ingresos. Es por ello que entre las fórmulas se encuentra fortalecer los cobros de patentes y licencias médicas adeudadas, más otros cobros pendientes que permita disminuir el monto.
Respecto a las palabras de Galleguillos que señaló que la deuda con la quejó el municipio no superaba los $1.700 millones, Burlé señaló que ya sumándole el edificio consistorial, que era una deuda anterior a que dejara el cargo Cristian Galleguillos, se superaba los 3 mil millones de pesos.
“Es una deuda que está allí y no hay otra. Hay una deuda flotante que es devengada que para decirlo más simple, han llegado las facturas y acreedores al municipio y otra deuda es de los compromisos que se tienen y eso llega a siete mil millones de pesos”.
Como las obras del edificio consistorial están detenidas y aún se mantienen las conversaciones entre el municipio y Sacyr, Burlé espera también que prontamente terminen las obras del edificio municipal de calle Bilbao, que está siendo reparado tras un incendio. De esta manera, se dejarían de cancelar 11 millones mensuales por el arriendo del edificio ubicado en calle Alessandri en el sector de El Llano.
Por su parte el concejal Guido Hernández celebra que se hayan aclarado formalmente las cuentas en el municipio porteño, pero sí es tajante en responsabilizar a la anterior administración de Cristian Galleguillos en las altas cifras.
“En lo particular hago una crítica potente a la anterior administración porque es una deuda a de arrastre que genera un daño tremendo al normal funcionamiento de la municipalidad y tenemos que asumir esto en la nueva administración, el alcalde y los concejales, para bajar la deuda y que retorne a la normalidad”
El concejal de RN agregó que ya solicito al alcalde Pereira que se generen planes y estrategias con participación activa del concejo para disminuir la deuda. “Considero que es importante que todos los concejales se sumen a esta iniciativa, porque es un problema que afecta a todos los coquimbanos, es un tema relevante y debemos saber sacar adelante entre todos”, concluyó Hernández.5201