Preocupados se encuentran los vecinos del sector Manuel Rodríguez, específicamente en Calle Bilbao en la Parte Alta de Coquimbo, luego que se enteraran de la futura instalación de una antena de telefonía móvil de 15 metros, por parte de una conocida compañía. La comunidad, en gran porcentaje adulto mayor, reclama que ya existe una torre de otra empresa desde el año 2013 a un costado de sus viviendas y aseguran que, desde que se instaló, han comenzado a padecer diversas enfermedades, falleciendo varios vecinos en poco tiempo.
Ilse Olivares, presidenta de la junta de Vecinos Estrella de Chile señala que las antenas se instalan en pequeños patios de las casas colindantes e incluso no superan los 100 metros de distancia entre ellas y a menos de 70 metros de un jardín infantil, escuela y el consultorio. “La antena que está ya ha traído muchos perjuicios para los vecinos del sector, han fallecido muchos y ahora varios están con marcapasos, cáncer y no queremos que una nueva antena se lleve a más personas”.
Los vecinos están molestos porque esta antena llega debido a una reubicación desde calle Javiera Carrera a Bilbao, sin cumplir con el procedimiento de informar a la junta de vecinos y vecinos cercanos al terreno donde se va a instalar. La comunidad decidió manifestarse y exigir que este traslado no se produzca.
Laura Briceño expresidenta recuerda que también se manifestaron y lucharon cuando se instaló la primera antena de telefonía celular, sin embargo no fueron escuchados. Por ello actuarán con más fuerza en esta ocasión para mantenerse sólo con una en el poblado lugar.
“Aunque la Organización Mundial de la Salud dice que no es dañino, hay que tener precaución. Así como la industria tabacalera, por años, dijo que el tabaco no producía cáncer y tuvimos que esperar a que murieran millones de personas para que lo reconozcan, esto mismo pasa con las antenas, porque las ondas electromagnéticas producen calor en nuestros tejidos y acelera la aparición de cáncer”, señala la vecina.
Por su parte, el concejal Guido Hernández quien ha apoyado a la comunidad en su lucha contra la antena, señala que lamentablemente, bajo la normativa pueden instalarse un máximo de dos antena en un radio de 100 metros.
Para Hernández la empresa no cumple con la distancia a jardines infantiles y centro de salud y “tampoco han cumplido con el procedimiento de avisar a los vecinos. Por eso le pedimos al seremi de transporte y telecomunicaciones para que intermedie en esta situación y la empresa pueda buscar un lugar distinto, para que no generen problemas de salud en nuestra comunidad. Además exigimos que se haga un estudio para saber si es zona saturada o no”, sostiene el concejal.
Susana Richards añade que la empresa se comprometió a desarrollar proyectos de áreas verdes e iluminación, pero el sector está completamente poblado, sin espacios o tiremos para nuevas áreas verdes, “así que no sabemos cómo quieren cumplir y ayudar a la comunidad”. Además han reunido firmas y aseguran continuarán con su lucha para que esta nueva antena no sea instalada.
Ley de Antenas
La nueva Ley de Antenas señala que es la dirección de obras de cada comuna la encargada de autorizar las antenas mayores a tres metros de altura o en otras palabras, la estructura que sostiene la antena. Por otra parte, también es labor del municipio establecer las zonas sensibles, que en este caso sería la presencia de jardines infantiles.
La normativa señala que las zonas saturadas son las áreas en donde existen más de dos antenas en un radio de 100 metros. Por ello, en esta situación, no existiría obstáculo para instalar una nueva antena de telefonía móvil.