Crece preocupación por vulneración de niños migrantes

Un hecho alarmante es lo que se ha visto principalmente en las calles de La Serena y Coquimbo. Se trata de la gran cantidad de extranjeros que se han ubicado en diferentes intersecciones, muchos de los cuales han llegado hasta la zona con el objetivo de alcanzar un mejor pasar. Sin embargo, la mayor dificultad no está ahí, pues por medio de diversas denuncias en redes sociales y ante las autoridades formales, se ha visto como piden limosna con menores de edad, sin importar las condiciones a la que estos pequeños, incluso muy bebés, se ven expuestos. La vulneración salta a la vista.

En este contexto, las autoridades han avanzado en efectuar importantes fiscalizaciones para impedir que hechos que atentan directamente contra los derechos de niños y niñas sigan teniendo lugar en las principales calles de la conurbación. El propósito es reducir al máximo estos hechos, aunque se trata de una compleja tarea.

El prefecto de Coquimbo, coronel Carlos Rojas, señaló a diario El Día que “en Chile, el trabajo infantil no está permitido. Cuando los niños y niñas están siendo vulnerados, nosotros como Carabineros, que somos parte del Estado, tenemos la obligación de hacer las respectivas denuncias, tanto en los Tribunales de Familia como en los estamentos afines, con el propósito de dar protección a estos menores, que se encuentran en indefensión, ya que lamentablemente deben acompañar a estos adultos en situaciones que son extremas, con calor en el verano y en el invierno con frío y hasta con lluvia”, señaló.

El jefe policial recalcó que “nosotros siempre vamos a estar acompañando a los profesionales del Sename en estos operativos para dar cuenta a los tribunales competentes cuando exista una situación de flagrancia, tanto en sectores céntricos como periféricos, dando contención a las familias en situación  de vulnerabilidad, y peor aún, cuando ejercen la mendicidad utilizando a niños”, aseguró el jefe policial, quien señaló que la protección es igual para pequeños chilenos o extranjeros, aunque esta actividad no es delito, siempre y cuando la ejerza un adulto,  pero basta que éste se encuentre con un menor,  y automáticamente existe una vulneración de derechos.

Alarmados 

Laura Guedez,  vocera de la Agrupación de Venezolanos en La Serena, VeneSer, valora este tipo de medidas, pero sostiene que el problema es más de fondo.

“Muchos compatriotas míos han llegado a hacer  esas actividades sin escrúpulos, porque viven cómodamente pero se acostumbraron a mendigar. Asimismo, hay peruanos que también han optado por el mismo camino”, subrayó.

Guedez afirma que por muchos años ha venido insistiendo en esta materia, alertando que cada vez se iba a poner peor. “Se lo advertí a diferentes autoridades,  pero yo sólo cumplo con decirlo. Acá va a comenzar a llegar lo peor de lo peor, y ese es el problema en esencia”, aseguró la representante, que ha visto cómo personas que ejercen esta actividad, haciendo uso de menores, juntan suficiente cantidad de dinero para vivir en condiciones de gran comodidad, pero sin trabajar prácticamente nada.

Mary Cortez, presidenta de la Corporación de Colectividades Extranjeras de la Región de Coquimbo, agregó que “es deprimente ver a los niños así, y está comprobado que no son hijos de ellos, son chicos arrendados. Han habido operativos donde ha estado Carabineros, la PDI y el Sename. Lo malo es que no pueden apresar a nadie, por tanto los niños volvieron a quedar a la deriva de la mendicidad. Lo que yo haría es enviar de vuelta al país de origen a los adultos que hacen esto, aunque lamentablemente por ley no es posible cortarlo de raíz”. 

 Incluso, en una ocasión Cortez encaró a una pareja y se encontró con un caso similar y al advertir a Carabineros, la autoridad le habría indicado “que ellos no podían hacer nada. Yo creo que, valorando los operativos, si estos sólo se hacen en forma ocasional y para la foto, no sirve de mucho”, concluyó.