Crédito fotografía: 
Lautaro Carmona
Avanza el proceso para la adjudicación del espectro en Chile, que se conocerá en el mes de febrero. A pesar de este gran avance, en la Región de Coquimbo aún existe la necesidad de llegar con una conexión a internet estable a zonas rurales, déficit que se ha evidenciado aún más en esta emergencia sanitaria.

Alta velocidad, gran capacidad y baja latencia –lo que se traduce en mejor tiempo de respuesta de la red-, son algunos de los beneficios que entregará la quinta generación de dispositivos y de redes móviles. Estas ventajas apuntan a mejorar la productividad, hacer eficientes los procesos, entregar más oportunidades de emprendimientos y desarrollar la industria.

El avance más significativo que trae la llegada del 5G es la velocidad. Multiplicará 10 veces la rapidez con que navega un usuario en Internet en sus dispositivos.

Rodrigo Ramírez Pino, presidente de la Cámara Chilena de Infraestructura Digital y exsubsecretario de Telecomunicaciones, explica que esta quinta generación ofrece un nuevo ecosistema tecnológico. “El 5G va a permitir el desarrollo de nuevos modelos de negocios, nuevas industrias, de nuevos emprendimientos que tengan que ver con estas tecnologías. No solamente estamos hablando del acceso a través de tu smartphone a una red para descargar más rápido una película, sino que estamos hablando de la convergencia del mundo físico y el móvil y de la arquitectura del mundo del futuro”, sostuvo.

Etapa actual 

En el mes de agosto del 2020 comenzó el proceso de licitación del espectro para el desarrollo de la red 5G en Chile, liderado por la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel). En este se pusieron a disposición 1800 MHz y se realizaron cuatro concursos públicos simultáneos, pero independientes entre sí. Las bandas consideradas a adjudicar son: 700 MHZ, AWS, 3.5 GHz y 26 GHz.

Al respecto, el exsubsecretario de Telecomunicaciones señaló que la cantidad de espectro que se puso a disposición es histórico. “Nunca había habido una licitación en Chile que haya puesto tanto espectro a disposición, es un bien nacional de uso público y lo que se pone a disposición, es la concesión de esta banda (…) Estamos frente a un proceso en donde lo que se licita es el estándar tecnológico, es decir, si hay un oferente que llega con una propuesta, lo que hace es buscar la mejor solución, conservando el principio de neutralidad tecnológica para cumplir las expectativas de las bases de licitación”.

Finalmente, en el mes de febrero se conocerá qué empresas lograron la adjudicación y cuál espectro de banda se le asignará.  “Las empresas que postularon están en proceso de revisión técnica por parte de la Subtel y, de las que uno conoce cuando se abrieron los sobres, son Entel, Claro, Movistar, Wom y una quinta que no tiene presencia en Chile y esta sería su forma de entrar al mercado. Es la empresa BorealNet, formada por un consorcio finlandés-norteamericano”, enfatizó Ramírez.

Pero, si bien la entrega de las licitaciones puede estar lista en el mes de febrero, la operatividad de la red 5G no se concretaría hasta el 2022, ya que en promedio los permisos para instalar una antena en las distintas comunas del país demoran 15 meses. “Es un proceso largo que en su despliegue total tardará más de tres años (…). El primer año serán las capitales regionales quienes van a desplegar las tecnologías propuestas en las diferentes bandas”.

"Conectar a los desconectados"

Desde el inicio del Estado de Emergencia por la pandemia del covid-19, ha existido un cambio en el patrón de consumo de Internet. La crisis llevó a utilizar y aumentar los conocimientos en tecnología, pero dejó en evidencia la brecha digital que existe en Chile. Una realidad de la que la Región de Coquimbo no está muy alejada.

La mala conexión a Internet, principalmente en las comunas rurales, fue uno de los grandes impedimentos para desarrollar las principales actividades, como estudiar  y trabajar. Es por esto que, a pesar de este avance, el Presidente de la Cámara de Infraestructura Digital es enfático en señalar que “el llamado es entender que Internet es un servicio público y básico”.

“Nuestro primer desafío como industria es el despliegue de infraestructura digital. No hay posibilidad de un 5G, ni 4G, si no hay primero una política pública que favorezca el despliegue de infraestructura digital (…) La inversión en telecomunicaciones tiene un impacto cuantificable en mayor empleo, mejor educación, mejor acceso a la salud y reducción de la desigualdad. Por lo que tiene un impacto directo en mejorar la calidad de vida”, señaló Ramírez.

En esta misma línea, puntualizó que es momento que Chile dé el siguiente paso. “Que nadie se quede atrás, porque conectar a los que están hoy día desconectados es la tarea más difícil, esto implica una nueva generación de subsidios para que lo privado pueda llegar a la Provincia de Limarí y Choapa, pero con la misma calidad del servicio de un polígono mejor conectado como los territorios que tienen mejor conectividad”, finalizó.

 

Suscríbete a El Día y recibe a diario la información más importante

* campos requeridos

 

 

Contenido relacionado

- {{similar.created}}

No hay contenido relacionado

Cargando ...

 

 

 

 

 

 

 

 

Diario El Día

 

 

 

X