Acompañamiento y evaluación: Las medidas para definir promoción escolar este 2020

Estefanía González  - El Ovallino

Este 23 de diciembre culminan las clases en la mayoría de los establecimientos educacionales de la Región de Coquimbo, clases que se debieron adaptar a una nueva metodología de enseñanza remota. Utilizando herramientas como Zoom, Class Room y Meet, este 2020, producto de la pandemia por el Covid-19, los estudiantes convirtieron sus casas en aulas y muchos padres debieron apoyar el aprendizaje de sus hijos de forma directa.

Si bien los establecimientos educacionales, padres, alumnos y profesores han hecho en general grandes esfuerzos por salir airosos, los métodos remotos significaron también descubrir dificultades, tales como las fallas de conectividad o de equipos que permitieran un buen desempeño.

Ad portas del termino del año escolar muchas son las preocupaciones, y también el estrés de los alumnos y padres para pasar el año lo mejor posible, muchos con trabajos o evaluaciones pendientes y temerosos de la posible repitencia.

Si bien este año 2020 ha sido especial en muchos aspectos y para muchos difícil, se han tomado medidas desde los establecimientos educacionales, por ejemplo, estar acompañando continuamente a los estudiantes para velar que exista aprendizaje.

Es el caso del Departamento de Educación (DEM) de Ovalle, que desde el inicio ha entregado apoyo y orientación a toda la comunidad escolar, “nuestra orientación ha sido resguardar el aprendizaje de todos los estudiantes” sostuvo Nelson Olivares, Jefe del DEM quien agregó que “sabemos que este año ha sido complejo en muchos sentidos y los resultados son distintos en cada estudiante. Pero a pesar de ello, los funcionarios de las escuelas han realizado los máximos esfuerzos por mantener el contacto con ellos”.

En este caso, la promoción, es decir, el pasar o no de curso se evaluará según el proceso pedagógico de cada estudiante “considerando flexibilidades en razón al contexto, a las particularidades de su comunidad educativa, y por supuesto, a las de cada familia”, sostuvo Olivares.

Claudio Rentería, alcalde de Ovalle explicó que el Departamento de Educación Municipal de Ovalle ha velado por asegurar la continuidad en la entrega del servicio educativo durante todo el año escolar 2020, en las distintas unidades educativas a cargo de este sostenedor. “Para ello ha resultado fundamental el trabajo que han realizado nuestros establecimientos, manteniendo una comunicación constante y procesos pedagógicos continuos con los estudiantes, bajo nuevas modalidades de aprendizaje, ya sea de forma remota o mediante la entrega de material impreso”.

Desde la Seremía de Educación indicaron que la repitencia es una medida completamente excepcional, que se adopta después de un análisis exhaustivo que realizan los docentes del estudiante y cuando el aprendizaje desarrollado durante el año está en un nivel muy bajo y está normado en el Decreto 67 de 2018 sobre Calificación y Promoción.

“En general, la repitencia tiene un impacto más negativo que positivo en la trayectoria educativa del estudiante. Por ello, el Decreto 67 establece que la escuela debe analizar la situación del estudiante y que, si existen opciones de remediar el déficit de aprendizaje, sea promovido con un plan especial de apoyo por parte del establecimiento”, indicó el Seremi de Educación Claudio Oyarzún.

Contención emocional

Otro de los aspectos que se ha considerado este 2020 es la contención emocional, debido principalmente al estrés que significa esta pandemia la División de Educación General ha elaborado una serie de recursos sobre apoyo socioemocional dirigido a las comunidades educativas, éstos incluyen orientaciones a las familias y claves para el autocuidado docente, las que se han difundido a través de seminarios y cápsulas de video con expertos durante todo este año, a lo que se suma la difusión de recomendaciones específicas sobre la materia.

Además, a través de los equipos de Convivencia Escolar, cada comunidad educativa ha trabajado en la implementación de medidas prácticas para el bienestar socioemocional, pues los estudiantes no han estado ajenos a situaciones de agotamiento y estrés emocional; sobre todo cuando desde el confinamiento con sus familias deben lidiar con exigencias laborales y hogareñas al mismo tiempo.