El ejemplo de Felipe Belmar que derriba las barreras hacia la inclusión

Este viernes, en la ciudad de La Serena, se llevó a cabo el 2° Seminario “Abriendo puertas a la inclusión escolar”, instancia organizada por la Corporación Edudown, que entrega apoyo hace 4 años en la región a niños con síndrome de Down y sus familias.

Durante la jornada, uno de los expositores fue Felipe Belmar, joven con síndrome de Down que en el año 2015 se convirtió en un verdadero ejemplo para el país, al titularse como Técnico Agrícola en Inacap Temuco, ciudad donde reside.

Diario El Día conversó con Felipe, quien con una personalidad extrovertida y una sonrisa que contagia nos contó su historia en compañía de su madre, Trinidad, su fiel compañera en este largo pero exitoso camino, que se ha transformado en un ejemplo de vida.

“Nada de esto hubiese sido posible sin el apoyo de mi familia, siempre han estado conmigo y eso es importante. Para mí haber estudiado la carrera de Técnico Agrícola fue un desafío importante, que pude sacar adelante gracias al apoyo de mi familia, mis compañeros y mis profesores de Inacap Temuco. Fue una experiencia muy enriquecedora”, indicó Felipe Belmar.

Luego de dos años de ese importante paso para la vida de Felipe, actualmente el joven hace clases en una escuela, lo que lo tiene muy contento.

“Estoy trabajando en una escuela, enseñándole a los alumnos todo lo relacionado con el mundo agrícola, se me abrieron las puertas en el ámbito laboral y me he podido desarrollar profesionalmente, lo que me tiene muy feliz”, agregó.

Hoy, a sus 25 años, ha recorrido varias ciudades del país e incluso el extranjero contando su historia, la que se ha transformado en un ejemplo para la sociedad.

“Lo que más me pone contento es que mi testimonio sirva como ejemplo para muchas personas. Mi historia la he podido contar en varias ciudades del país e incluso en el extranjero. Ha sido una experiencia muy enriquecedora para mí, mi familia y para todos”, indicó.

Felipe aprovechó la instancia para entregar un mensaje a todos como sociedad, señalando que nada es imposible y que todos somos capaces de salir adelante.

“El mensaje para todos como sociedad, ya sean padres, profesionales, es que entreguen todas las herramientas posibles, para que niños con síndrome de Down logren una mayor autonomía, no todos van a lograr ser independientes, pero si van a poder ser autónomos, para que al igual que yo, puedan continuar con una carrera y llegar al mundo laboral por su propio esfuerzo y mérito, la inclusión la hacemos todos y hay que confiar en cada una de las capacidades de cada persona”, dijo Felipe.   

Junto a Felipe está su madre, Trinidad Gutiérrez,  quien con una cámara en mano registra todo, como una forma de guardar cada logro que consigue su hijo. Nos contó que se siente orgullosa de todo lo que ha conseguido Felipe y está muy contenta porque todo ha sido fruto del esfuerzo que han hecho como familia.

“Para nosotros como familia lo que ha pasado con Felipe es un orgullo. Estamos muy contentos con él, porque ha ido logrando todo lo que se ha ido proponiendo en su vida y para eso ha sido fundamental el apoyo de nosotros como familia, de sus profesores, de gente que lo acompañó en este proceso y sobre todo en quienes confiaron en sus capacidades”, indicó.

Para Trinidad el ejemplo de su hijo no sólo derriba las barreras hacia la inclusión, sino que demuestra que lo principal es confiar en cada una de las capacidades de las personas.

“Lo principal es que las personas, la comunidad en general confíen en los chicos con síndrome de Down, que sí tienen muchas capacidades y por eso es fundamental la estimulación temprana, la educación y mucho trabajo, porque sólo así se logran los objetivos y estamos orgullosos que el testimonio y la historia de Felipe sirva de ejemplo para la sociedad”, finalizó.