El subsecretario del Medio Ambiente, Javier Naranjo, visitó la Región de Coquimbo para conocer en detalle el estado del trabajo técnico que permitirá la protección de humedales costeros y altoandinos en las provincias del Elqui y Limarí, como el futuro santuario del río Cochiguaz y el Sitio Ramsar Río Limarí; ambos ecosistemas priorizados por el Ministerio del Medio Ambiente para mantener la alta biodiversidad de la flora y fauna característica de las comunas de Ovalle y Paihuano.
Actualmente la Región de Coquimbo posee 17.888 hectáreas de humedales de una superficie total de 4.058.000 há, de las cuales sólo 518 están protegidas, lo que corresponde a un 2,9% de la superficie de humedales, siendo el equivalente a dos Embalses Puclaro, con lo que se hace importante proteger mayor superficie del territorio.
Sitio RAMSAR Río Limarí
La primera actividad de la autoridad ambiental, Javier Naranjo, comenzó en el Parque Nacional Bosque Fray Jorge junto a guardaparques, representantes de SERNATUR y la Seremi Claudia Rivera, con la finalidad de entregar el certificado de Sitio Ramsar río Limarí a la Corporación Nacional Forestal. Ella administra el área protegida, que abarca 527 hectáreas desde el poblado de Salala hasta su desembocadura en el océano Pacífico y que fue declarada de importancia internacional a mediados de 2020. El Ministerio del Medio Ambiente está revisando la propuesta técnica que busca declarar la desembocadura como Santuario de la Naturaleza.
Para Ernesto Flores, jefe Provincial de CONAF del Limarí, la entrega del certificado acredita el esfuerzo mancomunado de hace 20 años en el territorio, que implicó la realización de monitoreos y la recopilación de información. “Es un trabajo que debemos realizar con rapidez, sobre todo en esta región, donde el porcentaje de áreas protegidas es muy bajo respecto a su superficie. La región necesita más áreas protegidas y este es un paso importante”.
Durante la visita, se recorrieron las dependencias del Parque y se anunció su reapertura para mañana martes 19 de enero, con un aforo de máximo 100 personas y visitas con horarios acotados, a fin de facilitar el control de las medidas sanitarias preventivas por COVID-19.
El río Limarí es parte de una red de humedales costeros del norte de Chile, una zona Hot Spot o punto caliente de biodiversidad y endemismo, que incluye estuarios y aguas marinas poco profundas, sustentando a más de 130 especies de animales y plantas. Es el hábitat o el hogar de especies endémicas incluyendo 32 especies de plantas como el copao (Mugil cephalus), la iguana chilena (Callopistes maculatus), el cururo (Spalacopus cyanus) y el sapo de atacama (Rhinella atacamensis), una especie clasificada como Vulnerable según la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Destaca como zona de reproducción, refugio y alimentación de avifauna nativa y migratoria y como fuente de alimento y agua para las comunidades aledañas. Se ha visto amenazado por el cambio climático, la desertificación, presiones de la deforestación, erosión y las descargas de basura y sustancias químicas.
Santuario de la Naturaleza Río Cochiguaz
El subsecretario se reunió en el camping Cochiguaz con el alcalde Hernán Ahumada, integrantes de la Junta de Vecinos, representantes de Estero Derecho y la Seremi del Medio Ambiente, Claudia Rivera, para conocer en detalle el trabajo técnico impulsado por la Comunidad Indígena Canihuante, que permitirá proteger parte del agua que nace desde la cuenca del Valle del Elqui hacia el mar. Se trata del futuro Santuario de la Naturaleza Río Cochiguaz en Paihuano, que abarca humedales altoandinos, glaciares, llaretales y especies en categoría de conservación, junto con atesorar el patrimonio arqueológico e intangible asociados a sistemas ancestrales y tradicionales de vida.
El área propuesta es uno de los cuatro humedales prioritarios de la Región de Coquimbo, definidos en el Plan Nacional de Protección de Humedales 2018 – 2022 y que abarca 49.315 hectáreas. En esta cuenca existen cerca de 50 glaciares de roca, los que juntos acumularían un total de 35 millones de metros cúbicos de agua, equivalentes al 35 % del volumen máximo de acumulación de agua del embalse Puclaro. Mientras que 1.556 hectáreas corresponden a humedales altoandinos que son alimentados de glaciares de roca, siendo una de las subcuencas más importantes del río Elqui.
Los resultados y avances de la investigación fueron presentados por Rafael Canihuante, Coordinador de Campañas y Levantamiento de Información, quien destacó el arduo trabajo que han hecho como comunidad para sacar adelante el área protegida, siendo apoyados de manera voluntaria por especialistas en materia de conservación. “Las especies que más han llamado la atención ha sido el Gato colocolo, el Matuasto, hay algunas especies de insectos e incluso reptiles, que todavía no están descritos taxonómicamente. Sería interesante descubrir estas nuevas especies y ponerles un nombre local”.
Norma Secundaria de Calidad Ambiental del río Elqui
Durante el conversatorio funcionarios de la SEREMI del Medio Ambiente informaron sobre el Anteproyecto de la Norma Secundaria de Calidad del Río Elqui, que regulará y protegerá a 9 ríos de la cuenca de la Provincia de Elqui, beneficiando a cerca de 200 mil habitantes. El objetivo de esta norma es la protección de la biodiversidad presente en la cuenca, por medio del resguardo de la calidad de las aguas superficiales continentales, donde los municipios que participan en el comité operativo de la elaboración de la norma, tienen un rol fundamental en la toma de decisiones para la protección del recurso hídrico.
Al respecto, el Subsecretario del Medio Ambiente Javier Naranjo, declaró que “hemos podido conversar con la comunidad y contarles que vamos a trabajar un poco en la expansión de la norma para poder trabajar en las cuencas de origen, y de esta manera poder proteger y asegurar que esta buena calidad de las aguas se mantenga en el tiempo”.
Actualmente los antecedentes técnicos de ambos Santuarios de la Naturaleza están siendo revisados por el Ministerio del Medio Ambiente, donde se corroborá la información proporcionada, los límites de la propiedad que abarcaría el polígono y la identificación de los objetos de conservación, entre otros requisitos. De ser aprobada la propuesta de las nuevas áreas protegidas, pasarían al Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y luego a la firma del Presidente de la República, finalizando con la toma de razón y posterior publicación en el Diario Oficial.