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Representan el 2% de la superficie terrestre del planeta, sin embargo, albergan el 20% de la diversidad de flora y se consideran como vitales para nuestra existencia. Por lo mismo, la relevancia de su cuidado.

De los 40.579 km2 de superficie de la Región de Coquimbo, 178,88 Km2 son humedales. De estos, sólo el 2,9% se encuentra protegidas. Por lo mismo, durante los últimos años se ha presentado el desafío de reforzar gestiones y programas ambientales con el propósito de relevar la importancia del cuidado de estos ecosistemas.

De acuerdo a la definición de la Convención Ramsar, los humedales son vitales para la supervivencia humana, pues “son uno de los entornos más productivos del mundo, y son cunas de diversidad biológica y fuentes de agua y productividad primaria de las que innumerables especies vegetales y animales dependen para subsistir”.

Los esfuerzos de las autoridades también han ido en esta línea. “Es momento de poner en valor los múltiples beneficios que otorgan los humedales. Estos espacios nos proveen de servicios ecosistémicos, reducen las inundaciones, alivian las sequías, ayudan a absorber gases de efecto invernadero, mejorando así la condición ambiental, protegiendo las costas del cambio climático”, manifestó la seremi de Medio Ambiente, Claudia Rivera.

Atractivo turístico

La Laguna de Conchalí en Los Vilos está protegida por Minera Los Pelambres y fue el primer humedal de la región en recibir la denominación de Sitio Ramsar por su riqueza e importancia para el ecosistema. El lugar contempla mirador, zona de picnic y senderos peatonales, los que consideran el acompañamiento de guías. Actualmente, en el contexto de pandemia y Fase 2 de la comuna de Los Vilos, se realizan visitas guiadas con aforo de 5 personas, de martes a viernes, entre 10:00 y 13:00 horas, y luego en las tardes, entre las 15:00 y 18:00 horas. Se consideran todo el protocolo de sanitario y las reservas se deben realizar en www.centrocala.cl

Ejemplo de conservación: Laguna Conchalí en Los Vilos

En la Región de Coquimbo se identifican 20 humedales costeros. Sin embargo, sólo 3 de ellos se encuentran protegidos: Río Limarí oficializado hace unos días como sitio Ramsar; Las Salinas de Huentelauquén, que incluye la última sección del Río Choapa y su extensa laguna estuarina; y la Laguna Conchalí en Los Vilos, que el 2000 recibió la categoría de conservación de Santuario de la Naturaleza y en 2004 fue denominado como Sitio Ramsar.

La Laguna Conchalí está ubicada a 4 kilómetros al norte de Los Vilos, contempla 50,4 hectáreas y se caracteriza por su riqueza en flora y fauna. Hasta ahora se han identificado 120 especies de aves, de las cuales 5 se encuentran en categoría de amenaza y 55 son acuáticas, representando el 20% de la riqueza de aves acuáticas del país. Además, durante esta época del año, la laguna se transforma en un punto de descanso para especies de aves migratorias del hemisferio norte, algunas provenientes incluso de Canadá y México.

La actual riqueza de la Laguna Conchalí está vinculada a la protección temprana que se registra desde 1997, cuando pasó a estar bajo la administración de Minera Los Pelambres. En ese momento se comienza un proceso de recuperación y mantención. Entre las medidas implementadas a la fecha, destaca el retiro de varias toneladas de basura (incluyendo un vehículo que se encontraba sumergido), la instalación y mantención de una reja alrededor del espejo de agua, para prevenir el ingreso de perros y bañistas, el ordenamiento de las áreas de esparcimiento- con la instalación de mesas, quinchos y servicios higiénicos-, la construcción de un sendero interpretativo y del Centro de Difusión del Cobre, recinto desde el que se comienzan las rutas guiadas al humedal y que cada año recibe 35 mil visitas, las que son gratuitas y abiertas a toda la comunidad.

El trabajo realizado por Minera Los Pelambres ha permitido mejorar significativamente el estado de la laguna. Actualmente se dispone de un Plan de Manejo aprobado por el Ministerio de Medio Ambiente y que fue creado de manera conjunta entre la propia minera, la Wildlife Conservation Society (WSC)- una ONG global y de reconocimiento internacional que tiene como misión proteger la vida silvestre y la naturaleza a través del desarrollo de ciencia y educación- y el Centro de Ecología Aplicada (CEA), consultora ambiental con experiencia en recursos naturales.

El plan está fuertemente orientado a acciones vinculadas al régimen hídrico y control de especies invasoras. Lo anterior, debido a la identificación de seis focos de amenaza: cambios en el régimen hídrico, especies exóticas invasoras y perros vagos (amenazas directas); falta de conocimiento y valoración de la laguna, falta de enfoque de paisaje en la gestión, y la falta de un modelo de gobernanza (amenazas indirectas).

 

¿Por qué son tan vitales los humedales para nuestro ecosistema?

El Dr. Jaime Cuevas, investigador del Centro Científico CEAZA, señala que los humedales cumplen un rol fundamental en el medio ambiente, “ya que junto con ser importantes refugios para la biodiversidad, representan una zona de amortiguación ante tsunamis e inundaciones junto con filtrar nutrientes y contaminantes”.

Además, agrega que son parte importante de la descontaminación del agua, ya que las plantas que crecen en ellos, absorben los nutrientes y contaminantes provenientes del exterior. “La vegetación inmoviliza estos elementos contaminantes al interior de su biomasa y, los recicla cada vez que las plantas mueren y vuelven a surgir otras nuevas. Los sedimentos que se mueven superficialmente también son retenidos por la vegetación, determinando que las aguas que salen de los humedales sean sustancialmente más limpias con respecto a las entradas de materiales hacia el humedal”, señala.

 

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