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Alejandro Pizarro
Las autoridades regionales reconocen la saturación de la red de salud a nivel regional, aunque sostienen que el trabajo coordinado con el sistema nacional será clave para atender a los pacientes UCI. De todas formas, advierten que la mayor dificultad está en contar con el personal necesario para supervisar camas críticas. Por su parte, expertos sostienen que no es descabellado un confinamiento regional.

Preocupación existía en la comunidad ante el anuncio del colapso de los diferentes hospitales de la Región de Coquimbo, en el marco de una pandemia que no da tregua, lo que obliga a que las urgencias sean derivadas a la Atención Primaria. A esto se suma que sólo hay cinco camas UCI, los casos diarios por Covid-19 se mantienen en un promedio de 200 diarios y así, se abre un abanico de acciones que pone en jaque a las autoridades.

En ese contexto, es que se efectuó ayer en la Intendencia Regional un nuevo Comité de Crisis, para abordar una situación que ha sido advertida por diferentes gremios médicos y sociedades científicas. Había inquietud por las medidas más inmediatas y aquellas que podrían llevarse a cabo en el mediano plazo, porque recién a las dos semanas de iniciada la cuarentena, es decir, en nueve días más, se podría esgrimir un primer análisis sobre la situación en las cuatro comunas que se encuentran en cuarentena, es decir La Serena, Coquimbo, Vicuña y Salamanca. A estas se suma Monte Patria, que estará en confinamiento desde el jueves 18 a las 05:00 de la mañana.

Preocupación

Como señalábamos, una de las inquietudes principales está en el colapso que está viviendo la red asistencial. Uno de los aspectos fundamentales está en la necesidad de aumentar las camas UCI y la reconversión de camas críticas. Esta saturación de la red hospitalaria fue reconocida por las autoridades, sumado a valorar los esfuerzos que están realizando los funcionarios de salud. En ese contexto, se ha insistido oficialmente que la red está en condiciones de “recibir pacientes en cualquier otra región del país”, ya sea paciente Covid o de otra patología, lo que genera una nueva arista.

Considerando el aumento de casos y la situación de la red de salud, algunos plantean la necesidad de endurecer las medidas, e incluso se abre la chance de una cuarentena total regional.

Sin embargo, el seremi de Salud, Alejandro García, señala que si bien existen casos acumulados y activos muy importantes, insiste que “existe un índice de trazabilidad que nos hemos comprometido a mantener y aumentar, y que hoy llega al 95%. Respecto de la búsqueda activa de casos, el 70% de todas las muestras que se están indicando corresponden a esta variable”.

Los números de la red asistencial no son halagüeños. Pero, el director del Servicio de Salud Coquimbo, Edgardo González, indicó que si bien la situación se ha hecho bastante crítica, se han logrado ampliar las opciones. “En el peor momento de la pandemia durante el año pasado, llegamos a 87 camas. En la actualidad hemos llegado a 124 camas UCI, con ventilador mecánico y personal asociado a estos recursos. Y se deberían abrir cuatro camas más, pero lo complicado es encontrar capital humano, aunque desde Nivel Central se dispuso de un decreto que permite contratar a personas retiradas y alumnos de último año de medicina, enfermería, obstetricia y del área de la salud en general. Además, los funcionarios nuevos pasan a unidades de menor complejidad, y los que están al interior, van escalando mediante un proceso de capacitación a las UCI” .

Cabe destacar que en lo que va de este año, 41 pacientes de la región fueron trasladados hasta otros puntos del país y el año pasado fueron sobre 48.  

 

¿Es necesaria una cuarentena?

El fin de semana, el 98% de la población de la Región de Coquimbo estuvo en cuarentena. Bajo ese contexto, surge el debate sobre la posibilidad de una cuarentena total regional. Al respecto, el director del Servicio de Salud, Edgardo González, sostuvo que “está sujeto a una serie de factores. Las comunas que están en cuarentena reúnen las condiciones, ya sea por el número de casos, la positividad y los hospitales en cuestión. Esto tiene que medirse durante las próximas dos semanas, las que por lo demás serán bastante tensas”, subrayó.

Sobre el mismo tema, el intendente Pablo Herman recordó que “Canela pasó de Fase 2 a Fase 3, por tanto hay comunas que han tenido un mejor comportamiento. Por tanto, considero que debe analizarse caso a caso y no regionalmente”, indicó.

Sin embargo, expertos tienen una visión distinta, que contrasta con lo señalado por Herman. Al respecto, la epidemióloga Paola Salas, en conversación con diario El Día, señaló que “no es absurdo plantearse la posibilidad de una cuarentena regional, porque ya ha ocurrido en otras, como en Los Ríos. El tema es que hemos visto comunas con un peak aumentado como Paihuano, Andacollo, Los Vilos, Ovalle y Canela. Lo mismo sucedió con Monte Patria, que llegó a cuarentena. Por tanto, un confinamiento regional no es una mala idea considerando el número de casos que se están produciendo en las comunas pequeñas”, subrayó.

La profesional además puso el énfasis en el traslado de pacientes hacia otras regiones del país. “La verdad es que a estas alturas ya no está siendo muy posible, porque el contagio ya está masificado a lo largo del país. El número de camas escasea en todos lados, incluida la Región Metropolitana. Hay que subrayar que el 20% de los casos positivos requieren hospitalización y de ese porcentaje, de un 3% a 5% necesitan una cama UCI. Ya lo habíamos previsto”, subrayó.  

Por su parte, el presidente regional del Colegio Médico, Rubén Quezada, subrayó que “si las autoridades quieren obtener resultados distintos, no pueden seguir haciendo lo mismo. Lo primero es reconocer que la situación no está bajo control. Seguir reconvirtiendo camas, continuar diciendo que tenemos trazabilidad o señalar que sólo depende de los ciudadanos, no nos ha dado buenos resultados. Respecto de la posibilidad de una cuarentena regional, pienso que habría que revisar criterios, porque se ha desdibujado el plan Paso a Paso, porque pareciera que no son los aspectos sanitarios los que se están utilizando para confinar o desconfinar, cuando esto no depende del intendente. Lo clave es que las cuarentenas se cumplan pero otorgando oportunidad para que las personas se queden en la casa, pues si hay gente que sale por necesidad de trabajo o para comer, no se va a cumplir el objetivo. Se ha perdido la mirada sanitaria y se ha cedido ante otros intereses”, argumentó.

A su vez, insistió que “los equipos clínicos están  sobrepasados. Nuestros hospitales no están dando abasto y el Servicio de Urgencia se ha transformado en un centro de hospitalización de pacientes críticos, por lo que la atención primaria ha tenido que dar un paso al frente para contener las emergencias día a día”.

 

Fiscalizaciones

Desde el jueves hasta el domingo por la noche, se realizaron 114.577 controles a personas en comunas en cuarentena, arrojando 436 detenidos. Se han efectuado 430 sumarios cursados por el Ministerio de Salud, 159 de ellos en La Serena y 248 en Coquimbo, en especial por el no uso de mascarilla y/o por no cumplir o mal utilizar el permiso de desplazamiento. A su vez, el intendente Pablo Herman destacó que se han recibido un gran número de llamados por las llamadas fiestas clandestinas. “El llamado es a los jóvenes, porque aún no están siendo vacunados y pueden trasladar el virus”, subrayó el jefe regional.

Por su parte, el jefe del Ejército en la zona, teniente coronel Luis Sagás, subrayó que se analizarán otras fórmulas para poder contener la movilidad, pues han debido redoblar esfuerzos con un menor contingente. “Según lo conversado con el Comité de Crisis, si seguimos haciendo lo mismo que realizábamos hace un año atrás, quizás tendremos los mismos resultados. Se trata de un trabajo en conjunto entre las Fuerzas Armadas y esperamos de aquí al miércoles (mañana) elaborar una estrategia que nos permita focalizar los esfuerzos debido a la disminución de personas que hemos tenido para realizar los controles. La idea es aplicarla en los sectores que tengan una mayor concurrencia y movilidad”, aseguró.

 

¿Y la restricción vehicular?

Una de las medidas más polémicas que se implementó durante el verano fue la de la restricción vehicular, la que tuvo lugar durante los fines de semana en la avenida del Mar y accesos a la Costanera de Coquimbo y que permaneció hasta el sábado pasado.

Si bien es cierto se planteó la posibilidad de extenderla a días de semana, esta iniciativa quedó en “veremos” y sin una fecha exacta para su aplicación, como señaló previo a la cuarentena total el seremi de Gobierno, Ignacio Pinto. Sin embargo, la llegada del confinamiento cambió la condiciones, y en ese sentido, la opción de una restricción sigue en estudio.

Al respecto, el intendente Pablo Herman acotó que “se debe evaluar el comportamiento de la ciudadanía. Y para eso, se requiere de al menos una semana de análisis. Se están cruzando los planos del visor territorial con los planos viales, para así generar algunas estrategias”.

 

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