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Lautaro Carmona
Diferentes actores evaluaron el retorno de establecimientos, lo que se inició durante la semana pasada. Desde la autoridad, señalan que no hay nada que temer, mientras que diversas entidades insisten que “no es el momento” para las clases presenciales, lo que se refuerza en el caso de los colegios municipales. Por su parte, expertas ponen en discusión los efectos en el proceso educativo como tal.

Por: Rodrigo Solís y Zoe Arévalo 

Es claro. Existen visiones bastante marcadas respecto del regreso a clases. Si bien desde el Gobierno aseguran que “están las condiciones” para volver a lecciones presenciales, 11 de 15 municipalidades de la Región de Coquimbo han determinado que los establecimientos no abrirán sus puertas. En tanto, los colegios privados han establecido modalidades “mixtas” que aseguran la presencialidad y las clases online, mientras otras entidades subrayan que sólo los sistemas a distancia son preferentes en un momento de alto contagio.  En ese contexto, hay posturas controvertidas.

El seremi de Educación, Claudio Oyarzún, comentó a El Día que “el balance que se realiza durante esta primera semana es positivo. El proceso que se inició incluso en algunos jardines infantiles ratifican que los lineamientos que hemos entregado y aplicado, más allá de los grados de presencialidad, porque pudimos ver en terreno la aplicación de los protocolos, con cursos más reducidos y modalidad mixta. No hay que olvidar el concepto esencial de la voluntariedad, donde el compromiso de la comunidad educativa es fundamental”, subrayó la autoridad.

Cabe destacar que el gobierno supervisó la implementación de protocolos en establecimientos educacionales para el inicio del año escolar en el Colegio Bernardo O’Higgins de La Serena el pasado miércoles. En ese momento, la sostenedora del establecimiento, Elizabeth Ardiles, subrayó que “los procesos de aprendizajes efectivos son en la sala de clases”.



UNA EXPERIENCIA A CONSIDERAR



El Colegio San Joaquín, establecimiento privado de La Serena, situado en calle Gabriela Mistral, es uno de los recintos que volvió a clases el pasado miércoles 24. Su rector, José Ignacio Baeza, conversó con El Día y se refirió a la modalidad utilizada.

“La organización para poder regresar presencialmente requirió de un plan que se definió a fines de diciembre. Esto incluye aforos limitados, con un máximo de 17 alumnos por sala. Pero yo quiero destacar algo muy importante, ya que cerca del 90% de las familias mostró el interés de regresar a clases”, señaló.

Cabe destacar que este colegio tiene doble jornada, mañana y tarde, y con una modalidad híbrida, con estudiantes en el aula y otros de forma presencial. “Una semana viene un grupo y en la siguiente se produce la rotación”, subrayó José Ignacio Baeza.



OBJECIONES



Más allá de las modalidades, desde la dirigencia del Colegio de Profesores no ven con buenos ojos ni lo realizado ni lo que está pronto a venir con el “súper lunes”.

El presidente regional de esta entidad, Mario Sánchez, aseguró a El Día que “bajo ningún contexto nos parece correcto el regreso a clases, pues consideramos que sigue siendo peligroso y no están las condiciones. Además, me parece que muchos colegios particulares o particulares subvencionados cometieron un sinnúmero de abusos en materia laboral o contractual, junto con el cobro de mensualidades”, indicó.

Respecto del proceso que se inicia desde mañana, Sánchez insistió que “desde la perspectiva municipal, no están las condiciones. Por lo menos, se debe estar en Fase 4 para volver, e incluso nadie se puede aventurar que esto será una realidad en abril, ya que la vacunación no es la única variable. Por eso, no aprobamos bajo ningún punto de vista la visión del alcalde de Paihuano, Río Hurtado y del servicio local Puerto Cordillera, en Coquimbo, que insisten en llamar a la presencialidad”     

Por su parte, Blanca Díaz, vocera del movimiento civil “No a la vuelta de clases”, acotó que “tengo la dos visiones, como apoderada del sector privado y vocera del público. En el caso del sector particular, se entregaron los protocolos en diciembre y en el público creo que aún no existen garantías para ningún niño, niña o adolescente en cuanto a transporte, junto con una cláusula de seguro escolar por Covid-19. Además, creo que el ejemplo de lo que sucede en Puerto Cordillera, en Coquimbo demuestra que el interés principal no está puesto en los menores”.



“MARZO NO ES UN BUEN MES”. 



Tras la polémica por la vuelta a clases presenciales, expertas en educación aseguraron que no es imperioso que los alumnos asistan de manera física a los establecimientos.

Aurora Videla, profesora de castellano, magíster en educación y jefa del área creativa de la editorial Ziemax,indicó que lo primero es  hacer campañas gubernamentales de concientización de lo que significa el retorno a clases.  “Se debe hacer con una buena campaña educativa que explique lo que es volver a clases y en abril, mayo, o en junio cuando estemos todos vacunados, ojalá en un sistema gradual y semipresencial”.

En tanto, la secretaria de género de la Universidad Católica del Norte, educadora de párvulos y profesora de enseñanza básica, Carolina Salinas, insistió que “las restricciones sanitarias no son solamente tener alcohol gel y mascarillas en todas las salas, hay que entender el proceso completo. Los niños y niñas no van a tener la capacidad de mantener el distanciamiento social durante una jornada de tres o cuatro horas como se esta planteando. Ellos de una forma natural se van a acercar, van a interactuar, compartir y se van a tocar”, concluyó.

 

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