En nuestro país, más del 58% de los residuos sólidos municipales son residuos orgánicos que provienen de las casas particulares, ferias libres, parques y jardines, de allí la necesidad de reducir esas cifras, porque al desechar esos residuos se pierden sus nutrientes y además se producen diversos impactos ambientales, se favorece la proliferación de vectores sanitarios (ratones, moscas, aves) y se generan olores molestos y Gases de Efecto Invernadero (GEI).
La Estrategia mencionada tiene como objetivo principal que la ciudadanía genere menos residuos orgánicos y separe en origen aquellos que no logran evitar, ya sea en sus hogares, oficinas, establecimientos educacionales, parques, mercados y ferias libres.
Se espera además contar con infraestructura, equipamiento y sistemas logísticos que permitan que los residuos orgánicos sean utilizados como recurso en la producción de mejoradores de suelo o de energía eléctrica o térmica, aprovechando los nutrientes, el agua y la energía que contienen.
Metas para el 2030
Para cumplir con la Estrategia se espera que, en los próximos 10 años, las municipalidades puedan valorizar el 30% de los residuos orgánicos que generan y lograr que todos los parques urbanos administrados por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo composten en sus instalaciones.
Otros importantes objetivos de la Estrategia propuesta son:
- Lograr que 500.000 familias y 5.000 establecimientos educacionales usen composteras y/o vermicomposteras.
- Alcanzar que 500 barrios del programa “Quiero mi Barrio” realicen compost y/o vermicompostaje
- Contar con que la mitad de las instituciones públicas separen en origen y valoricen los residuos orgánicos que generan.
Con respecto a esta innovadora iniciativa, la seremi del Medio Ambiente, Claudia Rivera precisó que “esta estrategia plantea la ambiciosa meta de valorizar el 66% de los residuos orgánicos que generamos al 2040. Un gran desafío que potenciará la implementación de la ley de Responsabilidad Extendida al Productor, norma que obligará a los productores a aumentar sustantivamente las tasas de reciclaje de envases y embalajes; a la vez exigirá que el 80% de las viviendas del país cuenten con un sistema de recolección puerta a puerta de los materiales reciclables”.
Para ello, se establecerán obligaciones e incentivos para la población, fortaleciendo la educación ambiental de las personas, a través de los municipios y otros programas públicos. En el ámbito privado será primordial que los distintos proyectos que se desarrollen puedan beneficiarse de los mercados de carbono, que consisten en el desarrollo de actividades que reduzcan o absorban los GEI para mitigar el cambio climático.
El proceso de Consulta Pública estará disponible hasta el 15 de septiembre de 2020, ingresando al portal de consultas ciudadanas http://consultasciudadanas.mma.gob.cl o en las oficinas de partes del Ministerio o las SEREMI a lo largo del país, donde la ciudadanía podrá realizar observaciones a la propuesta.
Finalmente, la autoridad ambiental de la Región de Coquimbo destacó que “es fundamental contar con la participación de la ciudadanía para promover la cultura del reciclaje de todos los tipos de residuos, evitando -en primera instancia-, que éstos se generen, por eso los invitamos a ser parte de este proceso de consulta pública” concluyó Rivera.