• Nibaldo Avilés informa que el miércoles 12 de junio se tuvo la última comunicación con el Consejo de Isabel Gongard, quienes se comprometieron a dar una fecha pronta de reunión, lo que no ha ocurrido.
Crédito fotografía: 
Lautaro Carmona
A través de un comunicado de prensa, la autoridad solicita la restitución de los espacios universitarios antes del sábado 15 de junio, a las 18:00 horas

Un nuevo capítulo suma la toma de los alumnos de la Universidad de La Serena, luego de que la tarde de este viernes, el rector Nibaldo Avilés, entregara un ultimátum a los movilizados del campus Isabel Bongard, mediante un comunicado de prensa.

Según detalla el documento, la decisión se adoptó al no recibir respuesta a la petición de diálogo por parte de rectoría, argumentando que si bien los estudiantes se comprometieron a dar una fecha pronta de reunión, esto no ha sido efectivo.

“Concluimos que varios puntos no han sido planteados anteriormente a ninguna autoridad directa y que al ser analizados, pueden ser de fácil resolución, por lo que no justificarían este acto de violencia, expresado como toma del recinto”, declaración de rectoría

Bajo este escenario, se solicita la restitución de los espacios universitarios antes del sábado 15 de junio, a las 18:00 horas. “A nombre de la comunidad ULS, sus autoridades superiores y órganos colegiados, esperamos que los y las estudiantes movilizadas reflexionen”.

En la declaración, Avilés agrega que lo anterior es “un tiempo prudente que nos permitiría catastrar, hacer limpieza y ordenamientos adecuados para reiniciar las actividades el día lunes 17 de junio, y en lo inmediato, ponerse a trabajar en comisión para avanzar en la resolución de los temas internos que les afectan”.

En relación al petitorio emanado del campus de Amunátegui, entregado el 11 de junio, “concluimos que varios puntos no han sido planteados anteriormente a ninguna autoridad directa y que al ser analizados, pueden ser de fácil resolución, por lo que no justificarían este acto de violencia, expresado como toma del recinto”.

Desalojo marca precedente

Tras dos semanas de movilización, la madrugada del miércoles personal de Fuerzas Especiales de Carabineros desalojó el campus Andrés Bello de la ULS, procedimiento que se desarrolló de manera pacífica. En el lugar solo se encontraron tres estudiantes, dos mujeres y un hombre, quienes quedaron a la espera de una citación.

Sin embargo, ese mismo día en la noche, un grupo de encapuchados volvió a tomarse las dependencias, prendiendo barricadas y haciendo desmanes a las afueras del recinto. La situación no tuvo mayores consecuencias, ya que durante la madrugada el espacio fue recuperado por los uniformados.

Cabe recordar que desde un principio, la directiva de la casa de estudios justificó el desalojo en Colina El Pino por el “nivel de violencia” que alcanzó la toma, a diferencia de lo que sucedía en Bongard, donde los manifestantes eran alumnos a rostro descubierto con un petitorio claro, argumentaban. 6001i

 

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