• El Cordinador de la Cruz del Tercer Milenio Mauricio Galvez junto al Papa Francisco en el Aula Pablo VI del Vaticano en la Audiencia General.
Crédito fotografía: 
Cedida
En la instancia realizada en Roma, participó el Encargado y Coordinador del Monumento Cruz del Tercer Milenio, Mauricio Gálvez González.

Con una audiencia especial del Papa Francisco en la sala Regia del Palacio Apostólico del Vaticano donde asistieron los más de seiscientos participantes al Primer Congreso Internación para Rectores y Operadores de Santuarios que culminó pasado el medio día del jueves 29, encuentro organizado por el Pontificio Consejo para la promoción de la Nueva Evangelización, el que se inició el martes 27 de noviembre y tuvo entre sus participantes al Encargado y Coordinador del Monumento Cruz del Tercer Milenio, Mauricio Gálvez González, quien pudo dialogar en dos oportunidades con el Santo Padre manifestándole el saludo enviado por el alcalde de Coquimbo.

En su discurso final a los Rectores y Operadores de diversos Santuarios del mundo, el Santo Padre resaltó la importancia de estos como lugares de culto en todo el mundo. “Cuanta necesidad tenemos de los Santuarios en el camino cotidiano que la Iglesia realiza – señaló el Papa – son el lugar donde nuestro pueblo se congrega para expresar su propia fe en la simplicidad, y según las varias tradiciones que se han transmitido desde la infancia. Por muchos motivos, nuestros Santuarios son insustituibles porque mantienen viva la piedad popular, enriqueciéndola con una formación catequética que sostiene y fortalece la fe y al mismo tiempo, alimentando el testimonio de la caridad”.

Manifesto a los presentes que "Son muchos los que vienen al Santuario porque necesitan recibir una gracia, y luego vuelven para agradecer por haberla experimentado, a menudo por haber recibido fortaleza y paz en la prueba. Esta oración hace que los Santuarios sean lugares fecundos, para que la piedad del pueblo sea siempre alimentada y crezca en el conocimiento del amor de Dios”.

"Nuestro compromiso es hacer de estas consideraciones del Papa un trabajo más fecundo pastoralmente", señaló Mauricio Gálvez, Encargado de la Cruz del Tercer Milenio.

Por su parte Mauricio Gálvez, Encargado del Monumento Coquimbano, manifesto "nuestro compromiso es hacer de estas consideraciones del Papa un trabajo más fecundo pastoralmente ya estamos trabajando desde años con la buena disponibilidad y voluntad de nuestro Arzobispo René Rebolledo, con un plan pastoral para la Cruz del Tercer Milenio queremos llegar al corazón de cada persona que como nos decia el Santo Padre los pelegrinos o visitantes en estos lugares buscan acrecentar su fe" concluyó.

Al término del Primer Congreso Internacional Gálvez, se reunió con el Embajador de Chile ante la Santa Sede Octavio Errázuriz, en la sede diplomatica del Chile en el Vaticano, a quien le informo de los avances y la protección de la Cruz monumental de Coquimbo.

LA IMPORTANCIA DE LOS TEMPLOS

El Papa Francisco les dirigió algunas consideraciones sobre estos lugares sagrados. En primer lugar, el Pontífice subrayó la importancia de la acogida a los peregrinos. “Sabemos que con mayor frecuencia nuestros Santuarios son meta no sólo de grupos organizados – precisó el Papa – sino de peregrinos individuales o de grupos autónomos que se ponen en camino a estos lugares sagrados. Es triste cuando sucede que, a su llegada, no hay nadie que les dé la bienvenida y los acoja como peregrinos que han realizado un viaje, muchas veces largo, para llegar al Santuario. No puede suceder que se dé mayor atención a las exigencias materiales y financieras, olvidando que la realidad más importante son los peregrinos”.

El Santo Padre también recordó que, hay que tener en cuenta que muchas personas visitan el Santuario porque pertenece a la tradición local, a veces porque sus obras de arte son un atractivo, o porque está situado en un ambiente natural de gran belleza y encanto. “Cuando estas personas, son acogidas, se vuelven más disponibles a abrir sus corazones y dejar que sean moldeados por la Gracia. Un clima de amistad – precisó el Papa – es una semilla fecunda que nuestros Santuarios pueden sembrar en la tierra de los peregrinos, permitiéndoles recuperar esa confianza en la Iglesia que a veces puede haber sido decepcionada por la indiferencia recibida”.

 

Suscríbete a El Día y recibe a diario la información más importante

* campos requeridos

 

 

Contenido relacionado

- {{similar.created}}

No hay contenido relacionado

Cargando ...

 

 

 

 

 

 

 

 

Diario El Día

 

 

 

X