• El Parque nacional Banff es el parque nacional más antiguo de Canadá y uno de los parques más visitados de América del Norte
  • En el lugar donde se encuentra Nicolás se realizan diversas actividades al aire libre
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La pasión que siente por los viajes no solo lo motivan a conocer otras naciones, también le ayudó a tomar la decisión de escoger su profesión y como una brújula, marca sus metas en el futuro.

Con apenas 21 años, Nicolás Ferrari tiene el privilegio de ver muchos sellos en su pasaporte. Eso es porque las ansias de explorar lo han llevado a conocer varios países y, en sus propias palabras, a interesarse por nuevos estilos de vida, probar diferentes comidas, aprender idiomas, valorar culturas y escuchar acentos que nunca olvida.  

El joven, que nació en Santiago pero vivió muchos años en La Serena, se siente ‘papayero de corazón’. Ahora, desde Canadá, cuenta a El Día vía Whatsapp la historia de su más reciente aventura trabajando desde principios de año en la cocina de un hotel ubicado en el Parque Nacional Banff, entre las Montañas Rocosas de la Provincia de Alberta.

“Aunque siempre me ha gustado viajar me propuse ir más allá, el desafío era llegar al otro extremo del mundo y en el camino apareció como opción Canadá. Comencé a averiguar del país, en Youtube aprendí mucho y luego de eso comencé a investigar cómo podía emigrar. En ese momento inició un largo proceso para el cual tuve que juntar dinero para la visa, el pasaje y los primeros meses. Pasé prácticamente año y medio planificando este viaje”, comenta.

Si bien en un principio logró mantenerse con los ahorros que guardó desde Chile, Nicolás detalla que actualmente con su trabajo puede costear su vida en Canadá, lo que incluye alojamiento y comida. Además, asegura que puede pagar viajes dentro del país norteamericano, y juntar dinero para sus próximas metas.

En su tiempo libre, Nicolás (tercero a la izquierda), disfruta de deportes de aventura en los paisajes naturales que rodean el hotel donde labora

EL AMOR POR VIAJAR

Nicolás recuerda que desde pequeño siempre le gustó aprender. Pasó por la música y el deporte, pero ya más grande sus gustos se inclinaron por cosas que encontraría fuera de las fronteras de Chile.

“Quería conocer comida, estilos de vida, cultura, idiomas y acentos diferentes a los que ya conocía en mi país. Antes de salir de la preparatoria me propuse viajar; primero me interesó Asia, Europa o Estados Unidos, pero después llegué a la conclusión que quería conocer primero mi continente, Sudamérica, que en realidad es grande y diferente país  por país. Tuve la suerte de viajar a varios lugares y tener esa experiencia”, señala.

Ese amor por los viajes también lo hizo escoger su profesión, pero no sin antes pensar en otras alternativas.

“Yo trabajé en un estudio de abogados por mucho tiempo. Con el incentivo de mis padres y saliendo de la preparatoria comencé a hacer los trámites para empezar a estudiar derecho, una carrera que prácticamente me establecería en el país de forma permanente y que era muy diferente a lo que yo quería. Casi en el minuto 90 del juego decidí cambiar y estudiar algo que me gustara y me permitiera viajar, así fue como llegué al Inacap a estudiar gastronomía internacional”, relata.

El joven sostiene que el respaldo de sus padres fue fundamental, por lo que les agradece mucho el esfuerzo.

“Por suerte recibí el apoyo de mis padres, aunque ellos siempre quisieron que estudiara derecho, una carrera tradicional con un trabajo seguro. De todas maneras, desde el primer mes en que comencé a estudiar empecé también a trabajar en cocina, lo que hice hasta 20 días antes del viaje a Canadá. Con eso logré buenas vivencias, conocí buenos compañeros y tuve el privilegio de trabajar con excelentes equipos”, indica.

IMAGINAR LA AVENTURA

Este joven chef afirma que hasta el momento ha vivido lo que se propuso vivir en Canadá, pero no olvida que su aventura comenzó desde la planificación del proyecto migratorio y de su ejecución paso por paso. “La aventura comienza cuando la imaginas”, expresa.

 “He conocido culturas, personas maravillosas y espero seguir haciéndolo hasta que encuentre algo más emocionante para nutrirme en mis ansias de explorar”, manifiesta.

Finalmente, Nicolás comenta que, aunque le apasiona tanto viajar, piensa volver a la tierra en el que nació, creció y se desarrolló.   

“En Chile hay buena comida, además la gente es buena en mi país. Es cierto que necesitamos aprender un poco más de tolerancia y respeto pero al final somos buenas personas (…) también quiero llegar con las mejores historias para que otros se motiven a vivir las suyas”, dice. 6101iR

Nicolás destaca la oportunidad que tiene en Canadá de conocer personas de diferentes países y culturas

RECOMENDACIONES PARA VIAJEROS

“Primero hay que tener claro el objetivo y las razones del por qué quiero hacerlo. Lo segundo es ponerle todas las ganas, toda la garra, porque realmente nada es imposible si te lo propones y trabajas para ello”, argumenta.

 

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