Corminco espera la aprobación de Dominga y llama a generar una relación robusta entre comunidad y empresa

Este jueves a las 9 de la mañana se vota el proyecto minero Dominga en la región de Coquimbo, última instancia de confirmación en el proceso de estudio ambiental, después de que el Servicio de Evaluación Ambiental, SEA, recomendara a las autoridades políticas, su aprobación.

En entrevista con diario El Día, el gerente general del Consejo Regional Minero de Coquimbo (Corminco), Mauricio Gómez, dijo confiar en el marco institucional en el que las autoridades ambientales dieron la venia a este proyecto, dando a entender que Dominga ha cumplido con las exigencias ambientales, compensaciones y mitigaciones varias que tiene que tener un estudio de impacto ambiental, y agregó que no tienen “ninguna duda de que la votación será positiva para el comienzo de esta minera”.

- Desde Dominga aseguran que el 90% de la comunidad de La Higuera está de acuerdo con el proyecto, pero también hay grupos que están en contra. Asimismo, usted fue gerente de Comunidades y Medio Ambiente en la minera Carmen de Andacollo. De aprobarse Dominga, ¿cómo cree que se desarrollará la relación entre la comunidad y la empresa?

“En Chile hay una serie de modelos de trabajo obsoletos donde antes, se entendía que el trabajo con comunidades se trataba de sacar una billetera y comprar consensos. Sin embargo hoy el modelo que se ha ido gestionando tiene que ver con el trabajo en conjunto con la comunidad. No desde la óptica de que la compañía se siente en un púlpito dirigiendo a las colectividades, sino que entender que debe ser una mesa de trabajo donde la firma escucha lo que la comunidad necesita y ambos se ponen de acuerdo lo que el grupo requiere, no lo que sólo la empresa quiere, o lo que ella “cree” que las personas necesitan”.

- ¿Cree que las medidas de mitigación que ha propuesto Dominga son suficientes?

“Cuando las empresas desarrollan los estudios de impacto ambiental, ellas van complementando la información de acuerdo a lo que va pasando en el camino. Si bien ahora vemos en el informe de la evaluación, mitigaciones y medidas de compensación voluntarias, una vez que la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) sea aprobada, estas pasan a ser obligatorias y en ese sentido, la propuesta es completa. Pero, cuando uno está el terreno y se empieza a visualizar la problemática social, este trabajo con la comunidad va modificándose. En todo caso siempre hay un piso: el de la RCA y que es obligatorio cumplir. Creo que la relación entre una empresa y una comunidad es como el matrimonio: no es una relación de corto plazo, sino que generalmente duran más de 20 años y debe cuidarse como tal”.

- ¿Cuál sería el impacto económico para la región, de aprobarse Domingo este jueves?

“Como Consejo Regional Minero estamos absolutamente convencidos de que si la votación sólo se rige por temas medioambientales, evaluados  por personas competentes y servicios que tienen competencia ambiental, el proyecto debiera ser aprobado. Entendemos que hay una serie de situaciones que están rondando el proyecto (como son temas políticos), que no tienen que ver con los temas medioambientales que son los que se tienen que evaluar.

Ahora, tras la votación, comienza un proceso de obtención de los permisos ambientales sectoriales, algo que no es inmediato. Sí empiezan algunos procesos de construcción, que tienen que ver básicamente con los movimientos de tierra y eso implica contratación de mano de obra, de maquinaria, de seguridad de medioambiente, entre otros. Y a medida que pasen los meses, va a ir aumentando el impacto económico que tenga esta compañía, a nivel local. Hay una serie de encalamientos productivos que se desarrollarán. Los primeros que llegan son, por ejemplo, la contratación de maquinaria, donde lo más probable es que sean empresas locales y establecidas. Se va a tratar de un efecto, en términos proporcionales, unas cinco veces más grande que lo que fue Carmen de Andacollo, que costó cerca de US$ 50 millones, en cambio en Dominga se habla de una inversión cinco veces mayor. La magnitud del proyecto es gigantesca y va a ir aumentado localmente por el empleo directo e indirecto. Hay que tener en cuenta que en un minuto se tendrán 5 mil personas trabajando para Dominga e indirectamente se necesitarán alojamientos, comida, traslado y entretención, solo por nombrar algunas actividades que se desarrollarán en torno a Dominga. Por lo tanto, el impacto es positivo primero para La Higuera, y luego para la región completa”.

- Hay muchas expectativas en torno a la generación de empleo que va a traer Dominga, en su etapa de construcción y luego de operación, ¿cómo ven esta situación en Corminco?

“Es cierto que hay una expectativa gigantesca en torno a este proyecto, que tiene que ver con la generación de empleo. Si bien no nos cabe duda que así será, sí hay que tener claridad de que la contratación será de acuerdo a la oferta competitiva con el que cuentan las comunidades, pero que también se traerá planta de afuera. Este es un hecho que si no se acepta, generará expectativas que no se van a cumplir. Entendemos que la compañía comenzó un trabajo hace tiempo atrás para ver la oferta que tiene la comunidad de La Higuera, entendiendo como oferta, quienes tienen una profesión, un oficio. Luego de eso, lo cruza con las necesidades de construcción que tiene la compañía para comenzar con un proceso de evaluación de competencias laborales para después realizar un proceso de capacitación. La firma ha dicho públicamente que tendrá una predisposición positiva a la contratación de la mano de obra local, y no tenemos ninguna duda de que lo va a cumplir, pero hay personas que por diferentes razones, no van a poder trabajar en la empresa, por lo tanto es necesario manejar las posibilidades”.

- Dominga no solo involucra al sector de La Higuera, sino que también a la región y al país entero. Hay incluso rostros de televisión que se oponen al proyecto, ¿cuál es su visión al respecto?

“Generalmente las personas que no están en el territorio donde se llevará un proyecto de estas características, no conocen realmente los alcances y hay mucha desinformación al respecto. Los que trabajamos en la minería somos personas también, y a muy pocos no les interesa el tema medioambiental. Yo también tengo hijos y quiero dejarles un buen entorno. Sin embargo, es cierto también que hay comunidades que después de años de cultura minera, han quedado disconformes con el saldo de la minería, ya que abruptamente se termina la actividad económica. Sin embargo, de un tiempo a esta parte se ha ido aprendiendo de eso y generando soluciones para dichos efectos. Por ejemplo, recién hace sólo unos años atrás, la seguridad en la minería se instaló en la ley, después de un accidente de proporciones. Y hoy, el sector minero es el que tiene la tasa más baja en accidentabilidad de cualquier industria. Después se instaló el tema ambiental, ya que la minería votaba sus relaves, por ejemplo, en el sector de Salvador y estos llegaban a la playa, algo impensable hoy en día. Gracias a eso, hoy tenemos una institucionalidad que está siendo más robusta y exigente. Actualmente, por otro lado, se ha instalado el tema de las comunidades, que hoy son parte del negocio de una minera. Tanto así, que no se puede practicar la minería sin tener una relación con el entorno inmediato. Con todo, hoy las compañías mineras están planteando que el día que se termine la faena y se retiren del sector, deben haber generado aprendizajes para que el efecto de las localidades cercanas sea el mínimo posible. Es decir, hoy se generan competencias, se desarrollan proveedores, tanto para la propia compañía, pero también para otras industrias. Les da conocimiento para generar encadenamientos productivos para que las personas y empresas del lugar no dependan solo de la compañía y puedan seguir con su actividad económica, en otros sectores”.

- ¿Qué esperan de la votación del jueves?

“Confiamos en que las autoridades han realizado un estudio exhaustivo en torno a Dominga de acuerdo a lo que la ley exige que se haga y los mismos servicios públicos competentes han propuesto que este proyecto sea aprobado. No tenemos ninguna duda de será aprobado. Eso sí, esperamos luego de esta aprobación poder instalar una mesa de conversación con los grupos contrarios a la minera, para buscar cuáles son las mejores formas para mitigar el punto de vista que ellos tienen, y poder ir resolviéndolos. Eso sólo se logra con una compañía que se involucra con su comunidad”. 6201