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Se instalarán en los asentamientos costeros artesanales de El Apolillado, Talquilla, Totoralillo Centro, Huentelauquén y Puerto Oscuro. Proyectos que se sumarán a las ya construidas o inauguradas en Talcaruca, Maitencillo, Totoralillo Norte y Chigualoco.

Por Ricardo Gálvez.

En momentos en que la escasez hídrica afecta a Chile y especialmente a la Región de Coquimbo,  diversas son las iniciativas que se están implementando para hacerle frente. 

En este sentido, las plantas desaladoras se presentan como una de las más importantes, debido a que entregan un suministro de agua potable seguro y eficiente. 

Es así como la administración del presidente Sebastián Piñera, se encuentra ejecutando un plan que considera la construcción de estas instalaciones. 

Programa que ya edificó o inauguró cuatro desalinizadoras a nivel local. Las que se encuentran en las caletas de Talcaruca, Maitencillo, Totoralillo Norte y Chigualoco.

Esta última estrenada en septiembre pasado, la que implicó una inversión pública de 50 millones de pesos y que tendrá un funcionamiento amigable con el Medio Ambiente, debido a que operará con energía proveniente de paneles solares.

“Esta planta nos cambia la vida y nos abre muchas puertas, porque antes necesitábamos camiones aljibe para obtener agua. Ahora, en cambio, tendremos agua para poder trabajar. Más adelante queremos instalar pérgolas y un restorán. Estamos muy contentos con este proyecto, sobre todo, por el contexto de sequía que enfrenta el país”, manifestó en la oportunidad uno de los habitantes del sector, Roberto Collao. 

Una de las zonas con más instalaciones de este tipo

Sin embargo, estas no serán las únicas desaladoras construidas en el contexto del plan, ya que cuatro más se entregarán a pescadores de las caletas de El Apolillado, Talquilla, Totoralillo Centro, Huentelauquén y Puerto Oscuro. 

De este modo, los desarrollos beneficiarán directamente a las provincias de Elqui, Limarí y Choapa.

Lo que posiciona a la Región de Coquimbo como una de las áreas del país, con mayor cantidad de instalaciones de este tipo en asentamientos costeros artesanales.

Al respecto, el director de Pesca y Acuicultura de las regiones de Atacama y Coquimbo, Juan Carlos Fritis, señaló que estas desalinizadoras son un proyecto que surge desde la Subsecretaría de Pesca (Subpesca) y que son ejecutados por el Indespa, órgano dependiente del Ministerio de Economía, Fomento y Turismo.  

Agregó que “esto beneficia principalmente a las caletas rurales, las que tienen pocas posibilidades de generar o de que llegue el agua potable a sus localidades. Por ejemplo, Talcaruca debe quedar a una hora hacia la costa desde la Ruta 5 Norte y a eso hay que sumarle el estado del camino”.

Las plantas serán levantadas en enclaves apartados y que exhiben carencias del vital recurso. De hecho, estos asentamientos dependen hoy de camiones aljibe para acceder al agua potable.

En conjunto, las instalaciones entregarán un total de 30 mil litros diarios de agua potable a sus beneficiarios e implicarán una inversión pública de aproximadamente 400 millones de pesos. 

“Tenemos un problema hídrico regional que es transversal. Entonces, una búsqueda de esa matriz hídrica es generar estas plantas en las caletas de pescadores, las cuales los apoyan para poder generar actividades productivas y además, les entregan agua potable”, finalizó Fritis. 

 

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