Autoridad cuestiona a empresa a cargo de la seguridad en clásico regional

Momentos de tensión son los que se vivieron sobre la parte final del primer tiempo del clásico regional disputado el más reciente domingo en el estadio La Portada, entre Deportes La Serena y Coquimbo Unido.

Esto, luego que a partir de la provocación de un hincha granate, un grupo de simpatizantes del conjunto pirata salieron desde el sector de Galería Norte, en su bandeja superior, hacia la zona de tribuna Andes donde se ubicaban adeptos en su mayoría del  conjunto local.

En ese contexto, el gobernador Provincial de Elqui, Américo Giovine, indicó que la empresa responsable de la seguridad del espectáculo no habría tomado todas las precauciones y por ende no chequearon un candado de una puerta que divide a la barra de Coquimbo Unido con el público general donde estaban familias, adultos mayores, niños e hinchas principalmente de Club Deportes La Serena.

“Se descarta que hubiera enfrentamiento entre las barras como lo señalaron algunos medios, aquí hubo un error de los responsables de las puertas y los hinchas de Coquimbo ingresaron". Américo Giovine, gobernador provincial de Elqui

“Se descarta que hubiera enfrentamiento entre las barras como lo señalaron algunos medios, aquí hubo un error de los responsables de las puertas y los hinchas de Coquimbo ingresaron. En la generalidad y salvo estas dos situaciones que serán sancionadas severamente, el partido y el público en general fue impecable”, afirmó la autoridad.

Otra de las principales quejas emanadas desde la Gobernación de Elqui, una vez finalizado el encuentro, es que se sorprendió a un trabajador de una contratista de Coquimbo Unido entregando petardos al interior del estadio, elementos que no estaban permitidos.

En ese contexto, Giovine agregó que “ante esta situación tomaremos todas las medidas pertinentes y más grave si se trata de personal contratista de los validadores de identidad. Ante ello no podrán seguir prestando servicios en el fútbol profesional, porque una persona con mochila llevaba todos los elementos prohibidos, aprovechándose de la situación por trabajar en uno de los clubes”.

DESDE EL MUNICIPIO

El administrador municipal del estadio La Portada, Nelson Torres, en conversación con El Día, puso en orden las responsabilidades que le competen a la entidad a raíz de los hechos registrados el domingo en el clásico regional.

Respecto de si ellos asumen algún grado de “culpa” por lo sucedido cuando los forofos porteños se dirigieron hacia la tribuna donde mayoritariamente se ubicaron familias, menores y adultos mayores seguidores del conjunto serenense, ellos respondieron claramente.

“Si hubo algún problema producto de la situación de un candado, ese es resorte de la empresa de seguridad. Esto debido a que nosotros como estadio entregamos tres horas antes del evento las llaves de todas las puertas y no hubo ningún reporte hacia nosotros que una llave no estaba", afirmó.

Respecto de la situación de los petardos, Torres afirmó que “esto es responsabilidad de las personas que se encuentran a cargo del control de ingreso al estadio. Lo que si, nosotros nos preocupamos de que en días anteriores no ingrese nadie al recinto. Además, carabineros realizó una revisión previa al encuentro, pero como administración no tenemos injerencia en el ingreso de personal. Esto lo debe ver el club organizador y la empresa de guardias”, indicó.

Con respecto de los daños a una gran cantidad de butacas (51) en el sector de la galería norte que da hacia Amunátegui, Torres aseguró que “en este caso, el estadio le informa de esta situación al club organizador de los destrozos que hay, y por esto es que se le solicita una garantía. Coquimbo Unido también debe hacerse cargo de lo hecho por sus hinchas, en forma voluntaria o por medio de la ANFP. Por lo general, ambos clubes llegan a acuerdos sin tener necesidad de darle uso a la garantía”, concluyó. 3801i

"Hubo una lamentable y desafortunada falla de la seguridad privada, sumándose una no muy criteriosa distribución de los guardias de seguridad", Gianni Barnato, mayor de Carabineros