• En el sector de El Portal de Ovalle tuvo lugar la tarde del miércoles lo que en un principio se pensó que era un secuestro. Foto: Leo Pizarro
La PDI no descarta que existan vínculos entre las organizaciones delictuales, o que, derechamente, se trate del mismo grupo. Por lo pronto, llaman a no caer en los engaños y a contactarse con la policía ante cualquier indicio sospechoso.

Miércoles por la tarde y una familia de la población El Portal, en Ovalle, viviría horas de terror. Claro un grupo de sujetos desde diferentes lugares les hizo creer que sus hijos se encontraban secuestrados, en lo que fue un urdido plan, el cual finalmente sólo se trató del “Cuento del Tío”.

Todo comenzó alrededor de las 16:00 horas cuando los dueños de casa se encontraban en el trabajando. En ese momento, la asesora del hogar quien estaba en el lugar junto a los hijos de la pareja, dos menores de seis y trece años de edad, recibió un llamado al teléfono fijo del domicilio donde le indicaban que los padres de los niños habían sufrido un grave accidente, por lo cual era urgente que depositara la suma de 500 mil pesos.

La trabajadora no supo qué hacer, se puso extremadamente nerviosa y terminó por hacer caso a los antisociales, quienes aprovecharon la exaltación de la mujer. “Le dijeron que buscara en el closet, ella dio vuelta todo buscando, y no encontró nada. Sin embargo ante la desesperación sacó de su propio dinero para traspasarlo a las personas que supuestamente estaban cuidado a la pareja y que requerían el dineros para eventuales gastos médicos”, indicó el comisario Raúl Muñoz, jefe de le Brigada Investigación Criminal de Ovalle.

Cometió un error. Claro, dejó solos a los pequeños y fue allí, cuando en una coordinación que sorprende, los sujetos llamaron nuevamente al domicilio y lograron engañar al más pequeño de los hermanos, el cual contestó el teléfono y entregó información privilegiada a los individuos. Además, los delincuentes le dijeron que debían dirigirse al Mall Open Plaza Ovalle, a lo que no opusieron ninguna objeción.

Aquí llegó el momento clave. Y es que estaba todo fríamente calculado, y cuando la casa estaba vacía debido a la salida de los menores, los estafadores llamaron a los padres y dueños de casa afectados, para decirles que mantenían secuestrados a sus hijos y también a la asesora del hogar y que debían depositar, por lo pronto, la suma de 250 mil pesos.

Ellos accedieron debido a que se dieron cuenta de que los sujetos manejaban información que sólo podrían haber obtenido de los menores. Sin embargo, no dejaron de hacer la denuncia a la policía la que inmediatamente se trasladó a investigar y luego de diversas diligencias, ubicaron tanto a los niños como al trabajador.

Un hecho preocupante

Pese a que no se trataba de un secuestro, el hecho resultó preocupante, ya que es el segundo de esta naturaleza que se produce en la zona en 15 días.

Y es que el primero de marzo la exconcejala por La Serena Margarita Riveros vivió una situación de la misma índole, cuando un grupo de individuos la llamaron para decirle que su hijo había sido víctima de un secuestro por lo cual debía depositarles una suma de dinero. Paralelamente, los delincuentes también se contactaron con el joven a quien engañaron logrando que les entregara un monto a través de una cuenta bancaria.

Consultado al  respecto, el comisario Raúl Muñoz, quien además es experto en el manejo de secuestros, admitió que no es común tener este tipo de ilícitos de manera tan seguida, pero que tiene relación con las nuevas estrategias que han creado los antisociales.

“Estamos en presencia de un delito de estafa que es relativamente nuevo, y tiene que ver con utilizar las tecnologías para lograr conseguir el dinero. La variante en este tipo de casos es que los delincuentes juegan con el impacto emocional que pueden provocar en las víctimas el secuestro de un ser querido, por lo que los primeros minutos son fundamentales para obtener información por parte de los afectados y posteriormente las dos primeras horas para conseguir que les traspasen dinero sin que en ningún momento pudiese haber un contacto físico con las víctimas”, indicó Muñoz.

Enfatizó en lo expertos que son los individuos que se dedican a realizar estas estafas. “Hay una coordinación que es muy elaborada. En este último caso incluso, se ha establecido que los llamados a las víctimas se hicieron al menos desde dos regiones del país, y cada momento estaba fríamente calculado”, precisó.

En relación a si esta última banda podría estar vinculada a la que le realizó “El Cuento del Tío”, a la exconcejala Margarita Riveros, el comisario Raúl Muñoz no lo descartó. “Son formas de operar que tienen coincidencias y no se puede descartar que hayan nexos. Eso es algo que hasta ahora estamos investigando y que puede ser factible”, manifestó Muñoz.

Cuidar los datos personales

El jefe de la Prefectura Elqui de la PDI, Abel Lizama, también admitió que el delito de los denominados secuestros virtuales, se han incrementado y, por lo mimo, insistió que el mantener nuestros datos personales resguardados y no publicar todo lo que hacemos en nuestras redes sociales es algo fundamental. “Como ya lo hemos conversado en otras oportunidades, hay gente que está al pendiente del computador y de ciertas personas que pueden ser potenciales víctimas. Si bien es cierto que los llamados son aleatorios, ya hay un estudio previo de las personas que pueden caer en este juego. De manera que el llamado es a estar alerta, y en caso de que alguien desconocido pida dinero por teléfono jamás entregarlo y, también llamar de inmediato a la policía ante cualquier sospecha”, sostuvo.

Claves

  • Información

No entregue información personal y familiar a personas que no conoce o que no le consta su procedencia.

  • Llamar a policía

Comuníquese a la brevedad con la PDI al nivel 134, ante llamados telefónicos que exijan dinero por cualquier concepto.

  • Tomar nota

Tome nota de los teléfonos desde donde llaman y trate de verificarlos de si corresponden a instituciones establecidas.

  • Nadie exige dinero

Debe saber que en ningún caso los miembros de instituciones policiales, judiciales y/o estatales le exigirán el pago de dinero por multas, accidentes, fianzas o cualquier otro concepto a través de llamados telefónicos.

  • Códigos

Establezca códigos familiares (palabras claves) que solo conozcan los miembros de su familia (fechas claves, lugares claves, episodios claves) que sean identificables al momento de que se generen llamados telefónicos poco habituales.

 

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