Denuncian fiestas clandestinas y poca fiscalización en Las Compañías

Vecinos del sector de Las Compañías acudieron a nuestro medio para denunciar la reiteración de fiestas clandestinas que tienen lugar en pasajes de calle Panamá con Argentina. 

Los residentes dicen que ya se han superado todos los niveles aceptables de convivencia y que los organizadores de estos encuentros incluso han agredido a quienes los denuncian, por lo que sienten miedo de lo que pueda suceder.

Los dardos de los ciudadanos apuntan a una familia colombiana, que según aseveran, no tienen ningún respeto por las medidas sanitarias del coronavirus. 

Para colmo de males, se sienten abandonados tanto por la policía como por la autoridad sanitaria, puesto que sostienen que han llamado reiteradamente al Plan Cuadrante cuando se producen estas fiestas, sin soluciones efectivas. 

Referente a la Seremi de Salud, precisan que se han comunicado al fono denuncia, incluso han hablado por Whatsapp con quienes atienden, pero la respuesta ha sido siempre la misma: que llamen a Carabineros. 

El presidente de la organización social, Sergio Villalobos, cuenta que “han ocurrido varios hechos que son reiterativos respecto a unos vecinos que son colombianos y que llegaron hace dos años. Hace como un año y medio que comenzaron a hacer fiestas. Se junta mucha gente, ente 20 y 30 personas los fines de semana, entran trago y tienen una sala de juegos donde apuestan plata. Ha habido tres peleas entre ellos”.

Habitantes del lugar lamentan que la policía no los toma en cuenta e indican que en una ocasión comenzaron a llamar al Plan Cuadrante a las 18:00 de la tarde y recién fueron atendidos a las 02:00 horas. “Estuvieron cinco minutos, hablaron con ellos y se fueron. No sabemos cómo se enteraron quién era el vecino que llamó y lo golpearon a él y a su esposa, los dos son adultos mayores, por eso la gente tiene miedo de denunciar”.

Hechas las consultas a la Seremi de Salud, Roberto Villalobos, jefe del Departamento de Acción Sanitaria, se limitó a explicar que “las llamadas son recibidas por nuestro turno nocturno, el cual atiende el teléfono de denuncias por fiestas clandestinas y hace un registro de la llamada recibida, además de una revisión de los antecedentes aportados por la comunidad. En consecuencia, las que corresponden efectivamente a una fiesta clandestina, se hace un contacto con la jefatura de Defensa Nacional, quien realiza la coordinación con las Fuerzas de Orden y Seguridad para la verificación de lo denunciado por los vecinos”.

Los residentes insisten que es inexplicable que el Gobierno haya habilitado un teléfono para denunciar fiestas clandestinas y que una vez que reciben los antecedentes se limiten a llamar a Carabineros.

“Esto ya se ha salido de todo límite, no se respeta el toque de queda ni el número de personas que puede reunirse en una casa y más encima, cuando viene Carabineros habla un rato con ellos y se retiran. Eso cuando vienen”, alega una de las residentes del lugar, quien no se identifica por temor a represalias.

Piden que fiscalicen a estos ciudadanos colombianos para saber si están con sus papeles al día, o bien, para que no hagan más fiestas que incomoden a todo el vecindario, porque sienten que  no son escuchados y están inseguros hasta en sus casas.