Justicia dicta inocencia de acusado de abuso sexual

“¡Por fin se hizo justicia!”, gritaban ayer en medio de los abrazos y llantos de emoción los familiares y amigos de Pablo Alegre (37), después de conocer la deliberación de los jueces en el Tribunal Oral de La Serena. Porque tras un largo juicio oral, cerca de las 09:00 horas se dio a conocer en la tercera sala la decisión de absolverlo de los cargos que se le imputaban y devolverle la ansiada libertad, que no tenía desde junio del año pasado.

Cabe recordar que este contador auditor, exfuncionario de Conaf, en el 2012 hizo noticia por una grave acusación que realizó su propia pareja. El profesional fue detenido por efectivos de la PDI, por el supuesto abuso sexual contra su hija de 2 años y la violación de su hijo de 6 en su departamento en la capital regional. En aquella oportunidad quedó en prisión preventiva, pese a que sus parientes en todo momento alegaron inocencia.
De hecho, en febrero de este año, a raíz del famoso caso del rostro de televisión Pablo Mackenna, la madre de este imputado, Patricia Franco, dijo que acá también hubo una acusación de una mujer que inventó todos estos cargos, obligando además al mayor de los niños a declarar contra el padre. La progenitora de Pablo Alegre igual contó que la denunciante tenía problemas psiquiátricos y que “en Arica realizó la misma acusación en contra de mi papá y luego a su propio padre”.
Por lo mismo, lo que ocurrió ayer en el Tribunal Oral de La Serena también se podría comparar con el caso que mantuvo atento a todo el país en septiembre de este año. Ello porque en Santiago, tras un mes de un juicio oral que se realizó por tercera vez, el Cuarto Tribunal Oral en lo Penal determinó que el suspendido gerente del Banco Central, Enrique Orellana, era inocente del delito de violación y abuso sexual en contra de sus tres hijas, cuando éstas tenían 3, 4 y 9 años. Fue así como quedó por el suelo la imagen de su exmujer que lo estaba acusando.
Respecto a la historia que tuvo como escenario la Región de Coquimbo, en el mes de abril, la fiscala Carolina Caballero y el abogado querellante, Jorge Lafourcade, expusieron testimonios apoyando las acusaciones de la denunciante y otros peritajes médicos, donde se apreciaba, según ellos, que “las lesiones son patentes”. Pero después de extensos alegatos, el juez de Garantía decidió dejar sin efecto la medida de prisión preventiva, dando como razón la “falta de contundencia de los informes periciales”.
La abogada defensora, Fabiola García, explicó que médicamente “no se vio ningún rasgo de abuso en los niños” y que incluso un perito demostró que la pequeña “era virgen”. Asimismo, argumentó que los menores fueron inducidos por la madre a declarar contra el hombre. Otro dato relevante fue el pasado de la mujer denunciante, que también habría sido víctima de situaciones de abusos. Ante ello, el mismo imputado dijo en su declaración en el Juzgado de Garantía de La Serena que “mi señora ve abusos sexuales por todos lados”.
Esa vez, la madre del acusado no podía disimular su alegría a la salida de la tercera sala del tribunal.“Creo que esto es justo, porque mi hijo siempre pidió objetividad en la investigación. Estaba confiado en que dentro de pocos meses se iba a saber la verdad”, indicó. En tanto, en aquella jornada, la fiscala Carolina Caballero se retiró bastante molesta y dijo que “de este tribunal no podía esperar menos”, anunciando que al día siguiente se concretaría el recurso de apelación para revocar lo decidido.
Posteriormente, tal como lo pretendía el Ministerio Público, la primera sala de la Corte de Apelaciones de La Serena, integrada por los ministros Raúl Beltrami, Humberto Mondaca y el abogado integrante Mario Carvallo, revocó la decisión del juez de garantía, Juan Carlos Orellana. El imputado siguió en la cárcel y la pesadilla parecía no terminar nunca. De esa forma, se llegó a la fecha del juicio oral, donde declararon no sólo los menores, sino también médicos y peritos, entre otros testigos que superaron la veintena.
Hasta que llegó el día esperada. Ante una sala casi repleta, el juez redactor Juan Carlos Espinoza argumentó ayer que las pruebas contra el contador auditor carecían de consistencia, señalando que los relatos de los niños no eran confiables y que jamás existió una prueba precisa contra el exfuncionario de Conaf. Por lo mismo, quedaba absuelto y se le debía dejar libre, lo que se concretó en la tarde desde la cárcel de Huachalalume.
Su madre, Patricia Franco, se desahogó a la salida del Tribunal Oral. “No habíamos tenido la misma suerte anteriormente. Pero hoy día quedó de manifiesto que todo esto fue una acusación infundada de una persona enferma. Y Dios quiera que esto sea el comienzo para que otras personas no pasen por lo que mi hijo ha atravesado”, señaló. Junto con ello, criticó al Ministerio Público porque según ella estuvieron “cegados” tratando de demostrar algo que no era así, exponiendo igual a los niños a este tipo de hechos, que los deja muy mal psicológicamente.
En tanto, la abogada defensora, Fabiola García, sostuvo que lo ocurrido en tribunales “es el reconocimiento a la prevalecencia de la justicia. Porque lamentablemente en esta causa, desde hace bastante tiempo que el Ministerio Público contaba con antecedentes suficientes para desestimarla”. Según ella, “desde enero o diciembre del año pasado, la Fiscalía podía darse cuenta de que esto no era un relato espontáneo de los niños, sino que había sido producto de un relato inoculado por parte de una madre, que claramente padece de ciertos problemas de orden mental, que resultaron acreditados en el juicio”. Según ella, desde el principio “hubo falta de objetividad” y ahora por fin “culmina un calvario”. El fallo se leerá el 26 de este mes.
Eduardo Rodríguez, director regional de Conaf, dijo respecto a Pablo Alegre que “estamos muy contentos por él”, reconociendo que “tuvo que atravesar por una prueba bastante dura”. Es probable que, previo avenimiento de las partes, se pueda contar con sus servicios otra vez. 

Cronología

26 de junio de 2012
Se hace pública la detención del imputado por parte de la PDI. Quedó en prisión preventiva.

11 de febrero de 2013
A través de los medios, la familia defiende la inocencia del imputado.

24 de abril de 2013
En una audiencia se decreta su libertad, pero luego eso lo revoca la Corte de Apelaciones.