• En el campamento del sector de Las Compañías habitan unas 100 familias según catastro de la Fundación Techo.
  • ZONA DE DEBATE 1: Erick Vergara, director regional de Techo: “Aquí hay grandes problemas sociales de fondo, en los que el Estado debe comprometerse todavía más. Se ha ido avanzando y nosotros estamos trabajando”.
  • ZONA DE DEBATE 2: Aníbal Flores, habitante de campamento: “Para el consumo generalmente es de lo que nos entregan, porque es más seguro, pero para lavar la ropa y cosas así, ocupamos del canal”.
  • ZONA DE DEBATE 3: Diego Núñez: “Nosotros hicimos el levantamiento de la información con las personas que están en este lugar y nos encontramos con la sorpresa de que muchas de las personas que están ahí, el 50%, tienen una segunda vivienda”.
Crédito fotografía: 
Lautaro Carmona
Así lo manifestó el Seremi de Bienes Nacionales, Diego Núñez, quien precisó que se había realizado un catastro y se comprobó que no todas las personas que habitan en el campamento Desierto Florido-Añañucas lo hacen por necesidad.

Hace años que los campamentos en Chile son una realidad y la Región de Coquimbo no es la excepción. De hecho, según cifras de la fundación Techo, hasta fines del 2016 había 22 “tomas” en las que habitaban 745 familias.

Una cifra preocupante. Claro, la gran mayoría de quienes llegan a estos lugares lo hacen en busca de un sitio donde poder vivir mientras consiguen soluciones habitacionales, tal como lo manifiesta el director regional de Techo, Erick Vergara, quien precisó que, pese a que las cifras han ido disminuyendo, el tema de la vivienda en Chile sigue siendo una deuda pendiente. “Aquí hay grandes problemas sociales de fondo, en los que el estado debe comprometerse todavía más. Se ha ido avanzando y nosotros estamos trabajando para ir mejorando la calidad de vida de estas personas y obteniendo viviendas sociales, pero no es suficiente”, manifiesta.

DESIERTO FLORIDO Y AÑAÑUCAS. En la capital regional el campamento más grande es el que está ubicado en el sector de Las Compañías, justo detrás del cementerio municipal. En este lugar habitan cerca de 400 personas distribuidas en unas 100 familias, las que han ido ocupando el terreno paulatinamente desde hace unos 8 años.

Según lo que pudo constatar diario El Día en el lugar, la mayoría proviene de otras zonas del país, y han llegado a la ciudad en busca de un futuro mejor, pero no han tenido suerte terminando literalmente en la calle. Sin embargo, han constituido un campamento apto para vivir.

Y es que pese a que no cuentan con los servicios básicos, hay quienes cuentan con generadores con los que producen energía eléctrica durante algunas horas al día.

En relación al agua, los habitantes reciben ayuda, y lo que falta lo suplen con lo que hay en canales cercanos, tomando las debidas precauciones, como el hervido del líquido. “Lo que es para el consumo generalmente es de lo que nos entregan, porque es más seguro, pero para lavar la ropa y cosas así, ocupamos del canal, porque igual estamos restringidos”, indica el habitante de la toma, Aníbal Flores, padre de familia quien está inscrito en un comité de vivienda.

LA MALA PRÁCTICA. Pero así como hay familias que están ahí porque realmente no tienen otro lugar, hay otros que se aprovechan de la situación y teniendo una vivienda se instalan en el lugar para obtener una segunda casa en terrenos que son del Estado.

En ese sentido, el seremi de Bienes Nacionales de la Región de Coquimbo, Diego Núñez, manifestó que, “nosotros hicimos el levantamiento de la información con las personas que están en este lugar y nos encontramos con la sorpresa de que muchas de las personas que están ahí, el 50%, tienen una segunda vivienda, por eso es complicado que el Serviu les otorgue una solución habitacional. Entonces acá estamos hablando de un grupo de personas que no tienen una necesidad, sino que llegaron y ocuparon ilegalmente ese propiedad fiscal”, indicó el seremi.

Y esta línea, según aclara Diego Núñez, lo que les corresponde es “perseguir todas las responsabilidades que esas personas han cometido y por eso lo que corresponde es oficiar al consejo de Defensa del Estado, que nos representa y ver las líneas de acción a seguir”, agregó. 4601i

La cifra: 745 familias de la Región de Coquimbo viven en campamentos ilegales.

 

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