• Quienes venden verduras en el centro de La Serena, recorren las calles con sus productos en carros de supermercados, pero esa realidad podría terminarse muy pronto si se cierra un acuerdo para que se instalen en un sitio que podría ser arrendado a un empresario.
    Quienes venden verduras en el centro de La Serena, recorren las calles con sus productos en carros de supermercados, pero esa realidad podría terminarse muy pronto si se cierra un acuerdo para que se instalen en un sitio que podría ser arrendado a un empresario.
  • Susana Luck y María José Jiménez anticipan que el municipio ya tendría casi confirmado el sitio en donde se instalarán de manera definitiva. Ambas son jefas de hogar y mantienen a su grupo familiar.
    Susana Luck y María José Jiménez anticipan que el municipio ya tendría casi confirmado el sitio en donde se instalarán de manera definitiva. Ambas son jefas de hogar y mantienen a su grupo familiar.
Crédito fotografía: 
Lautaro Carmona
Edil de La Serena reconoce que se está iniciando un trabajo para poder erradicarlos definitivamente de las calles para lo que se barajan algunas alternativas, incluyendo la búsqueda de un terreno, pero indica que solucionar el problema de copamiento de las calles de la ciudad por informales es un tema de largo aliento y hay un número importante de informales que tendrán que salir sí o sí.

El alcalde de La Serena, Roberto Jacob, reconoció que están trabajando de manera coordinada con las vendedoras ambulantes de frutas y verduras, con el objeto de buscar una solución definitiva para ellas y permitir que se establezcan y ya no anden deambulando por las calles de la ciudad.

Según el edil, el tema de los vendedores ambulantes es complicado y se debe ir por parte, ya que nadie puede decir que los va a erradicar completamente, porque sería una mentira.

“Nosotros estamos buscando algunos espacios, sobre todo para las que venden verduras, estamos implementando algo que muy luego lo van a conocer, donde vamos a ir ofreciéndoles espacios a algunas personas que tengan interés en formalizarse y que sean de la ciudad, que no sean de otra parte, porque aquí tenemos mucho santiaguino, de Valparaíso, de Coquimbo y para eso ya estamos haciendo un catastro de los que están con permiso, los que no tienen permiso, los que tienen interés de formalizarse. Aquí hay que hacer todo un trabajo que no es a corto plazo, pero sí vamos a tener soluciones”, señaló.

Referente a las vendedoras de verduras Roberto Jacob sostiene que se está viendo un espacio que estaría dentro del casco histórico.

Roberto Jacob sostiene que esta es una parte de los ambulantes informales, pero que muchos otros tendrán que salir, especialmente quienes vienen de fuera de la comuna.

Proyecto presentado

María José Jiménez, es una de las vendedoras de verduras que se instala en las calles de la ciudad parta vender sus productos, lleva 18 años como vendedora ambulante, es madre soltera y dice que ella y sus hijos viven de lo que vende en la calle.

Referente a buscar una solución, sostiene que  “nosotros presentamos un proyecto a la municipalidad de La Serena, pero no habíamos sido escuchadas, íbamos todos los días a la municipalidad, porque necesitábamos permiso, hasta llorábamos de rabia porque no había solución para nosotros. Entonces presentamos un proyecto para instalarnos en un sitio pero no fue posible ahí, pero ahora hay otro terreno, frente al Hotel Casablanca y con el apoyo de la municipalidad nos vamos a instalar ahí, se llamará El Mercadito”, afirma convencida de que esto se materializará.

Plantean que el alcalde ya habría hablado con el dueño del terreno y las conversaciones estarían bastante avanzadas, por lo que creen que ahí encontrarán una solución a sus problemas de tener que andar huyendo de Carabineros y de los inspectores municipales.

Señala que en un comienzo el municipio las ayudará con el arriendo, pero posteriormente serán ellas las que se hagan cargo. Y aunque partirán de cero, indican que están dispuestas a instalarse en ese espacio y que, por ahora, pedirán apoyo a privados e incluso a los concejales para poder conseguir los toldos que necesitarán en un comienzo. “Somos mujeres de esfuerzo y somos todas mamás y vamos a necesitar que nos cooperen. Somos 14 mujeres y un hombre que tiene una discapacidad visual”.

La vendedora ambulante plantea que si todo se concreta, harán un acto simbólico y devolverán los carros de supermercado que han utilizado por años para recorrer las calles de La Serena vendiendo sus frutas y verduras.

Indica que en este proceso tiene que agradecer a varias personas que les han ayudado, como a los profesionales del Programa Abriendo Camino, la alcaldía, un abogado del municipio, entre otros.

"Somos mujeres de esfuerzo y somos todas mamás y vamos a necesitar que nos cooperen. Somos 14 mujeres y un hombre que tiene una discapacidad visual”. María José Jiménez, vendedora ambulante.

Susana Luck Rivera, es otra de las vendedoras de verduras y plantea que tras reunirse con el alcalde de La Serena, éste les ha manifestado su disposición para ayudarles. “Queremos agradecerle todas las gestiones que está haciendo, queremos que la comunidad sepa que el municipio y el alcalde nos está escuchando, nos están apoyando y están dándonos soluciones”.

Inspectores municipales

La última medida que ha tomado el municipio serenense ha sido contratar 15 inspectores municipales dedicados exclusivamente al control de los comerciantes ambulantes informales.

Sobre estas personas, cuyo trabajo ha sido bien evaluado en los primeros días, el jefe del Departamento de Seguridad Municipal, Gonzalo Arceu, dijo que fueron elegidos con un perfil determinado que buscaba el municipio para realizar este trabajo.

Muchos de ellos, por ejemplo, tienen el curso S-10, aunque ese no era un requisito obligatorio. “porque no son guardias, son inspectores y fueron elegidos por un perfil que nosotros estructuramos de manera que tuvieran las condiciones para poder realizar su trabajo, donde deben tener capacidad de disuación y también de diálogo”, señala Gonzalo Arceu.

El profesional sostiene, además, que  no ha habido ningún  problema de enfrentamiento o dificultad con los ambulantes, ya que se les ha solicitado que privilegien el diálogo y el buen trato, porque lo que se quiere evitar es precisamente que haya ese tipo de situaciones. “No queremos llegar al conflicto, porque si le sumamos la contingencia que está pasando y le sumamos un nuevo conflicto, puede ser perjudicial incluso para los que están establecidos”, dice Arceu.

 

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