Comunidad inmigrante asumió con entereza sismo en la región

Si eres chileno y sientes un sismo generalmente sabrás qué hacer, a diferencia de las personas extranjeras, sobre todo las que provienen de lugares donde este tipo de movimientos no son tan frecuentes.

Los relatos de inmigrantes que sintieron el temblor de 6.7 grados en la escala de Ritcher con epicentro en Tongoy, son impresionantes. Muchos salieron corriendo y siguieron las indicaciones de evacuación, pero a la vez se asustaron cuando hubo un corte generalizado del suministro eléctrico y al escuchar las alarmas que advertían del posible riesgo de tsunami.

“El sábado estaba súper lleno y de repente escuchamos un sonido espantoso. Todos quedamos muy asustados esperando a que se detuviera el movimiento, pero esta vez no fue así", Alejandra Rojas, ciudadana colombiana

“Yo estoy en casa de unos compañeros que se ubica como a 12 minutos de playa, ya nos alistábamos para ir a dormir cuando empezó la actividad sísmica. Nunca había estado en presencia de un evento como este y por eso estuve alerta a la información a través de los teléfonos. Yo en particular tengo una aplicación que indica cuándo hay sismos y decidimos salir hacia la zona de evacuación”, contó Gabriela Corzo, médico venezolana, quien cumplió dos meses viviendo en la ciudad.

Gabriela Rojas, tiene dos meses viviendo

en La Serena

Comentó que hasta el momento no había recibido ninguna información sobre cómo actuar ante este tio de eventos, y le parece que Chile podría seguir los pasos de Japón, donde tienen un canal con 24 horas de información sobre sismos, tomando en cuenta que es un país con gran riesgo.

“Me asusté y tuve que salir junto a mi pareja corriendo. Después cuando pasó todo volví a la casa", Medarline Valcius, ciudadana haitiana

Alejandra Rojas, ciudadana colombiana que trabaja en un módulo de jugos naturales al borde la playa, relató el desconcierto que se generó en la Avenida del Mar.

“El sábado estaba súper lleno y de repente escuchamos un sonido espantoso. Todos quedamos muy asustados esperando a que se detuviera el movimiento, pero esta vez no fue así y ahí se desató un caos total en este sector, cercano al casino. Los autos chocaban y luego llegó carabineros a tratar de canalizar el flujo del tránsito, pero la gente en realidad entró en pánico, muchos gritaban y lloraban, además había una gran cantidad de niños en los juegos infantiles”, señaló.

La mujer valoró el trabajo realizado por los uniformados, aunque le sorprendieron las declaraciones del alcalde de La Serena, Roberto Jacob, al indicar que la situación transcurrió con calma, cuando a su juicio, las señaléticas no se veían y la gente salió corriendo.

“Nosotros salimos corriendo muertos de miedo hasta la Ruta 5 y luego caminamos hasta Balmaceda, pensando en el posible tsunami. Luego de todo nos dimos cuenta que hubo saqueos, porque nosotros dejamos todo abierto y se metieron a robar, se llevaron hartas cosas de los puestos pero no importa, porque eso igual es material”, agregó.

El módulo donde trabaja Alejandra, a la orilla del mar

Medarline Valcius, ciudadana haitiana, también comentó lo que pasó tras el sismo.

“Me asusté y tuve que salir junto a mi pareja corriendo. Después cuando pasó todo volví a la casa, pero es primera vez que percibo un sismo de esa intensidad aquí en Chile. Yo sabía lo que tenía que hacer porque igual viví el terremoto en mi país en el 2010 y todos tuvimos que salir”, dijo.

Aunque al principio no quería salir, la mujer comentó por la fuerza del movimiento decidieron hacerlo y también ayudó recibir la alerta.

“Me parece una muy buena medida enviar un mensaje a tiempo por el celular”, destacó. 6101i