Sin dudas ha sido el tema de la semana. Hablamos de la nueva normativa que obliga al cambio de medidores de electricidad por nuevos mecanismos inteligentes, con la finalidad de mejorar por un lado la entrega de un servicio más eficaz por parte de las empresas, pero por otro lado, generar un control más detallado del consumo de energía, tanto para el cliente, como para quien la suministra.
Sin embargo, lo que parecía ser un avance y una mejora en relación a la entrega del suministro eléctrico en el país, se ha transformado en una verdadera polémica, debido al costo que implica para los clientes estos nuevos mecanismos, ya que según señala la normativa y como lo confirmó el Gobierno, serán los usuarios quienes cancelarán un valor en su boleta mensual, para financiar su reposición, los que pasarán a ser de propiedad de las empresas eléctricas, para su mantención y eficaz funcionamiento.
Pero más allá de continuar con la polémica, quisimos conocer cuáles serían los reales beneficios que traerían para los usuarios éstos nuevos mecanismo, los que ya están siendo pagados por los clientes, desde el mes de septiembre del año 2018.
Beneficios de los medidores inteligentes
El Seremi de Energía, Álvaro Herrera, se refirió a estos nuevos mecanismos y su implicancia para los clientes.
“El cambio en la propiedad de los medidores surge a partir de la Ley 21.076 que establece que El empalme y el medidor son parte de la red de distribución y, por tanto, de propiedad y responsabilidad de la concesionaria del servicio público de distribución”, señaló.
En este sentido, Herrera puntualizó que estos nuevos mecanismos, entregarán un detalle más completo del gasto de energía que se realice en un domicilio o empresa, información que no sólo estará disponible para quien suministra el servicio, sino también para el cliente.
“Con estas modificaciones, este nuevo sistema de medición y control tendrá múltiples beneficios para los clientes. No sólo significa el reemplazo de la medición manual para la facturación, sino que traerá importantes ventajas para los usuarios, porque permitirán saber cuánto consume cada hogar o empresa a cada hora, para optimizar el gasto y generar ahorros; conocer el consumo histórico, tener mayor precisión de los cobros efectuados, realizar el corte y la reposición de forma remota, entre otras prestaciones. También será la puerta para habilitar la medida de su propia generación de energía, en caso de aprovechar las ventajas de la generación distribuida”, agregó.
"Traerá importantes ventajas para los usuarios, porque permitirán saber cuánto consume cada hogar o empresa a cada hora, para optimizar el gasto y generar ahorros", indicó el seremi de Energía, Álvaro Herrera.
En esa línea, El seremi de Energía puntualizó en que se mejorará también la reacción por parte de las empresas a fallas o cortes de suministro, evitando la tramitación actual, que demora incluso varias horas en verificar alguna falla.
“Los medidores inteligentes ayudarán a la seguridad y calidad de servicio, pues mediante una gestión conjunta permiten identificar rápidamente a los clientes y las zonas afectadas en caso de fallas, sin necesidad de que el usuario deba reportarla, como ocurre hoy”.
Costo real para los clientes
Otras de las aristas que generan dudas es el tema del costo. Si bien en un comienzo se aseguró que no existiría un costo adicional para los clientes, actualmente se indicó que desde el mes de septiembre se ha iniciado un cobro, inserto dentro de las boletas de los clientes.
En este sentido, el Seremi de Energía, Álvaro Herrera aclaró el tema del costo y de qué significa.
“Las empresas distribuidoras tendrán que adquirir estos equipos para los clientes y cobrarlos en la tarifa como parte de sus inversiones. Este cambio tecnológico, que incidirá en la calidad del servicio eléctrico, tiene asociado un mayor costo, el cual debe ser considerado en el proceso tarifario, pero no implicará una mayor rentabilidad para las distribuidoras”, señaló.
En relación al valor que cancela el usuario por estos nuevos mecanismos, la autoridad regional indicó que no supera los $200 pesos mensuales.
“Se ha estimado que respecto de los $500 pesos mensuales que hoy representa el arriendo de medidores, el nuevo cobro que quedará sumido en la tarifa general no superará los $700 pesos. Es decir, el aumento real no superará los $200 pesos mensuales para los clientes, el que se incluye en la boleta desde el mes de septiembre del 2018”, enfatizó.
$200 pesos mensuales es el aumento en la cuenta de los usuarios por el valor del medidor inteligente.
En relación al ahorro que genera esto para las empresas, Herrera señaló que esto también se verá reflejado en rebajas para los clientes.
“Para efectos de calcular las tarifas también se considerarán los ahorros producidos por la implementación de este moderno sistema. Todo ahorro que haga la empresa distribuidora, al disponer de estos medidores, será especialmente reconocido y trasladado a rebaja tarifaria”, puntualizó.
Medidores de propiedad de las empresas
Otro de los puntos a aclarar, es que con esta nueva normativa, los medidores ya no son de propiedad del usuario, sino que pasan a ser parte del activo de la empresa, quienes deben responder por su mantención, reposición y funcionamiento.
“Con esta modificación el empalme y el medidor pasarán a ser parte del activo de la distribuidora, para que en caso de cualquier eventualidad la empresa deba responder, así como administra el cableado público y los postes, porque ante algún accidente o choque es la distribuidora la que asume su reposición para mantener la continuidad del suministro”, indicó el seremi de Energía Álvaro Herrera.
Finalmente, la autoridad regional enfatizó en que estos nuevos mecanismos son necesarios para elevar la calidad del suministro eléctrico en el país.
“Otra implicancia importante es que con estos medidores inteligentes los clientes podrán decidir cómo, cuánto y de qué forma usa su energía, es decir, estarán de igual a igual con su suministradora. Para lograr esa gestión de la demanda, generar en los hogares, almacenar energía, disminuir los tiempos de interrupciones y elevar la calidad de suministro en las casas, es fundamental que se cuente con estos sistemas”, finalizó.
Características de los nuevos medidores
-Estos nuevos mecanismos cuentan con un manejo remoto de datos, como potencia, energía voltaje y corriente, todo a través de un sistema de comunicación que permite conocer toda esta información.
-Los medidores convencionales, deben ser ajustados anualmente para mantener su exactitud. Los nuevos medidores necesitan cambio de batería cada 10 a 20 años.
-Este manejo remoto de datos, se hace de forma bidireccional, es decir, tanto la empresa como el usuario tienen acceso a la información y a la medición, de una manera muchos más actualizada y clara.
-Contar con esta información de manera actualizada, evita el redondeo, práctica que se ha vuelto común en algunas empresas, debido a la falta de personal que mida el consumo mensual de los medidores, situación que muchas veces generó problemas para los clientes.
-Toda esta información, en relación a la frecuencia del consumo puede ser revisada diariamente, ya que se actualiza cada 15 minutos.
- La empresa eléctrica puede saber de inmediato en caso de un corte y no necesariamente necesita la denuncia por parte del usuario, lo que permitirá también, que el servicio al cliente será mucho más eficiente para aquellos con medidores inteligentes. 5801
Proyecto para que cambio de medidores sea voluntario
Tras la polémica generada por la normativa del cambio de medidores, un grupo de diputados, entre ellos Juan Manuel Fuenzalida, presentaron un proyecto de ley que busca establecer la modificación del artículo primero transitorio de la Ley 21.076 sobre Reposición y Retiro del Empalme y Medidor, incorporando una nueva parte final en el inciso 1° de esta disposición, transformando de obligatorio a voluntario el cambio por parte de los clientes.
Al respecto, Fuenzalida aseguró que “el recambio de medidores ha creado un problema a la comunidad y lo usuarios especialmente. Y por eso es que hemos presentado un proyecto de ley que apunta a que esto sea de carácter voluntario”.
“Cada usuario debe elegir si quiere o no este cambio y no que la empresa los obligue por lo que esperamos que este proyecto de ley sea tramitado prontamente para entregarle una solución real a la gente”, agregó.