“Cuando asumí me pregunté por qué no hemos podido mitigar el femicidio”

“En la historia, todas las crisis sanitarias han afectado mayormente a las mujeres, sin excepción”,  fueron parte de las palabras de la Ministra de la Mujer y Equidad de Género, Mónica Zalaquett, cuando estuvo en la región de Coquimbo el pasado 27 y 28 de agosto, instancia donde conversó con El Día sobre los motivos de su visita.

Admitió que había mucho en lo que trabajar, especialmente post pandemia, puesto que los rubros más golpeados por la crisis eran aquellos con mayor presencia femenina, mientras que los que se han mantenido funcionando, como la minería, tienen menor representatividad femenina, razón por la que formaron, junto al gremio, la mesa Mujer en Minería, entre otras iniciativas.

-Cuéntenos las razones de su visita y porqué escogió la región de Coquimbo como la primera para recorrer...

“Yo estoy a punto de cumplir tres meses y para mí es muy importante comenzar a salir a regiones y esta fue la primera  a la que decidí venir porque acá se está llevando un piloto que creo que es el camino correcto de lo que hay que hacer en materia de fortalecer a nuestras policías para incorporar esa mirada de género en sus funcionarios y podamos entregar una mejor atención a la víctima que hoy día va y denuncia.

Hoy vamos a ampliar nuestro campo de acción a la prevención a través del Circuito Intersectorial de Femicidio, que siempre se había centrado en la atención y se reactivaba regionalmente cuando había un caso de femicidio.

“Yo no concibo que sigamos hablando que vamos a construir una sociedad justa donde siguen existiendo este tipo de fenómenos, donde el Estado en su conjunto no es capaz de llegar a tiempo, las mujeres no podemos ni debemos estar solas en este país, somos el 51,5% de la población, tenemos que trabajar con más fuerza”.

Cuando asumí me pregunté por qué a pesar del esfuerzo de los distintos gobiernos, no hemos sido capaces de mitigar el femicidio y no lo debiéramos aceptar.

Hoy día vamos a dar paso a la prevención también, pero para eso necesitamos capacitar más instituciones, necesitamos que fortalezcan sus unidades de género, vemos que PDI y el poder judicial  lo están haciendo, carabineros lo está comenzando a hacer, pero necesitamos a todas las instituciones e incorporar a otras.

Para combatir la violencia también necesitamos capacitar a nuestros profesores, los lugares de estudio son un lugar donde tú puedes pesquisar de manera temprana a una mujer que está siendo violentada, ya hicimos un acuerdo con el Ministerio de Educación, estamos haciendo webinar para los profesores, estoy en conversaciones con universidades, muchas de ellas ya tienen una unidad de género para ver como fortalecemos en la malla de formación de los futuros profesores, porque este es un flagelo tan complejo de ganarle en el mundo, que necesita un trabajo multidimensional.

Otra institución que necesitamos capacitar y que también se sume a este fenómeno es la Red Primaria de Salud, es otro lugar donde también se puede hacer una pesquisa precoz.

El femicidio es el resultado de una violencia que comenzó de manera casi imperceptible pero que fue creciendo en el tiempo, entonces nosotros tenemos que ser capaces de detectarla antes”.

-Por una parte está la prevención, pero por otro están los mecanismos de respuesta y de protección a las víctimas. En la región está el caso de Yulisa Cerda, quien había puesto la denuncia y estaba a la espera de una audiencia que fue postergada producto de la pandemia. ¿Cuál es el mea culpa, qué se puede hacer para que no vuelva a suceder?

“Nosotros hemos hecho un llamado al Ministerio Público, porque el Ministerio Público tiene que entender que una mujer que denuncia entra en un estado de vulnerabilidad mayor y a la mujer nos cuesta tomar la decisión de denunciar, hemos avanzado en esa materia y el llamado es a que sigan denunciando porque si esto se mantiene a puertas cerradas no vamos a ganarle a la violencia.

El poder judicial tienen que ponerse a la altura de los nuevos tiempos, en la medida que las instituciones incorporen y fortalezcan sus unidades de género, yo espero que el sistema pueda ponerse a la altura de la realidad actual y de la situación de miles de mujeres de nuestro país.

Como Ministerio estamos fortaleciendo nuestras áreas de capacitación, estamos trabajando con nuestros centros para la mujer, las casas de acogida, pero indudablemente el Ministerio de la Mujer no va a poder ganar esta batalla solo, necesitamos de todas las instituciones y yo también hago un llamado a los vecinos, a los familiares, a los amigos.

La mujer no denuncia en general por dos motivos, miedo y vergüenza, miedo porque su vida está amenazada y vergüenza porque sentirán que no les creerán, los amigos, familia, la opinión de los colegas y ahí es donde como sociedad tenemos un rol de contención y apoyo para que ninguna mujer sienta vergüenza”.

-Usted asume una cartera bastante intermitente, es la tercera ministra, ¿cómo fue enfrentar este cargo, estos nuevos desafíos, en un contexto complejo, con escenario de pandemia que ha sido doblemente complicado para las mujeres y con todos los casos que ha visto de violencia?

“Primero que nada yo quiero hacer un reconocimiento al Ministerio de La Mujer y a SernamEG, porque desde el día que asumió el Presidente Piñera han trabajado con fuerza, la Ministra Isabel Pla hizo un gran trabajo y este Ministerio nunca dejó de trabajar más allá que hayan existido cambios de ministra.

Estos tres meses me han hecho comprometerme aún más, casi no duermo, me duermo pensando en qué programas puedo hacer, como podemos generar e impulsar este cambio cultural, por otro lado me siento orgullosa de ser mujer chilena, porque la chilena es fuerte y lo que necesita son herramientas”.

-Más allá de la planificación y los objetivos estratégicos que tienen desde el ministerio, cuál es su objetivo personal, ¿qué quiere lograr usted como líder de la cartera por las mujeres chilenas?

“Yo quisiera avanzar en el empoderamiento de la mujer en el amplio sentido de la palabra, las mujeres chilenas somos muy fuertes, pero tenemos que trabajar muchas veces la autoestima, ser víctima de violencia te baja la autoestima, el no poder trabajar o alcanzar tus sueños también.

Ayudar a empoderar a miles de mujeres que se reconozcan, que visualicen y para acelerar el cambio cultural que tenemos que hacer como sociedad.

Queremos ser un país desarrollado y ser una sociedad más justa pero eso es imposible si no logramos igualdad y derechos en oportunidad para mujeres y eso requiere de un cambio cultural. Yo le dije al Presidente que no visualizo la reactivación económica sin la mujer”.