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Alejandro Pizarro
Con el retroceso de Monte Patria a Fase 1, el día jueves el 70% de la población regional estará confinada. Las autoridades llaman a respetar la disposición y hacer un buen uso de los permisos de desplazamiento, con el objetivo de no prolongar la medida.

Más de 43 mil controles se han realizado en La Serena y Coquimbo desde que inició la cuarentena. Una cifra menor en comparación a lo ocurrido en el confinamiento del año pasado.

En este punto, hay que considerar que actualmente son más las comunas en Fase 1 y el contingente policial es el mismo, motivo por el que los esfuerzos se han concentrado en puntos estratégicos.

Cabe precisar que al ser un trabajo conjunto, quienes participan de las fiscalizaciones son Carabineros, PDI, Fuerzas Armadas y personal de la Seremi de Salud.

Ante la eventualidad de una cuarentena regional, desde el Ejército descartaron contar con mayor dotación. “Hasta el momento no tenemos antecedentes al respecto, pero con los medios que tenemos a disposición por parte de las distintas instituciones estamos cumpliendo. Hasta el momento no hemos visto la necesidad, por lo menos acá nos mantenemos con lo que tenemos”, comentó Mayor Cárcamo, oficial de Asuntos Civiles.

En tanto, desde la seremi de Salud indicaron que frente a la posibilidad que más comunas retrocedan de fase, se analizará la situación de contar con más fiscalizadores. “Si se requieren más recursos se realizará la solicitud del Ministerio de Salud”, explicaron.

Por su parte, el general de la IV Zona de Carabineros, Rodrigo Espinoza, evitó hablar de cifras, destacando la labor de seguridad que cumple la institución en medio de la pandemia.

“Estamos abocados a prevenir delitos y contagios, a través de una planificación estratégica a cargo de cada Prefectura, en la cual se distribuye una cantidad determinada de carabineros, en base a los requerimientos de las distintas comunas y las etapas en las que se encuentren. Este despliegue, considera además, un trabajo interagencial coordinado para resguardar a toda la comunidad a través de cordones sanitarios, controles externos y puntos focales y dinámicos, que se suman al trabajo territorial”, destacó.

En el caso de la Policía de Investigaciones, informaron que de acuerdo a su planificación, se han destinado a 191 funcionarios para atender la contingencia sanitaria, quienes además efectúan sus labores investigativas. Por lo que en la eventualidad de una cuarentena total, no disponen de más refuerzos para colaborar en esas tareas.

 

Estrategia focalizada

Respecto al plan actual de fiscalización de la norma sanitaria, el Mayor del Ejército se mantiene confiado que funcionará para reducir los contagios de coronavirus e insiste en el llamado al autocuidado.

“Estamos cambiando estrategias de control para hacer más efectiva la reducción de la movilidad, especialmente en las comunas en Fase 1 de cuarentena, es donde se centra el esfuerzo ahora de acuerdo a los niveles de contagio y lo que nos impone el nivel superior asociado al Paso a Paso”, detalló.

Algunas de ellas, según adelantó, consideran controles focalizados en sectores de mayor movilidad y de más altos índices de casos, ya que, cuando cambian las condiciones es necesario adaptar las estrategias, como en el verano, por ejemplo, donde las fiscalizaciones se concentraban en el borde costero.

“Nosotros hacemos un trabajo de acuerdo a los anuncios que hace el Gobierno, tenemos el tiempo para hacer las planificaciones. Se trabaja con los organismos del Gobierno Regional y las policías. Con los medios que hay se generan estrategias acorde a los nuevos escenarios que se van dando”, especificó.

En la misma línea, el general Rodrigo Espinoza, explicó que existe una reoptimización de los recursos a partir del capital humano disponible en la Región de Coquimbo.

“Con carabineros abocados al monitoreo y fiscalización del cumplimiento de las medidas sanitarias, pero sin dejar de lado, los servicios policiales vinculados al Plan Cuadrante y aspectos relativos a la función propia. Siempre estaremos donde la comunidad nos necesite”, concluyó.

Si bien todas las entidades aseguran tener la mejor disposición para llevar a cabo un plan de control óptimo, en la práctica los recursos son escasos, por lo que el llamado al respeto por la norma sanitaria es crucial.

 

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