• Un grupo de 30 alumnos beneficiados contaron su experiencia ante las autoridades de educación. Foto: Nicole Muñoz
  • Seremi regional de Educación, Pedro Esparza. Foto: Nicole Muñoz
  • María Lorena Araya, directora del liceo Pedro Regalado Videla Órdenes de Andacollo. Foto: Nicole Muñoz
  • Nicolás Blanco estudiará Licenciatura en Música en la ULS. Foto: Nicole Muñoz
  • Carla Castillo se matriculó en la carrera de Ingeniería en Información y Control de Gestión de la UCN. Foto: Nicole Muñoz
Durante el programa, los alumnos visitan universidades o comparten con profesionales de distintas áreas para aumentar sus expectativas. También pueden evaluar y valorar lo que quieren estudiar.

La segunda generación del Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior (PACE), ha seleccionado hasta el momento a 106 jóvenes de la región, para permitirles su ingreso directo a una carrera universitaria considerando su rendimiento académico, sin importar el puntaje obtenido en la PSU.

Cifras preliminares dadas a conocer por el Seremi de Educación de Coquimbo, Pedro Esparza, quien sostuvo un encuentro con 30 estudiantes beneficiados para compartir y conocer más de su experiencia al ingresar a un centro universitario por su esfuerzo académico.

“El número de beneficiarios va a aumentando porque estamos recopilando antecedentes de las otras universidades del resto del país. Esta cifra solo es de los matriculados en la Universidad de La Serena (ULS), la Universidad Católica del Norte (UCN), y en el Ceduc UCN. Tenemos 29 instituciones en convenio y esperamos tener en marzo el informe final”, comentó.

Esparza manifestó que con este programa “se entrega justicia a muchos jóvenes vulnerables”.

“Ellos presentan la Prueba de Selección Universitaria (PSU) en condiciones desventajosas y habitualmente sus resultado no son los mejores. Pero ellos sí son muy buenos alumnos dentro de sus establecimientos y ese es el referente fundamental que tiene este programa”, acotó.

Dijo que al entregar más oportunidad a los jóvenes vulnerables, ellos pueden desarrollar sus talentos, inteligencia y ganas de surgir. “De este modo no solo gana un joven, o una familia,  gana el país al entregarle la formación que corresponde a todos más allá de su condición socioeconómica”.

Aumentar expectativas

Por su parte, María Lorena Araya, directora del liceo Pedro Regalado Videla Órdenes, resaltó la cantidad de experiencias que acumulan los alumnos a través del programa PACE, antes de entrar a la universidad.

“Ellos visitan las universidades, comparten con otros alumnos y profesionales de distintas áreas, eso les abre las proyecciones para que sus expectativas sean mayores. Emocionalmente les da seguridad para que enfrenten la PSU y la universidad, además también pueden pensar, evaluar y valorar lo que quieren estudiar”, precisó.

Destacó que regularmente hay habilidades que los alumnos provenientes de hogares de nivel socioeconómico bajo no han desarrollado por una cuestiones culturales, o “porque no han tenido acceso a espacios y experiencias que tienen los otros chicos”.

“Es por ello que el programa PACE realiza un trabajo bastante fuerte y profundo con los estudiantes durante dos años (desde tercero hasta cuarto medio), con talleres, charlas y seguimiento del proceso académico. Cuando los alumnos están en la universidad, hay un proceso de acompañamiento psicológico y académico durante año para reforzar las habilidades y consolidar sus propósitos o metas específicas”, apuntó.

Descubrir vocaciones

Nicolás Blanco, egresado de la carrera de electrónica en el liceo Pedro Regalado Videla Órdenes de Andacollo, es uno de los alumnos coquimbanos que este año tiene un cupo asegurado en la Universidad de La Serena mediante el programa PACE. Al enterarse de este beneficio, el pensamiento de ingresar a la educación superior estaba más cerca de convertirse en realidad.

“Mi objetivo era terminar las prácticas y entrar trabajar para poder sacar a mi familia adelante.  Yo no estaba preparado para la PSU, le tenía miedo a la prueba, pero después me dieron una beca para entrar al intensivo. Pude fortalecer mis conocimientos, además con el acompañamiento que me dieron supe lo que quería estudiar, porque hace seis meses podría decir que quería estudiar ingeniería civil en electrónica, porque ese es mi técnico, además pensaba en la plata. Pero me di cuenta lo que me gustaba y decidí ingresar por licenciatura en música”.

Finalmente, Karla Castillo, quien estudió contabilidad en el Instituto Superior de Comercio, explicó que para ella el PACE representa una oportunidad de afianzar su carrera universitaria.

“Yo me preparé harto para la PSU y salí bien, sin embargo decidí entrar por PACE porque me parece que es una garantía, una oportunidad de crecer más”, acotó.

Requisitos

Para tomar en cuenta a los estudiantes en el programa, éstos deben ser cursantes de 3° y 4° medio en un colegio o liceo PACE y lograr un 85% de asistencia en las actividades de preparación que se organiza. También se toma en cuenta el puntaje Ranking, que debe ser igual o superior a 705 puntos, o egresar en el 15% superior del puntaje ranking de su centro educativo.

También deben rendir la PSU en matemáticas, lenguaje y comunicación y al menos una prueba electiva, sin requisito de cumplir un puntaje mínimo.

 

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