Sin duda, la pandemia por COVID-19 ha puesto a prueba a una red asistencial de salud que presentaba muchas deficiencias, pero que se ha fortalecido a través de distintas medidas, que en la Región de Coquimbo se traducen en la incorporación de equipamiento y recurso humano adicional y el aumento del número de camas de la Unidad de Cuidados Intensivos en tres veces, entre otras medidas.
Intendenta, durante su gestión hemos visto una serie de medidas e inversiones enfocadas en el ámbito de la salud, sin embargo, seguimos siendo la región con menos camas por habitantes ¿Cómo se ha trabajado para subsanar esta situación durante la pandemia?
Desde el primer día hemos trabajado con un foco especial en la salud, porque sabemos la deuda que la región tiene hacia sus habitantes en esta materia y lo fundamental que es para la calidad de vida de todos contar con un sistema de salud fortalecido. Durante los dos últimos años hemos hecho importantes inversiones, muchas de ellas a través de un convenio de programación de más de $320 mil millones entre el Gobierno Regional y Minsal, pero esta pandemia nos presentó además una oportunidad importante para mejorar aceleradamente en este aspecto y puedo decir con propiedad que en estos últimos cuatro meses la salud pública de la región ha crecido lo que no había crecido en 20 años.
¿Y cómo se traduce esto en materia de camas?
Lo fundamental para enfrentar esta emergencia era aumentar rápidamente el número de camas críticas, por eso, en marzo la región contaba con 22 camas UCI, que son las equipadas con ventilador mecánico, y nos propusimos llegar a 68. Hoy podemos decir que superamos a meta, llegando a 81 de estas camas gracias a la adquisición de ventiladores por parte del Gobierno y a través de donaciones de privados. Además, en camas de Unidad de Tratamiento Intensivo (UTI) pasamos de 40 a 71 unidades.
¿Y qué pasa con el resto de las camas clínicas?
Bueno, Son varias las medidas implementadas en este aspecto. Por ejemplo, esta semana llegó a Chile el hospital modular que tanto esperamos y que aportará con 100 camas a la Red Asistencial para la atención de pacientes sin covid, ubicándose en el ala norte del estacionamiento del Estadio La Portada, el que estará los próximos días en la región para su instalación y funcionamiento.
Además, hace unos días visitamos el Puesto de Atención Médico Especializado (PAME) del Ejército de Chile en el Hospital de Illapel, instalaciones que amplían la capacidad operativa para dar frente a la pandemia del Coronavirus, siendo este uno de los tres puestos del país. Aquí hablamos de 20 camas básicas y 10 monitores de signos vitales, lo que nos permite disminuir los traslados hacia hospitales más complejos y que los vecinos del Choapa se atiendan cerca de sus familias.
Un hospital modular que generó más de una controversia debido a su redestinación.
Lo importante es transmitir a la comunidad que ya llegó a Chile este recinto que nos va a permitir descongestionar al hospital San Juan de Dios de La Serena, convirtiéndose en un espacio libre de Covid19.
Todo lo que pasó antes responde a que estamos en un contexto de emergencia sanitaria en el que otras regiones presentan una sobrecarga hospitalaria que debía solucionarse con premura. En todo este proceso nosotros realizamos las gestiones correspondientes de forma permanente y hoy podemos decir que pronto contaremos con esta solución en nuestra región.
¿Cuántos son ya los recintos modulares que operan en la región y qué mejoras implican para el funcionamiento de la red?
Además del recinto del hospital de Illapel y el hospital modular que llegará en los próximos días a La Serena, el Ejército de Chile instaló cinco estructuras en las Unidades de Emergencia de los hospitales de La Serena, Coquimbo, Ovalle, Vicuña y Combarbalá. Son carpas que mejoran las condiciones de atención durante la emergencia sanitaria, y que sirven como Triage o Salas de Espera, favoreciendo el distanciamiento entre pacientes respiratorios y no respiratorios, y evitando la propagación del virus.
Pero los centros de salud no funcionan solos ¿Qué se ha hecho estos meses en materia de personal de salud?
Inicialmente contemplamos la contratación de 1.100 funcionarios para apoyar a los equipos de salud de toda la Red Asistencial, pero hoy ya hemos contratado a 1.580 personas, distribuidas en los 10 hospitales de la región y funcionarios de Atención Primaria de Salud (APS).
No olvidar además que tenemos un hospital de contingencia exclusivo para pacientes Covid, donde desde su entrada en funcionamiento se han empleado 56 funcionarios y esperamos llegar a 80, para un recinto que cuenta con 50 camas clínicas, de las que 18 son UCI, 17 UTI y 15 para cuidados medios.
Además aumentamos la dotación del equipo de Hospitalización Domiciliaria de la Atención Primaria de Salud (APS), reforzando la contratación de personal en los distintos CESFAM, SAPU y SUR de la región. Estos equipos son conformados por un médico, un kinesiólogo, un TENS y un enfermero, quienes han visto aumentadas sus atenciones a pacientes con patologías de menor y mediana complejidad durante esta emergencia sanitaria.
¿Qué pasa respecto de la implementación y funcionamiento de laboratorios en la región?
Al principio de la pandemia no teníamos alternativas locales para procesar exámenes PCR, por lo que teníamos que enviar nuestras muestras al Hospital San Camilo, en San Felipe. Hoy, gracias a los esfuerzos del Gobierno y sector privado, contamos con 6 recintos, como son los del Hospital de Illapel, FIGEMA, CEAZA-Hospital de La Serena, UCN, Hospital de Coquimbo y Hospital de Ovalle. La capacidad regional es para procesar 560 muestras al día.
Nos detalla un importante despliegue para fortalecer la salud, sin embargo, los contagios siguen creciendo ¿Cuál sería su mensaje para la población en esta pandemia?
Lo hemos dicho desde el principio, esta pandemia solo la podemos superar entre todos. Esta no es ‘solo una gripe’ como muchos piensan o dicen en las calles, tampoco afecta solo a mayores y enfermos crónicos, estamos hablando de un virus del que cada día se conocen antecedentes nuevos y que ha demostrado que puede afectar de a personas de distintas edades y condición basal de salud en distinta magnitud y gravedad.
Nosotros estamos poniendo todo de nuestra parte, con inversión y gestión, pero estos esfuerzos no serán suficientes si la ciudadanía no respeta responsablemente las medidas de cuidado y prevención para evitar más contagios. El llamado es a ser responsables y tomar conciencia de que este no es un juego, es una enfermedad que puede ser fatal, así que debemos usar nuestras mascarillas correctamente, lavarnos las manos permanentemente, mantener la distancia social y respetar cada una de las indicaciones de la autoridad sanitaria, que se basan en lo recomendado por especialistas y la OMS.