• En grandes tiendas se han registrados hechos delictivos como hurtos en los que participan los propios trabajadores.
Crédito fotografía: 
Archivo El Día
Desde las redes sociales los usuarios consideran que este tipo de delitos ocurren con frecuencia. En tanto, la PDI sostiene que cuando reciben denuncias, abren la investigación y se activan los protocolos necesarios para detener a los responsables.

Un nuevo hurto al interior de un reconocido supermercado de La Serena en el que se vieron involucrados dos guardias de seguridad del propio establecimiento generó una amplia discusión a través de las redes sociales, pues la percepción de los usuarios es que este tipo de delitos ocurren con más frecuencia de la deseada y no es ninguna novedad.

Este caso ocurrió la semana pasada en la sucursal del Jumbo ubicado en las cercanías de la Ruta 5. Fue tras la investigación policial que se logró constatar el vínculo de los vigilantes con un par de sujetos que llenaron dos carros con mercadería y salieron del recinto sin ser fiscalizados.

La página de Facebook de El Día se llenó de comentarios de usuarios que rechazaron la acción de los guardias, mientras otros intentaron justificarla indicando que esta labor no es bien remunerada.

Pedro Arce señaló que “ensuciarse las manos por una miseria” no tiene razón de ser. “Un trabajo tal vez no te haga millonario, pero es un dinero bien ganado y si no estás conforme con lo que ganas, fácil, te cambias de empleo, total, guardias necesitan todas las semanas”.

Por su parte Carmen Rodríguez se aventuró a decir que aunque no justifica el robo, la empresa de guardias paga poco y se demoran en entregar el dinero. “(…) No justifico el robo, pero todo conlleva a este resultado”.

En contraste, Rayén Campos defendió la labor de los guardias, pues a su juicio, no todos son iguales. “Muchos arriesgan su vida por productos que ya están asegurados...no deberían meterlos a todos en el mismo saco”.

Igualmente, José Luis Coñuecar se preguntó que cuál es “la novedad de la noticia si cada vez es más frecuente los robos de este tipo”.

MÁS DETALLES DEL HECHO

El comisario Aldo Murgas de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de La Serena, afirmó que, aunque no existen estadísticas oficiales en la región sobre el número de trabajadores o personal de vigilancia que participa en robos o hurtos a las tiendas donde laboran, cuando reciben alguna denuncia por sospechas situaciones irregulares abren una investigación que incluye entrevistas, revisión de cámaras e inspecciones al lugar donde ocurrió el hecho.

Murgas también reveló más detalles del caso ocurrido en el Jumbo. “Cuando recibimos la denuncia, el jefe de tienda manifestó que tenía sospechas de los vigilantes porque en la grabación de seguridad se observa que las paletas de seguridad se activan, ya sea con alarma sonora o de luz, y por protocolo ellos deben revisar a las personas, pero en esa ocasión no lo hicieron.

Otro de los detalles que logró observar el personal a cargo de la investigación en el material audiovisual, es que uno de los vigilantes saludó al sujeto sospechoso, lo que las autoridades interpretaron como complicidad.

“Uno de los testigos que entrevistamos señaló que en días anteriores los había visto en esa misma situación  y eso nos dio más fuerza para seguir y comprobar que estaban involucrados”, dijo el comisario. Finalmente, al tomarles declaraciones, los detenidos reconocieron el delito ante el personal policial.

NO ES PRIMERA VEZ

Murgas recordó que una situación similar se presentó en diciembre pasado en el mismo supermercado, con una asistente de control de cajas y una cajera.

“Ellas tenían un tipo de banda organizada dentro del local. En ciertos momentos venía gente externa, familiares de una de las cajeras y anulaban las compras para luego salir con la mercadería pero sin cancelar”, precisó.

Este modus operandi también se ha presentado en otros establecimientos de la conurbación en los últimos meses. Uno de los más destacados fue la detención de un guardia de seguridad de la tienda Ripley ubicada en el Mall Vivo Coquimbo en febrero de este año, por robar teléfonos celulares avaluados en 3 millones de pesos.

En mayo pasado también se registró la detención de un guardia de la tienda Easy de La Serena, por hurtar una serie de especies usadas en el rubro de la construcción avaluados en la suma de $400.000. 6101i

PROTOCOLO A SEGUIR

Generalmente, cada establecimiento tiene un protocolo a seguir cuando se presentan este tipo de casos en los que trabajadores o guardias de seguridad son actores en delitos como hurto o robos.

En el caso de los centros comerciales, desde Vivo Corp informaron que si un delito de estas características sucede al interior de una de las tiendas, si el guardia presta servicios para el mismo establecimiento, deben ellos resolver la situación.

Por otra parte, si es un guardia del Mall el que se involucra en un delito a una tienda, o un guardia de una tienda roba otra, allí si actúan con los protocolos del caso. 

El Día además consultó con encargados del Supermercado Jumbo sobre sus medidas internas cuando se registran delitos de esta naturaleza en la empresa, sin embargo, al cierre de esta edición aún no se ha recibido respuesta.

 

CRONOLOGÍA

DICIEMBRE 2017: Una asistente de cajera y una cajera del supermercado Jumbo fueron detenidas cuando se comprobó que anulaban las compras de personas externas al establecimiento para que se llevaran productos sin cancelar. 

DICIEMBRE 2017: Dos empleados y un extrabajador de la automora Callegari planificaron el robo de  $19.500.000. Las personas denunciaron un asalto a mano armada tras retirar el dinero de la empresa desde una sucursal bancaria, sin embargo, quedaron al descubierto cuando la policía analizó las cámaras de vigilancia y determinaron que la forma de ejecución del hecho carecía de las características propias de este tipo de delitos. Un administrativo de nacionalidad colombiana confesó el plan y los involucrados pasaron a control de detención.

FEBRERO 2018: Un guardia de seguridad de la tienda Ripley, ubicada en Mall Vivo de Coquimbo, fue detenido por los detectives de la Bricrim, al constatar que, aprovechando su condición, desactivaba los sistemas de vigilancia para luego abrir las vitrinas y sustraer celulares de alto valor. 

MAYO 2018: Un guardia de seguridad de la tienda Easy fue detenido tras ser captado por las cámaras de seguridad, hurtando una serie de especies del rubro de la construcción. Lo policía logró recuperar dos taladros inalámbrico, un esmeril y tres wallstickers rama con hojas. El sujeto mantenía una orden pendiente  por hurto simple

JUNIO 2018: Dos guardias del supermercado Jumbo son detenidos por complicidad con un par de sujetos que en dos carros del establecimiento, hurtaron mercadería y no fueron fiscalizados por el personal de seguridad.

 

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