“Mi pega no es marchar, sino preocuparme de lo que pasa en la ciudad”

A 51 días del estallido social, las consecuencias y los cambios en la rutina de gran parte de la ciudadanía se ha visto afectada, las autoridades han debido cambiar sus agendas y las prioridades ahora son distintas, lo que ha generado críticas de todos los sectores en las decisiones que se toman.

Bien lo sabe el alcalde de la ciudad de La Serena, Roberto Jacob, que en conversación con Radio El Día se refirió a diversas temáticas que han surgido de la contingencia y el trabajo que como municipio siguen realizando cada día.

Estimó que el monto por daños en la comuna debe bordear los $4 mil millones, cifra que aún  debe confirmar puesto que el catastro oficial se realizó hace dos semanas atrás y alcazaba los $2 mil millones.

¿Qué siente al ver la infraestructura de edificios patrimoniales dañada?

“Los daños a la propiedad privada, estructurales o a edificios públicos no mejora la situación del reclamo hacia el Estado respecto de las soluciones que está pidiendo la gente. Son dos cosas diferentes, las reivindicaciones sociales, con las cuales estamos todos de acuerdo y todo lo que son las marchas pacíficas que en la tarde se convierten en no tan pacíficas. Hoy día, mientras el Estado no solucione lo que la gente está pidiendo, mientras no se acaben las marchas pacíficas, la cadena no se va a terminar, porque las marchas pacíficas de la tarde están infiltradas con el lumpen, el narcotráfico y por anarquismo y eso lo tenemos todos absolutamente claro”.

¿Cree que el Gobierno ha estado a la altura en más de 50 días de movilizaciones?

“Yo creo que no ha estado a la altura, yo creo que tampoco lo asimiló, ni el más pesimista pensó que esto se venía. Nadie se lo esperaba, porque como dijo una vez el presidente este era un oasis, pero el oasis se transformó. Nombrar la palabra guerra fue el primer error, te incita a pensar en algo mayor, la gran equivocación estuvo en pensar que los 30 pesos del metro era la solución y era lo puntual y ese fue la punta del iceberg”.

¿Y respecto de la inteligencia policial?

“No la hubo y ahora todos reconocen el error, ¡imagínate en una guerra con esta inteligencia! En una guerra mejor levantemos las manos y nos rendimos”.

¿Teme que lo traten de débil?

“Lamentablemente los que estamos visibles somos los alcaldes y yo he tenido que dar la cara por todo lo que ha pasado y he dado entrevista en todas partes y he dado mi opinión, he andado en la calle, he salido en la noche a conversar con quienes defienden su comercio, he estado en reuniones con las distintas juntas de vecinos. Lo que pasa es que yo no puedo publicar todos los días lo que hago.

Yo no tengo porque dar explicaciones, yo lo que tengo que hacer es darle soluciones a la gente. Hoy día tenemos  que pensar lo siguiente, hay grupos que marchan, hay grupos que destruyen, pero ¿cuántas personas están en sus casas? La Serena tiene entre 230 mil, 240 mil habitantes, yo soy alcalde para todos”.

Y respecto al comercio ambulante ilegal…

“Yo diría que el 50% de los ambulantes son extranjeros que no tienen permiso y hoy día están trabajando en la ilegalidad y corren un tremendo riesgo. Si ellos vienen a este país a buscar una oportunidad y se suman a la ilegalidad pudiesen ser hasta deportados”

Habló de grupos de mafia, ¿hay antecedentes de aquello?

“Absolutamente, los vehículos que reparten la mercadería pasan a ser prácticamente como distribuidores, entonces tenemos una camioneta que llega todos los días con frutillas, con espárragos, acá no se da el espárrago, y le hemos pasado 3 o 4 partes. Nosotros vamos a apuntar a ver al proveedor, porque resulta que eso para mí es una mafia, la mercadería que ellos tienen no es de una persona que socialmente necesita vender porque tiene problemas, es un negocio muy lucrativo”.

¿Cree que estas medidas pueden tener un costo para el futuro?

“Uno no puede pensar, cuando hace alguna acción, en los costos que pueda tener políticamente, yo lo tengo que hacer es lo que yo creo que se hace correctamente y hoy día la mitad de los ambulantes son extranjeros, la otra parte son de Santiago, de Valparaíso y otros son de Coquimbo, es decir, el grupo de ambulantes que realmente es de aquí de La Serena es minoritario respecto a todos los que han llegado ahora”.

¿Cederá ante la petición de la Cámara de Comercio de no cerrar las calles en época navideña?

“La Cámara de Comercio sabe y se los dije hace más de una semana, no se va a hacer boulevard en el centro de La Serena, este año no se va a cerrar la calle y es una decisión tomada. He autorizado todas las ferias navideñas, en Las Compañías, La Antena, arriba cerca de San Joaquín, a nadie se le va a negar una feria navideña, lo único que no voy a hacer en el centro es cerrar las calles”.

¿Qué piensa respecto a las campañas de redes sociales donde se pide su renuncia?

 “La gente está en democracia de pedir lo que quiera, aquí el que decide no es el que pide sino el que vota, por lo tanto yo en eso no tengo mayor problema, acepto las críticas, si puedo corregir corrijo y si yo creo que estoy en la razón no le hago caso”

Tras esto, ¿piensa en ir a la reelección?

“Lo estoy pensando y ahora lo sigo pensando, la decisión que yo tome no va a pasar por esta contingencia, aquí el que me puede sacar de aquí si yo decido ir es la gente”.

Usted ha tenido dos periodos tranquilos ¿cómo lo hace ahora?

“La gente los quiere a todos y los quiere donde ellos quieren, pero la cosa no es así, nosotros tenemos obligaciones que cumplir, aunque les parezca extraño, a mí me gusta nadar en aguas turbulentas porque la mejor forma de aprender a nadar es en aguas turbulentas”.

¿Cómo cree que lo ha hecho el Gobierno Regional, la Intendenta?

“Yo creo que como nos sorprendió a todos los sorprendió a ellos (…) Creo que ella ha estado sola, porque acá deberían estar los parlamentarios, debería estar la gente de Estado”.

¿Siente que habido un abandono de la región?

“No, creo que ha sido en todas las regiones. Yo no me puedo quejar porque nosotros hemos tenido bastante apoyo en cuanto a proyectos durante todo el tiempo que hemos gobernado con este Gobierno, yo no los puedo crucificar por un mes”.

¿Se arrepiente del árbol de navidad?

“No me arrepiento en absoluto, es hermoso, el año pasado lo criticaron porque era feo. Acá no hay nadie que haga árboles de pascua, no hay donde licitarlo, asumo mi responsabilidad. Si lo han de quemar le van a quitar la ilusión a los niños”.

¿Habrá Festival de La Serena?

“El festival está en evaluación, yo cuando llegue el momento lo voy a decir, porque yo no voy a reaccionar por lo que me dicen los medios. Suprimí los fuegos artificiales, el festival internacional de folclore, los tunas, los mimos y tenemos un montón de actividades que por lo que estamos pasando no se justifican”.

Habla de los avances durante su administración, ¿pero cuánto se retrocedió con este estallido social?

“Si hablamos de proyectos, en los proyectos no se ha retrocedido, porque se está trabajando en el mirador paseo Larraín Alcalde, en la parcela 41, se está licitando el liceo Darío Salas de Las Compañías, se están licitando las canchas de arriba de El Milagro, ya salió el proyecto licitado de las multicanchas de pasto de La Antena en la 18 de Septiembre. Todas esas cosas están avanzando, quizás un poco más lento. En lo que nosotros retrocedimos  es en lo que nos destruyeron en la ciudad lo que señalética, lo que es semáforo, en las cámaras, la ciudad parece una lata de sardinas forrada con latas por todos lados pero va a llegar el momento en que al menos pediré que pinten esas latas”.

¿Qué pasara en la temporada estival?

“Hay algo que no tiene que ver con el estallido y tiene que ver con los argentinos que no están viniendo por todos los problemas económicos que tienen ellos, ahora se va a restar un poco más por todas las noticias que se están viendo acá en La Serena, lo que lógicamente va a perjudicar el turismo, yo creo que los chilenos van a venir, no el número que vienen siempre pero van a venir”.