Total incertidumbre en cárcel de La Serena tras contagio de imputado que llevaba un mes en prisión

En algún momento tenía que pasar. Hasta ahora, la cárcel de Huachalalume no tenía ningún caso de Covid positivo que correspondiera a un reo “originario” de la zona, y sólo registraba los contagios de internos que llegaron desde recintos penales de la Región Metropolitana, algo que ya había provocado la molestia e indignación por parte de los funcionarios de Gendarmería, las familias de los presos, los propios reclusos, e incluso los habitantes del sector donde está emplazado el establecimiento penitenciario, quienes vieron que con los traslados se estaba poniendo en riesgo también la salud de ellos, ya que los condenados foráneos venían sin su examen PCR. 

Los temores se vieron concretados cuando se dio a conocer que algunos de los pacientes efectivamente llegaron con coronavirus, lo que se confirmó una vez que ya estaban en la cárcel local. En total, a la fecha se registran 18 contagios que están guardando cuarentenas en un módulo especialmente adaptado. 

De todas formas, las manifestaciones de molestia desde distintos sectores de algo sirvieron, ya que el ministro de Justicia finalmente expresó que de aquí en más, los traslados no se realizarían sin antes efectuar la prueba que verificara el estado de salud del interno. 

Desde adentro

Pero los miedos no se disiparon. Las juntas de vecinos del pueblo de Huachalalume continuaron en alerta, y organizaron reuniones con las autoridades. Por su parte, los trabajadores del recinto también efectuaron acciones tendientes a evitar la propagación del virus, y veían como única alternativa el que no se llevaran a cabo estos traslados. Sin embargo, sucedió lo peor que podía ocurrir. El día martes, luego que por circunstancias especiales un reo se realizara el examen, el resultado dio positivo. 

Y no se trataba simplemente del “caso número 19”. El interno no venía desde otro recinto penal, ni siquiera era de otra ciudad. Era un imputado que se encontraba en prisión preventiva desde el tres de junio –hace más de un mes- al interior del penal. 

Las interrogantes surgieron de inmediato. ¿Cómo, dónde y cuándo se contagió?, ¿con cuántos otros presos tuvo contacto estrecho? De esos contactos estrechos, ¿cuántos más adquirieron el virus y continuaron propagándolo? 

Buscando respuestas

De acuerdo a la información recabada por este medio, que tuvo acceso fuentes al interior del penal, el caso positivo corresponde a un joven serenense de 23 años, que estaba con la medida cautelar de prisión preventiva luego de ser detenido en un procedimiento policial, y luego formalizado por posesión y tenencia de arma de fuego. 

Entró con otro sujeto, y su situación en la cárcel había sido bastante particular. Si bien no se sabe dónde pudo contraer el virus, existen algunas sospechas las que deberán ser dilucidadas en la respectiva investigación epidemiológica que realizaría la Seremi de Salud. 

Por lo pronto, se conocen los lugares donde estuvo desde su detención y luego que entró al penal, donde en un primer momento realizó la cuarentena que efectúan todos los internos durante 14 días en el módulo 2. 

Al llegar el día número 15 ambos individuos debían ser trasladados a la agrupación donde están los imputados, a la espera de la investigación penal, pero al llegar ese momento comenzaron a suscitarse los problemas, ya que ni al actual contagiado ni a su acompañante los querían recibir en ninguno de los módulos debido a problemas que tenían con otros internos. A esto se sumaba el contexto, debido a que los reos estaban reticentes al ingreso de cualquier sujeto que “viniera de la calle”, por lo mismo, continuaron en asilamiento en una celda aparte durante algunos días más. 

Finalmente debieron ingresar al módulo definitivo, y los funcionarios de Gendarmería los trasladan al número 11. Allí, el sujeto que resultó positivo continuó teniendo inconvenientes y no hubo caso para que los demás reclusos lo dejaran hacer ingreso, algo que no tuvo que experimentar su compañero quien sí fue recibido. 

Ante esto, el joven de 23 años sugiere que lo lleven al módulo 13, también para imputados en prisión preventiva, ya que “ahí tenía conocidos”. Pero no le sirvió de mucho ya que, según cuentan desde la institución penitenciaria, “no alcanzó a estar ni 10 minutos y lo molieron a palos”. 

Directo al hospital

Consultado, el coronel Leoncio Hidalgo, director regional de Gendarmería, ratificó la información y precisó que cuando se produjo este incidente fue derivado al Hospital San Juan de Dios de La Serena. “Debido a sus lesiones tuvo que ser trasladado. En el recinto hospitalario él presenta algunos síntomas y le realizan el examen PCR. Pasados los días, nos llega el resultado que arroja Covid positivo”, asevera Hidalgo. 

El coronel, asevera que el sujeto prácticamente no tuvo contacto con otros reos, ya que no alcanzó a permanecer más que algunos minutos en el módulo 13, sin embargo, debido a que el otro individuo que estuvo en contacto directo y estrecho con él por casi 20 días sí permaneció bastante tiempo en el módulo 11 es que se decretó el aislamiento total de este sector habitado por unos 60 internos que por lo pronto, ni siquiera pueden salir de sus celdas al patio. “Está todo aislado. Claramente es una situación estresante para los demás internos, pero es algo que se debe hacer. Respecto a la otra persona que permaneció con él, está en otro lugar diferente, también completamente aislado”, indicó. 

Los pasos a seguir

Lo que viene ahora es incierto. Por lo pronto, se le realizó el examen PCR al contacto estrecho del contagiado, y se está a la espera del resultado, que, lo más probable es que también sea positivo. 

Consultado el Seremi de Salud Alejandro García expresó que se encontraban monitoreando la situación en coordinación con Gendarmería y la Unidad de Salud del centro penitenciario. “Respecto al contagio lo que podemos señalar es que actualmente estamos en fase 4, lo que indica que tenemos transmisión comunitaria de la enfermedad y las personas se pueden contagiar en cualquier lugar, por eso es necesario reforzar las medidas preventivas”, enfatizó. 

Funcionarios

Las distintas agrupaciones de funcionarios expresaron su preocupación e incluso su temor por lo que está ocurriendo. Jokan Garrido de Anfup manifestó que esto era totalmente distinto a lo que se tenía hasta el momento, que eran contagios que se sabía de dónde venían. “Aquí hay mucho temor porque se pierde la trazabilidad y nadie sabe nada. No sabemos si nosotros como trabajadores estamos también contagiados. Aquí hubo varios funcionarios que tuvieron contacto con el interno que dio positivo y a ninguno se le ha hecho el examen. La situación es súper complicada, porque nosotros estamos acá en un lugar donde el virus ya está en cualquier lado, y no sabemos si nos vamos a contagiar y lo vamos a llevar a nuestras casas, a nuestras familias”, sostuvo Garrido. 

Freddy García, representante de los suboficiales precisó que “esto es alarmante. Es obvio que hay más contagios entre nosotros, entre los internos. Como gremio hicimos todo lo posible por evitar esto, pero no se pudo porque en este caso en particular, más encima el contagio se produce por motivos indeterminados, no sabemos a ciencia cierta cómo pasó esto”, remarcó García, agregando que en el corto plazo solicitarán una nueva reunión con las autoridades de Justicia para analizar el nuevo escenario. 

Defensoría en alerta

La defensora regional Inés Rojas, también se mostró preocupada por lo que está ocurriendo, sobre todo porque los individuos que en este minuto están en mayor riesgo, y de hecho de entre ellos salió el primer contagiado local, ni siquiera están condenados. Es más, son inocentes hasta que no se demuestre lo contrario, pero están privados de libertad y además enfrentado este virus.

“Gendarmería a nosotros nos puso en conocimiento de lo que estaba pasando respecto a este contagio, y por esa circunstancia es que este módulo completo está en aislamiento preventivo. Como defensoría nosotros, con todos los imputados que están en las cárceles de la región hemos estado en permanente contacto sosteniendo periódicamente entrevistas con cada uno de nuestros representados para que ellos vayan teniendo clara la situación procesal en la que se encuentran y también como una política constante revisando estas prisiones preventivas para lograr que esta medida sea modificada por el arresto domiciliario total, por ejemplo. Así, ellos estarían menos expuestos”, aseveró.