• Foto: Lautaro Carmona. La curva que se ve al fondo y la velocidad lanzan a los vehículos, como el que aparece en la fotografía, contra las casas. Los vecinos dicen que la barrera de contención es muy baja y la calle no tiene el suficiente peralte.
Director del Departamento de Tránsito de La Serena se reunirá con los residentes y dirigentes del sector de la Población Escuela de Minas para analizar las condiciones y escuchar a los residentes del lugar.

El director de Tránsito de la municipalidad de La Serena reconoció que se reunirán con dirigentes y vecinos de la Población Escuela de Minas, ubicada frente al Parque Gabriel Coll, donde han ocurrido varios accidentes de tránsito que ponen en riesgo a la comunidad.

La reunión se realizará el lunes 12 de diciembre a solicitud de la presidenta de la unidad vecinal, Marlene Vega, quien ha manifestado su preocupación por lo que ha estado sucediendo en su sector.

La situación ha sido denunciada por los propios vecinos, luego del último accidente vehicular ocurrido el jueves, cuando un vehículo voló por los aires y fue a dar en el frontis de las casas, donde hacía escasos minutos habían estado jugando los niños del barrio, por lo que pudo haber ocurrido una tragedia de proporciones.

De acuerdo a lo planteado por César Sanhueza, director de tránsito del municipio serenense, el próximo lunes, a las 19:30 horas, se reunirán con los dirigentes y vecinos del lugar, “para revisar puntualmente el caso del accidente ocurrido el día de ayer ( el jueves), referente a ver si es posible modificar o instalar  una nueva barrera de contención, pero que cumpla con las medidas reglamentarias”.

Sanhueza dijo que todas las instalaciones de elementos de seguridad en la vía tienen que cumplir con ciertas especificaciones que están establecidas por el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones.

Explicó que esas instalaciones tenían que ver con el diseño de la vía, lo que normalmente no tiene que ver con las direcciones de tránsito, “nosotros somos una unidad administradora de los bienes nacionales en lo que respecta con tránsito, pero no somos quienes diseñamos ni quienes construimos las vías”.
De todas formas Sanhueza dijo que irían a evaluar, “nos preocupa la situación que ocurrió y vamos a concurrir con todo lo que sea necesario por parte nuestra para elementos de seguridad adicionales”, señaló.

Sin embargo, indicó que no había que olvidar que los elementos de seguridad como las señalizaciones, demarcaciones y todos los elementos que están en las vías públicas, en las calles y carreteras, no cumplen su efecto si los conductores no conducen a las velocidades adecuadas ni prestan los resguardos necesarios para una conducción segura. “Ningún elemento, por sí solo,  otorga el cien por ciento de seguridad cuando los conductores sobrepasan los límites de velocidad y los niveles de riesgo permitidos”, aseguró.

Casos repetidos 

El tesorero de la unidad vecinal de la Población Escuela de Minas, Ricardo Rivera, cuyo domicilio se encuentra precisamente a un costado de la vía en donde ocurrió el último volcamiento y que pudo provocar una tragedia, mencionó que “son varios los accidentes que han debido enfrentar y que en la mayoría se ha involucrado la imprudencia de los conductores. Se trata de una vía con curva, justo frente al Parque Gabriel Coll, que cuenta con barrera de protección, pero que los vecinos indican que es muy baja y que la calle no tiene el suficiente peralte (inclinación) para que los vehículos no sean expulsados hacia afuera cuando pasan por el lugar a velocidad.

Ricardo Rivera hace algunos recuerdos de los accidentes que le ha tocado ver, muchos de los cuales ni siquiera se conocen, ya que sus protagonistas huyen rápidamente del lugar.

Reseña que algunos la usan como pista de carrera y “algunos se han volcado con las ruedas hacia el cielo, pero paran los autos, se suben y arrancan”.
Cuenta que en una oportunidad un sujeto que conducía en estado de ebriedad también fue a parar con su auto casi encima de una camioneta de un vecino y que incluso intentó huir, pero los pobladores lo evitaron hasta que llegó la policía.

En otra oportunidad, hace mucho más tiempo, indica que un camión cargado con chirimoyas perdió toda la carga, la que fue a parar en el pasaje y sobre las casas. “Se sentía como piedras que caían en el techo, eran como las 12 de la noche, al final nosotros le ayudamos a recuperar la carga”, afirma.

Añade que “el auto que se volcó ayer (jueves) voló por el aire y cayó frente a una de las casas. Hacía pocos minutos se habían entrado los niños que jugaban en el pasaje”.

Se queja indicando que al joven que conducía “no le  hicieron ni el alcotest ni nada. A uno si sufre un accidente así lo esposan de inmediato y se lo llevan detenido”.

Insiste, como el resto de los vecinos, que la vía está mal diseñada, “porque la velocidad los tiende a sacar de la calle y caen acá abajo donde están las casas”, señala.

 

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