Vecinos piden que se estudie otro lugar para relleno sanitario

Malos olores, aparición de aves carroñeras y roedores en zonas residenciales y otra serie de problemas acusan las comunidades de los sectores El Sauce-Rinconada y La Herradura de Coquimbo, responsabilizando de ello a la operación del  relleno sanitario El Panul que hoy recibe el 64% de los residuos sólidos de toda la región.

Cabe señalar que este es el único recinto de este tipo que cuenta con la autorización pertinente para funcionar a nivel regional, y desde el año 1990 se emplaza a 8 km al sur de la zona centro de la ciudad puerto; operando  inicialmente como vertedero hasta el año 2005, tras ser certificado para realizar la gestión de residuos con una vida útil proyectada al 2018.

Así, en la región de Coquimbo se estima que se generan más de 265 mil toneladas de residuos al año, siendo las comunas de Coquimbo, La Serena, Ovalle, Salamanca e Illapel, las que en orden decreciente generan más volumen de basura. 

De este indicador y como se señaló, el 64% de los residuos llegan al relleno sanitario El Panul (Coquimbo, La Serena y La Higuera, utilizan el recinto), mientras que el otro 36% termina en vertederos ilegales. Sin embargo, a inicios de su habilitación este recinto estaba alejado de las zonas pobladas, las que con el correr de los años tuvieron una explosiva expansión hacia su ubicación. 

Este es el caso del sector El Sauce-Rinconada, donde los vecinos afirman que actualmente las viviendas  se encuentran a solo unos 3 kilómetros del recinto, siendo afectados por malos olores y otros problemas medioambientales.

Mismo hecho que acusan los pobladores del sector La Herradura, quienes además desde hace años luchan para erradicar una serie de microbasurales que proliferan cada día en los sectores altos. Sin embargo, avanzan de gran manera en el reciclaje y la concientización medioambiental de la comunidad local, y poseen uno de cuatro puntos limpios existentes en la región.   

VECINOS

Al llegar El Sauce-Rinconada por su principal y única vía de acceso, a poca distancia se pueden apreciar los cúmulos de residuos sólidos apilados entre los cerros aledaños al relleno sanitario El Panul.

En el lugar  Sajhonnara San Martín, presidenta de la junta vecinal local, recalcó que  ya no es posible que el relleno sanitario continúe funcionando en el lugar que se conformó inicialmente, “ya que hoy muchos coquimbanos son afectados por los malos olores y el negativo impacto ambiental con la aparición de plagas de roedores y aves carroñeras”, consignó.

Pero además, la dirigente social aseguró que “las autoridades comunales se comprometieron desde hace años a estudiar otra alternativa a este recinto, más aun considerando su saturación y que recibe casi toda la basura de las otras comunas de la región. Pero de eso no hay nada y los afectados somos muchos; más aún cuando se piensa en ampliar su tiempo de funcionamiento”, afirmó Sajhonnara San Martín.

Los vecinos de La Herradura apuntan a trasladar este recinto o estudiar otras alternativas, pero en lo inmediato  insisten en la necesidad de avanzar en minimizar el impacto del relleno sanitario mediante proyectos de reciclaje y la correcta gestión de los residuos.
Así lo entiende María de Los Ángeles Gallardo, ambientalista y habitante de La Herradura, quien sostiene que si bien no hay seguridad absoluta que sea el relleno sanitario el que produce líquidos percolados, desde el año 2013 solicitan a las autoridades realizar estudios de suelo ante las denuncias de la comunidad. 

“Por otro lado, al cambiar los vientos todo el mal olor de la basura llega al pueblo y sectores aledaños, siendo mucha gente la afectada. A ello se suman vectores como el gran aumento de aves como gaviotas y jotes y sus efectos”, consignó la ambientalista.

A razón de lo expuesto, la también habitante del sector La Herradura insiste en la necesidad de crear un proyecto más holístico y que incluya el destino final de los residuos, pero también que se encargue de reciclar. “Mientras  en un futuro próximo el relleno sanitario se debería trasladar, al ya estar inserto en medio de zonas residenciales”, concluyó María de los Ángeles Gallardo.

VISIÓN MUNICIPAL 

Si bien para la administración comunal de  Coquimbo recibir el 64% de los residuos sólidos de la región no es visto positivamente, están supeditados a esto al ser el relleno sanitario El Panul el único recinto disponible para ello y considerando que su funcionamiento responde a un modelo de negocio.
“El relleno sanitario funciona como un negocio  y no podemos impedir que llegue basura desde otras comunas al estar autorizados y fiscalizados. Hoy no tenemos mayores antecedentes de un proyecto de ampliación y mejoramiento del relleno  y sí creemos que el crecimiento de la ciudad hace que estemos atentos al impacto ambiental del recinto. De haber una propuesta de ampliación podremos opinar al respecto”, señaló Luis Henríquez, Secretario Comunal de Planificación.

Mientras que, el concejal porteño Alejandro Campusano, quien preside la Comisión de Medio Ambiente, indicó  que  oficiará a los organismos pertinentes a cerca de los problemas de las comunidades aledañas al relleno sanitario, “ya que no pueden continuar viviendo cercanos a un foco de insalubridad”, manifestó.

MINISTERIO DE MEDIO AMBIENTE

En la Secretaría Regional de Medio Ambiente,  afirman no existe otra propuesta para habilitar un nuevo relleno sanitario, pero sí, la presentación informal de un proyecto de ampliación del recinto de El Panul.

“Inversiones Panul Limitada expuso su proyecto de ampliación del relleno sanitario considerando que su vida útil es hasta el año 2018, pero este sólo será formal una vez que ingrese al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental”, consignó Verónica Pinto, seremi de Medio Ambiente, quien además agregó que “a través de la Secretaría Ejecutiva de Residuos se está instando a los municipios a que postulen a los fondos disponibles para contar con otras alternativas de gestión de residuos”, finalizó.